Mi vida con los Hargreeves

Capítulo 4: La atención de Cinco

En este mismo capítulo encontrarán las dos opciones de la reacción de Cinco a su entrenamiento fallido o exitoso. Busquen y sigan leyendo la que corresponde a su elección.

(Entrenamiento fallido)

Al terminar el entrenamiento matutino, permaneciste en el patio recuperando un poco de aire, apartad@ del resto de tus hermanos adoptivos. Cinco, quien te había estado observando durante todo ese tiempo, se acercó hacia ti para hablar. Previamente habiendo hablado con Reginald.

—Número Ocho. Tu rendimiento de hoy fue lamentable —expresó Cinco, con total sinceridad y sin ningún tipo de tacto al decirlo.

Para ser el único de los hermanos que hasta el momento no te había dirigido la palabra, te tomó por sorpresa lo directo que podía llegar a ser. En un principio hasta te costó reaccionar.

—Sé que me falta mucho para estar... —habías empezado a responder, y él volvió a interrumpirte.

—Al nivel de cualquiera de nuestros hermanos, lo sé —acotó, en el mismo tono, para luego agregar una orden disfrazada de sugerencia—. Intenta no desvelarte absurdamente, si pretendes ser parte del equipo.

Instintivamente llevaste una mano debajo de tus ojos, estando segur@ de que tus ojeras para entonces ya estaban demasiado marcadas por el cansancio acumulado. Apenad@ de que te hayan visto en ese estado.

—Como sea —continuó hablando, sin prestar atención a tu preocupación por tu aspecto, no era algo en lo que Cinco reparara—. Nuestro padre quiere que ocupe mi preciado tiempo en entrenarte fuera de horario. Iniciamos luego de finalizar las lecciones de estudio.

Fue todo lo que dijo. No parecía muy contento de tener que ayudarte con esa tarea, como si pasar tiempo contigo fuera un desperdicio o algo desagradable. Te preguntabas por qué Reginald no habría asignado a otro de tus hermanos para entrenar más arduamente, alguien quien no te hiciera sentir como si fueras una carga.

Cuando ibas de camino hacia el interior de la Academia te cruzaste con Ben, y él se acercó hacia ti para decir algo por lo bajo.

—Discúlpalo, él es un poco...

—¿Cretino cuando quiere? —cuestionaste, asumiendo eso sería lo que diría.

—No se le da muy bien confiar en las personas, pero mejorará cuando se conozcan más —parecía que Ben quería excusar a Cinco.

—Lo dudo... 

—Por cierto, para animarte, ¿por qué no nos acompañas esta tarde a Griddy's? —te preguntó, en igual tono bajo de voz, como si de un secreto se tratara—. Papá no lo sabe pero, nos gustaría aprovechar esta oportunidad para conocerte.

Suponías que Reginald no les permitía salir, pero el riesgo valía la pena si tendrías la oportunidad de conocer un poco más al resto de tus hermanos.

(Entrenamiento exitoso)

Cuando finalizó el entrenamiento, algunos de tus hermanos se acercarían a felicitarte por tu optimo rendimiento. La consideración de ellos a tu esfuerzo te daba mayores ánimos sobre estar bien encaminad@, haber iniciado con buen pie.

Una vez que la mayoría de los miembros del equipo se encaminaran hacia el interior de la Academia, tú decidiste quedarte sol@ unos minutos más en el patio. Cinco, quien te estuvo observando durante todo el entrenamiento, se acerca hacia ti para hablar, aparte del resto de los Hargreeves.

—No estuvo tan deplorable para ser un/a novat@, sin embargo hay muchas cosas por mejorar —te señaló, de manera totalmente directa.

Para ser el único de los hermanos que hasta el momento no te había dirigido la palabra, te tomó por sorpresa lo directo que podía llegar a ser. En un principio hasta te costó reaccionar.

—No sabía que necesitara un reporte de mi rendimiento, de alguien que no sea nuestro padre... —estabas respondiendo, pero él volvió a interrumpirte para hacer una corrección a tu suposición.

—Observación.

—¿Qué? —preguntaste, confundid@.

—No es un reporte, es una observación —te aclaró a lo que se refería—. Para que no creas ya con eso estás lista para las misiones.

No entendías a dónde quería llegar con esas palabras, pero no tenías tiempo ni ganas como para continuar indagando. Ese tono altanero en que te hablaba te resultaba totalmente irritable.

—Sí, como sea —le restaste importancia, antes de girarte para dirigirte hacia el interior de la Academia.

Reginald les había informado que tenían sólo 20 minutos para alistarse para la primera lección de estudio, por eso te apresuraste a regresar a tu dormitorio. Pero, a mitad de camino, volviste a encontrarte con Cinco que se había teletransportado hasta allí, frente a ti.

—Solo no nos hagas quedar en ridículo en la próxima misión —te advirtió Cinco.

Y fue todo lo que dijo. Quisiste haberle respondido con algo irónico o en tu defensa una vez más, pero así como apareció ante ti volvió a desaparecer. Era exasperante cuando usaba sus poderes de ese modo.

—Tendrás que acostumbrarte, suele hacer eso todo el tiempo —mencionó Allison, que se encontraba en el pasillo a pocos pasos de ti, y había observado esa situación.

—Qué fastidio —dejaste escapar un suspiro pesado, negando con tu cabeza para despejar tu mente de aquel no tan grato momento.

—Lo es, pero no le prestes atención —te aconsejó, para luego acercarse hacia ti y mencionar por lo bajo, como si de un secreto se tratara—. Por cierto, en la tarde iremos a Griddy's, ¿te gustaría acompañarnos?

—Sí, supongo que me haría bien distraerme un rato —de manera inconsciente te encontraste respondiendo en un mismo tono de voz, para que nadie más pudiera escucharl@s.

—Solo no lo menciones a papá —sugirió.

No era necesario preguntar por qué, por lo poco que habías conocido a Reginald sabías era muy estricto como para permitirles perder el tiempo de ese modo. Sin embargo parecía un buen riesgo por correr, de ese modo podrías llegar a conocer un poco más a tus nuevos hermanos adoptivos.

[...]

Para el próximo capítulo no necesitarán hacer una elección, será un capítulo en general para ver la dinámica entre los hermanos Hargreeves y su relación general contigo.