Capítulo 11: ¿Celosa Allison?

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Después de unos segundos tomaste el valor para abrir la puerta, y te encontraste con Allison. El temor de que Reginald también estuviera cerca de allí, te atacó por un instante. Si así fuera podrías arruinar la situación para ti y tu nuev@ amig@, extendiendo su castigo.

Te asomaste por un instante al pasillo, para comprobar que afortunadamente su padre no estaba cerca de allí. La puerta había quedado entreabierta de tal modo que también se veía que había alguien más en el interior de la habitación.

—Chic@s, ¿pasó algo para que estén despiert@s tan tarde? —preguntó Allison, con un tono de preocupación.

Lo que menos querías era inquietarla pensando que algo malo pudo haber sucedido, por eso te apresuraste a aclarar la situación.

—No, no, tranquila. Solo no podíamos dormir, y nos quedamos hablando... —dijiste, y tu otr@ herman@ asintió confirmándolo—. Se hizo demasiado tarde sin que nos diéramos cuenta.

—Entiendo... —asintió la Número Tres, aliviada de que estuvieran bien—. Pero sí, sería mejor que vayan a dormir ahora, antes de que papá nos descubra despiert@s y vuelva a regañarl@s —les sugirió.

—Tienes razón —admitiste, para disculparte por los dos—. Lo siento...

Bajaste la mirada, casi sin darte cuenta de que tu nuev@ mejor amig@ se estaba despidiendo para irse, apenas conseguiste saludarle antes de que se retirara de la habitación, para volver a la suya.

—Por favor, no lo digas a nuestro padre... —le pediste a Allison.

—No, descuida, jamás l@s metería en problemas —negó de inmediato.

—Gracias, Allison, eres un sol.

Avanzaste unos cortos pasos, para rodearla entre tus brazos en un cálido abrazo de agradecimiento. Ella lo correspondió de manera gustosa, asintiendo una vez que se apartaran, y ofreciéndote una de sus más encantadoras y cálidas sonrisas.

—Solo, por favor, no te metas en más problemas —te pidió encarecidamente.

—No lo haré, lo prometo —asentiste, aunque claro no podrías estar segur@ de poder cumplir con esa promesa.

—Y la próxima vez que planeen hacer una pijamada, por favor piensen en invitarme también, a todos sería aún mejor —te propuso.

Sonreíste ante su sugerencia, y efectivamente te parecía una muy buena idea. Asentiste, estando de acuerdo pues de ser posible podría ser una buena oportunidad para acercarte más al resto de tus hermanos también. Y claro, a ella en especial, que era quien te intrigaba más y llamaba tu atención mayormente de los siete.

 Y claro, a ella en especial, que era quien te intrigaba más y llamaba tu atención mayormente de los siete

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El próximo capítulo será una repercusión de esta noche, que se relacionará con eventos futuros. Por esto, no hay necesidad de hacer una elección todavía.

Mi vida con los HargreevesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora