Mi vida con los Hargreeves

Capítulo 16: El misterio (Luther)

Este capítulo se corresponde a la elección de Luther mejor amigo.

[...]

Mientras iban de camino al gran comedor, después de que Grace los llamara haciendo sonar la campanilla como era costumbre en la Academia, habías tenido apenas unos pocos minutos para poder comentarle a Luther sobre tu hallazgo.

Él te confesó que desconocía un lugar tal como describías, pero que para asegurarse de qué se trataba podían ir juntos a explorar el lugar en la madrugada. Después de todo él también sintió curiosidad por descubrir de qué se trataba.

Durante la cena, estaban sentados uno junto al otro, y Luther apoyó su mano sobre la tuya para calmar tu ansiedad. Debían poner mayor empeño en no demostrar estar nerviosos, para que Reginald no sospechara nada sobre lo que harían más tarde.

—Calma, por favor... —te sugirió por lo bajo, para que solo tú pudieras escucharlo.

Tú asentiste, intentando hacer una mejor labor al disimular que todo estaba bien, teniendo que tomar una bocanada de aire que eliminaría en parte los nervios acumulados por lo que tenían planeado hacer más tarde.

En cuanto la cena terminó, junto a Luther caminaron un poco más a prisa para apartarse del resto de sus hermanos, de esa manera podrían hablar antes de retirarse a sus habitaciones.

—Esperaremos hasta que todos estén dormidos, y vendré a buscarte —te sugirió el Número Uno—. Tengo algunas linternas, por si nos hacen falta.

—Gracias Luther —respondiste, aliviada de que hubiera aceptado acompañarte a investigar—. No sabía qué hacer, pero ese lugar me da un mal presentimiento.

—Ya descubriremos qué es, no te preocupes —mencionó, con confianza en poder descubrirlo.

Aunque en parte Luther todavía tenía dudas de que fuera algo malo lo relacionado a aquella extraña habitación de la cual le comentaste.

Una vez que estuvieron en la planta alta, cada uno tomó el camino hacia sus respectivos dormitorios, para seguir el plan de no levantar sospechas.

Los nervios te estaban carcomiendo, pero era mayor la curiosidad por descubrir por qué tenían ese lugar tan extraño.

Y a la vez tus pensamientos estaban conducidos a imaginar un sinfín de posibilidades, incluso llegando a imaginarlo como un sitio de tortura que su padre había construido allí. Pero, ¿para quién?

Tal como lo prometió, Luther llegó a tu dormitorio minutos después de que toda la mansión estuviera en completo silencio. Confirmando de esa manera que ya todos estaban durmiendo. Te extendió una de las linternas que traía consigo, y juntos emprendieron camino hacia el cuarto misterioso, siendo tú quien lo guiaras porque conocías el camino hacia allí.

—¿Cómo llegaste hasta aquí? —te preguntó cuando iban atravesando el pasillo que se asemejaba a un túnel—. ¿No se suponía que debías estar descansando?

Por lo que decía, te confirmaba que él tampoco había estado en ese ala de la mansión antes. ¿Qué otras circunstancias más les estaría ocultando su padre?

—Debía... —respondiste entre dientes, añadiendo una explicación a continuación—. Pero también me estaba aburriendo, y empecé a recorrer la Academia. Así fue cómo llegué hasta aquí.

—Y esa es la puerta que mencionaste... —supuso él al llegar frente a la misma.

Apuntaron hacia lugar con las linternas para iluminar la puerta. Todo seguía tal como lo habías visto más temprano.

Ambos se aproximaron, y la primera intención de Luther fue la misma que tú tuviste más temprano, intentar abrir la puerta. Y él también sin éxito alguno pese a su fuerza sobrehumana.

—No entiendo, ¿por qué habrían construido este lugar? —murmuró, frustrado por no poder abrir la puerta—. Parece como una de esas habitaciones aislantes de sonido...

—No lo sé, eso es lo que más intriga me da —te encogiste de hombros al responder, igualmente confundid@—. Y cómo ustedes lo desconocían también...

—Esto es demasiado extraño...

Luther volvió a intentar forzar la puerta, y cuando creían estar a punto de abrirla, repentinamente escucharon unas pisadas acercándose por detrás de ustedes.

—¿Qué hacen aquí ustedes dos? —se escuchó el eco de la voz de su padre, en un tono enojado.

Para su mala fortuna habían sido descubiertos, no había manera de escapar ya.

El siguiente capítulo será una repercusión de esta noche, y las consecuencias de haber sido descubiertos por Reginald. Siguiendo el hilo correspondiente a Luther como tu mejor amigo.

Este misterio igualmente será resuelto en la ruta de Vanya y tú, es decir a la ruta correspondiente a Vanya si la han elegido como su chica. Pero, todos estarán al tanto sobre la existencia de este cuarto misterioso.