minho se asustó cuando su teléfono comenzó a vibrar en su escritorio. estaba observando un cuerpo celeste a través del lente de su telescopio, concentrado y sumido en el silencio de la noche, cuando el aparato sonó casi estruendosamente.
con el corazón alterado por el susto, lo tomó. pero su corazón no se calmó cuando vio el nombre de hyunjin alumbrando la pantalla, y mucho menos con una llamada.
—hola, hyung. hacía un tiempo que no te llamaba...
—hyunjin, ¡me asustaste!
el menor se arrepintió al instante—: ¿te desperté? lo siento, yo no...
—no, tranquilo, estaba despierto —le interrumpió de inmediato, revolviéndose el pelo con su mano libre y tumbándose en la cama—. ya sabes, estudiando. no te preocupes por eso.
pasaron unos cuantos segundos hasta que hyunjin habló de nuevo—: hyung... —su voz sonó baja, casi tímida, y a juzgar por el ligero tono ronco supuso que el menor había estado intentando dormir—, ¿puedo verte?
minho entró en pánico, totalmente sorprendido por aquello. tenía un pijama amarilla, el cabello desaliñado y las mejillas rosadas por el frío que había recibido en la ventana. no era el aspecto que le gustaría mostrar al menor, a pesar de que habían dormido en la misma habitación varias veces antes. y sin embargo, no pudo negarse.
estaba emocionado, porque hyunjin no lo llamaba desde hacía mucho tiempo. sus mensajes tampoco eran tan seguidos porque el menor seguía distante con todos. aquella llamada era especial, no sabía el motivo por el cual hyunjin le estaba pidiendo verlo, ni mucho menos el por qué le había marcado esa madrugada, pero no se podía negar.
—claro. espera un momento...
minho tomó sus lentes de pasta para disimular el enrojecimiento de sus mejillas. encendió la lámpara de su cómoda para obtener mejor iluminación y acomodó la almohada en la que se recostaría. cuando estuvo decente en su propio criterio, activó la cámara.
lo primero que hizo hyunjin al verlo en la pantalla fue sonreír—: hola, lindo...
minho pasó por alto el adjetivo cariñoso y sonrió de vuelta, su corazón estaba alegre por ver a hyunjin en una posición cómoda y el cabello desordenado. sus labios se veía un poco más hinchados al igual que sus ojos; y al contrario del menor, quien solía despreciar esos detalles sobre sí mismo, minho moría de ganas por besar cada parte de su rostro con toda la ternura que le hacían sentir.
—¿no puedes dormir?
hyunjin negó, suspirando—: todavía es un poco confuso.
minho observó el rostro del menor por unos segundos. el chico se veía cansado, bajo sus ojos se notaban unas pequeñas bolsas oscuras. probablemente no era la primera vez que tenía insomnio.
—¿y esperas que te cante una canción de cuna? —bromeó inocentemente, a lo que hyunjin asintió riendo—. pues llamaste a la voz incorrecta.
—oh, no —hyunjin negó, bajando la voz un poco más. casi hablándose a sí mismo. minho pudo escucharlo perfectamente gracias al silencio sepulcral de ambos lugares. —estoy seguro de que llamé a la voz perfecta para mí.
minho empezó a bombear sangre con más velocidad al oírlo. el ligero tono rasposo de la voz del menor sólo lo hacía sonar más íntimo. sus hormonas se dispararon cuando lo vió echar su cabello largo hacia atrás ligeramente, y pidió a las entidades que sus mejillas siguieran rojas por el frío y no por lo que estaba sintiendo.
—eres un tonto.
hyunjin sonrió una vez más, provocando la propia en el mayor—: lo soy.
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ABRE LA VENTANA, LEE。 hyunho ✔️
Romance⠀ ⠀ minho es obsesivo con sus estudios y hyunjin sólo quiere respuestas de su ex novia. "está bien, ¡me voy! pero, ¿podrías decirle al menos que me conteste los mensajes? -no hubo respuesta, y en su lugar, el azabache apretó los dientes con rabia...