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hyunjin observó los labios rojos del mayor en cuanto cortó el beso.

perdió la cuenta de cuántos habían sido, ¿tal vez un par más? ¿o diez? quizá habían invertido una buena cantidad de minutos en ello, besándose. la lluvia de estrellas había cesado y habían terminado apoyados en el escritorio del mayor, éste siendo acorralado por los brazos del rubio, quien no paraba de sonreír.

—hyunjin-ah, me gustas.

—oh, ¿en serio? —respondió irónicamente, fingiendo que se sorprendía. minho rió y le dio un golpe suave en el estómago.

—arruinas mi momento romántico.

—está bien, déjame repararlo —carraspeó, enderesándose y mirándolo a los ojos. el mayor lo observaba, expectante—. también me gustas mucho, minho hyung, ¿quieres ser mi novio?

minho estaba sorprendido de la naturalidad con la que estaban llevando esa conversación. pensó que cuando llegara el momento estaría temblando y hablando con torpeza, pero en cambio estaban disfrutando del momento radiantemente.

se cruzó de brazos y volteó el rostro hacia un lado, abultando el labio con desinterés fingido—: si me vuelvo tu novio, ¿qué gano con eso?

—uhmm, no lo sé —el menor acercó su cuerpo al ajeno, apoyando su barbilla en el hombro del contrario. su voz bajando dos tonos, volviéndose casi ronca—. podría darte todo el amor que mereces. pasaríamos momentos lindos y te acompañaría en los momentos duros —movió su brazo, alcanzando una de las manos del mayor para entrelazar sus dedos. ¿no suena bien?

minho abandonó su papel de chico difícil y sonrió, sintiéndose libre de frotar su mejilla con el cabello claro de hyunjin con cariño. en su pecho abundaba un sentimiento agradable. estaba tan feliz y a la vez lleno de paz, como si ese momento fuera todo lo correcto.

—suena bien, acepto —contestó embobado, sintiéndose repentinamente extasiado con la cercanía del cuerpo de hyunjin y su aroma agradable.

hyunjin notó ésto y le besó en el hombro, sintiéndose de la misma manera que el mayor. tomó el cuerpo del  impropio entre sus brazos y lo llevó hasta la cama sin esfuerzo, mientras minho se dejó hacer sin rechistar. el menor cerró la ventana con calma y apagó la luz, dejando sólo la lámpara encendida.

minho lo observaba en silencio con una sonrisa suave, y cuando el rubio volvió a acercarse a la cama, lo recibió con los brazos abiertos. hyunjin se dejó abrazar con cariño. no quería volver a salir de allí.

dejó un pequeño beso en los labios del mayor mientras jugaba con su cabello. no habían palabras que describieran la alegría que sentían de estar juntos—: ¿quieres dormir?

minho negó, mirándolo a los ojos. estaba acostumbrado a estar despierto hasta altas horas de la noche y en ese momento no era la mejor opción. no cuando en su pecho había un derroche de sentimientos agradables—: ¿y tú?

—me has quitado el sueño —confesó, juntando sus frentes—. es un buen momento para que te diga lo mucho que me encantas y lo feliz que estoy de ser tu novio ahora, ¿no?

el mayor rió suavemente, asintiendo.

definitivamente era un buen momento para dejar salir todo lo que tenían guardado dentro de sus corazones—: te escucho.

ABRE LA VENTANA, LEE。 hyunho ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora