Donde las aves cantan

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La impulsividad de Brad al besar a Sonia hizo que mas de uno fingiera toser y terminara por incomodarse. Ross tuvo que detenerlo para evitar el ridículo y los invitados acabaron riéndose a causa de su imprudencia.

-Deberías calmarte no te parece?- Ross desaprobó el comportamiento

-Te pasas de pendejo. Mi hermana no es un juguete para que hagas eso- Arthur estaba enojado

-Que inapropiado y estúpido de tu parte. Agradece que a Sonia no le pasó nada- Leen y los demás criticaban a Brad.

-No paso nada, déjenlo en paz jejeje- Sonia no paraba de reír y se acomodaba la ropa que su esposo arruinó.

Decidieron dejar atrás el espectáculo y avanzar con la boda. Saludaron a todos, se sacaron fotos y recibieron vouchers de regalos de las tiendas que prepararon la ceremonia.

-Tío, me das dinero para comprar chocolate- el niño mono susurraba al oído de su tío para pedirle golosinas

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-Tío, me das dinero para comprar chocolate- el niño mono susurraba al oído de su tío para pedirle golosinas

-Dori no llevo dinero porque no soy un cajero automático y no necesitas comprar nada, todo es gratis. Pídele a la moza que te dé chocolates- Ross cargaba a Dori que estaba cansado

-Si te molesta dámelo- Agnes se preocupaba que sus hijos fueran una carga

-No, está bien debo empezar a acostumbrarme a cargar niños jeje-

Leen sonreía a su esposo mientras ella llevaba en brazos a su sobrino Frey. Los invitados miraban a la pareja que lucia más feliz que nunca cargando a sus sobrinos para la fotografía familiar.

Ya era más de mediodía y se dirigieron a Yamal Golf Club para continuar la fiesta. Todos iban en auto y ambas parejas abordaron una limusina cortesía de los alemanes para llegar sin demora. Filas de autos se dirigieron detrás poniéndolos nerviosos.

-No sabía que ser pariente de las liebres nos daría tantos privilegios. Lo único que pagamos fue el papel para las invitaciones, el resto fue puro regalo-

-Oye, hasta eso fue gratis. Me hiciste robar papel de la fotocopiadora y los plumones del area de contabilidad-

-Lo admito, me volví tacaño cuando conocí a Leen pero acaso no es bueno no haber gastado nada. Mañana en la tarde nos repartiremos los regalos, hay mucho para dividirnos-

-Eso si puedes separarlos. Esta lagartija nos hizo pasar vergüenza hoy, imagínate lo que hará luego. A propósito, han estado muy callados, por qué?-

-Hacemos lo mismo que ustedes cuando están tramando cosas-

-...-

-Así que ustedes también pueden...bien, creo que es un avance interesante. Callados para tramar cosas...jajaja-

-Jajaja no me arrepiento de ser tu esposo Leeny, estoy disfrutando cada momento. Ahora este par podrá mantenerse en silencio.-

Llegaron al Yamal Golf Club y la entrada estaba decorada con flores y tules blancos. Una gran alfombra roja les daba la bienvenida. Los empleados recibieron la noticia que eran dos parejas casadas y apuraron la marcha en acomodar los muebles.

El Hada Madrina mató al Príncipe Azul (Reboot)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora