"Y vivieron felices por siempre. Fin"
Todos los cuentos terminan bien, menos para la princesa Freya y el príncipe Thomas. El hada madrina Edaleen se embriagó en la boda y lanzó por accidente un rayo al príncipe. Ahora solo quedaba huir.
Pero en su c...
Durante las últimas semanas, Brad había estado entrenando como loco para poder igualar a Ross.
Habían llegado a un acuerdo, en que ambos entrenarían juntos. Ross lo iba a poner en forma, tanto física como intelectualmente y Brad le enseñaría conocimientos básicos sobre el mundo. Después de oír las razones de porqué Brad era tan idiota e inútil, le provocó rabia.
Brad era el menor de su familia y siempre escuchaba de sus parientes que el nació de casualidad y porque tuvo suerte ya que sus padres no le tenían mucha estima y esperaban que muriese a los pocos días.
Creció creyendo que no tenía lo que se necesitaba para ser un Trudy, incluso su metamorfosis de maduración a un dragón adulto nunca se dió, por ello se esmeró en los exámenes para ser un hada ya que fue dejado de lado en manos de sus abuelos pero estos lo dejaron al cuidado de las mucamas, mientras que sus padres se encargaban de sus hermanos que tenían gran fama entre las hadas.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
En las reuniones familiares, lo apartaban para no tener que hablarle o simplemente lo ignoraban. Ese desprecio se plantó en su cabeza y negando su realidad, se empeñó en colocar una pantalla para no ver a su alrededor.
El día que cometió un error y su varita se bloqueó, toda su familia parecía festejar que por fin se lo sacarían de encima. Le cerraron la puerta en la cara y sin opción de retorno algun día. Incluso con todo eso, seguía firme en su vaga creencia que los Trudy lo consideraban parte de su familia.
Ross pensó que Brad era demasiado necio y ciego para no darse cuenta. Entonces decidió llevárselo todos los días de 4 a 6am, aún con lluvias y tormentas a entrenar. Le sacaría la venda que cubría sus ojos a golpes.
Cuando Brad cayó en la cuenta que los Trudy lo estaban tomando de idiota, el rencor que tenía salió a flote y se esforzó más en tratar de vencer a Ross y sus bestias para sacarse la frustración. Aprendió mucho y estaba muy feliz, pero Ross se percató que algo andaba mal.
El aura que Brad comenzó a manifestar era abrumador. Ross conocía esa sensación pues lo había sentido en primera persona cuando estaba en la guerra y eso lo perturbó. Era la presencia de un asesino en potencia y temió que Brad terminara haciendo algo estúpido.
Pensó que su sed de sangre aumentaría día a día y no habría manera de controlar a su amigo cuando desatara su locura, hasta que un milagro cayó sobre ellos. Sonia llegó un día y trajo chocolates para todos y cuando se acercó a Brad, le dió la caja más grande y le dijo que se comportara si quería más. Leen ofendida con su hermana, empezó a discutir.
En ese momento, Ross se percató del cambio abrupto en Brad. Su aura se apaciguó, casi era el de un monje meditando y con eso nació la idea de como sacarse el miedo que sentía. Usaría a su cuñada de señuelo para calmar a la bestia.
Sonia era la excusa para manejarlo sin temor a salir lastimados. Pero...y si algo le pasara a su cuñada? Brad se volvería loco. Trató de encontrar otro modo de refrenar su demencia, entonces habló con Rocket, Morty y Sylph para ver como ayudarlo.
