Kirito
Acabábamos de poner el pie en la capital. Mi madre me ayudó con la maleta y el carro pues Asuna llevaba a un Dai durmiente entre sus brazos. Fuera de la estación, en el parking, nos estaba esperando Kyouko que nos llevaría a nuestro hogar.
- Menos mal que tenemos aquí todo montado ya - pensé en voz alta - porque estoy agotado y necesito sentarme en el sofá.
- Lo mismo venía pensando en el tren - respondió mi esposa con un hilo de voz, estaba todavía más cansada que yo dado que Dai seguía convaleciente.
Caminamos por la estación hasta llegar a la altura de donde estaba mi suegra. Guardamos todo en el coche y nos subimos, también llevaría a mi madre a Kawagoe. Mientras la madre de Asuna conducía por las calles de Tokio pensé que todavía no habíamos informado al jefe de mi mujer de nuestra llegada para que nos diera una cita. En ese momento comenzó a sonar el teléfono de Asuna, que respondió lo más rápido que pudo pues no quería despertar a Dai.
- Era mi jefe - me informó una vez colgó - en una hora tenemos cita con la pediatra en el hospital.
- ¿Hoy? - pregunté sorprendido y ella asintió.
- ¿Queréis que os acompañemos? - preguntaron nuestras madres y negamos con la cabeza.
- Solo nos dejarán entrar a nosotros a la consulta así que es una tontería que vengáis para quedaros fuera - respondió mi esposa - cuando nos digan algo os llamaremos.
Nuestras madres asintieron y Kyouko llegó a nuestro hogar. Bajé las cosas y subimos a nuestra casa, Asuna dejó a Dai en su cuna y nos sentamos en el sofá.
- ¿Has hablado con Eugeo? - me preguntó mi esposa.
- No, anoche le dije que veníamos hoy pero todavía no le he dicho que acabamos de llegar. Cuando salgamos del médico le llamaré y así también le cuento lo que nos han dicho.
- Deberías quedar con él y salir un poco, te vendrá bien - sonrió - estás muy pendiente de Dai y de mí, tú también tienes que descansar.
- Estoy bien, no te preocupes - besé su frente - cuando tengamos todo más claro le llamaré y me iré una tarde a pasarla con él, tranquila.
Asuna asintió y se apoyó sobre mi hombro cerrando los ojos, yo la imité mientras pasaba una mano por sus caderas. Al cabo de un rato sonó la alarma y nos despertamos pues teníamos que ir al hospital con Dai.
- ¿Vamos en tu coche? - me preguntó mi esposa y asentí pues era el más cómodo - entonces no cogeré el carro, lo llevamos en brazos.
Asentí de nuevo y, una vez mi esposa cogió a Dai, salimos de casa. Nuestro hijo estaba demasiado dormido, algo normal para ser un bebé de un mes y medio pero que a nosotros nos asustaba demasiado.
- No ha despertado desde que le has dado de comer en el tren - dije besándole la frente, me dio la sensación de que volvía a tener fiebre - ¿estará bien?
- No lo sé, ahora lo sabremos - respondió mi esposa - pero a juzgar por su estado, no está muy bien aún. Creo que nos han dado el alta demasiado pronto y tendríamos que habernos quedado una noche más - no pude decir nada ante esto pues coincidía con mi esposa.
Llegamos al coche y pusimos a Dai en la silla, Asuna se sentó a su lado y yo conduje hasta el lugar de trabajo de mi esposa. Cuando llegamos aparqué y seguí a mi castaña favorita por los distintos pasillos del hospital. Al cabo de unos minutos estábamos en la zona de pediatría y salía una doctora a llamarnos, vio a Asuna y la saludó. Entramos en la consulta y mi esposa le explicó todo lo sucedido desde que pasó lo de Sachi y los acontecimientos del parto y posteriores.
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Desde que te vi, Kirito y Asuna. Parte 2
FanfictionSegunda parte del fic "desde que te vi" Los personajes no me pertenecen. Están basados en la novela de Reki Kahawara "Sword Art Online". La historia puede contener material adulto.