La leyenda de escarlata

⚜️Capítulo 28⚜️

Regreso cuando el reloj marca las 2 pm. Llamo a Carusso para informarle las novedades y al llegar a nuestra sala de tácticas, ya tienen todo preparado, así que les ayudó con las cajas de documentos y vamos a la sala de tácticas 12, donde trabajan los Alfa. Al vernos llegar, dejan de hacer lo que están haciendo y nos prestan su atención.

- Como ya deben saber, por órdenes de la ministra, ustedes son nuestra nueva asignación - habló con un tono impersonal, carente de sentimiento, tal como me siento. Alexander se posa frente a mí con rostro de sorpresa.

- Entonces accediste...

- Son órdenes, comandante. No tengo opción - contestó seca - aquí están los datos recopilados durante los últimos dos años de Acmed Zare. Ya mi equipo está al día en el tema. Les daré dos días para que se empapen y procederemos con la logística de trabajo.

- ¿En dos días tenemos que aprendernos todo eso? - señala Amber.

- Nuestro trabajo consiste en informarlos y entrenarlos.

- ¿Eso que quiere decir exactamente? - inquiere Morgan, asomando sus ojos por encima de la carpeta que tomó de una de las cajas que trajimos.

- Quiere decir que los entrenaremos, capacitaremos y enseñaremos lo que se requiera para garantizar el éxito de está misión... - explicó y ya veo venir al toro, a Alexander no le gusta nada mi explicación.

- Ellos son mi equipo, no el tuyo...

- Y lo seguirán siendo, yo solo les daré herramientas que ustedes no poseen. Tengo autorización de nivel 6, lo que significa que en cuanto a poder, estoy por encima de usted, comandante - sus caras de asombro no se hacen esperar, pues dicha autorización tiene 7 niveles, siendo los generales y diplomáticos relevantes para el ejército, quienes tiene el nivel más alto - por lo tanto, dejemos las cosas claras desde un principio. No discuto las órdenes, si tienen problemas con eso, no es mi asunto. No me dueño de los equipos que se nos asignan, acabada la misión todo vuelve a la normalidad. No me interesa socializar, si mis efectivos quieren hacerlo, están en todo su derecho de compartir con quien mejor les parezca, en sus ratos libres. Estarán bajo mi cuidado...

- No eres nuestra niñera Ross!!! - truena Alexander furico.

- Si tiene problemas con esto comandante, hable con la ministra, a mi tampo me gusta en absoluto la idea de trabajar con ustedes pero son ordenes. Fue la ministra quien enfatizó que debo garantizar que regresarán todos enteros y si no están familiarizados con nuestra dinámica, no puedo hacer tal cosa - levantó la mano para callarlo, cuando intenta replicar - no sólo en rendimiento físico estamos mejor preparados, nuestro despliegue táctico y tecnológico es también muy diferente, así como también más avanzado, e incluye elementos que ustedes no manejan. Los capacitaremos como ya dije, y tenemos un mes para conseguirlo.

- Mi madre no mencionó fecha límite.

- Cómo sabrá comandante, los Fantom somos siempre requeridos como S. O. S , lo que significa que debemos estar siempre disponibles y no contamos con tiempo de sobra, para que las misiones sean muy largas. Además, no es la primera vez que hacemos esto y basándome en resultados anteriores, el período de tiempo que les estoy dando es bastante razonable - las caras de disgusto me demuestran que no están del todo de acuerdo con esto. A lo mejor pensaron que sería diferente con ellos si estaba obligada a tratarlos, pero como ya dije, no me interesa socializar - miren, no estoy interesada en usurpar el puesto de nadie - miro a Alex - tampoco en medir poderes a ver quien puede más. No tengo ni el tiempo, ni la disposición para hacerlo y ánimos mucho menos. Solo pretendo que trabajemos en armonía, por lo menos para que la misión no se vea afectada por nuestras diferencias.