La leyenda de escarlata

⚜️Capítulo 23⚜️

Otra vez siento que en cualquier momento lo perderé. No pueden culparme, mis experiencias a su lado siempre han sido así. Sé que le prometí a Max que no me aferraría y lo dejaría ir, pero no creo tener la capacidad de perderlo de nuevo. Me derrumbaré por completo, si lo hago y la sensación de que algo saldrá mal, no me abandona.

El domingo después de ese maravilloso despertar que tuvimos, nos duchamos juntos y al salir de la habitación al fin, Derek se había ido.

Solo dejó una nota diciendo que sentía mucho lo ocurrido y agradecía lo que hicimos por él. Sumándole un espero que hayas pasado un feliz día, a lo que Alex recordó, que Dereck me felicito en la noche, así que me regalo dos magníficos orgásmos en la cocina por mi fecha. No creo poder olvidar lo que pasó en la encimera.

Desayunamos mientras hablábamos bien del tema del topo. Es todo tan enredado pero a la vez tan simple, que se lamento el no haberse dado cuenta antes de lo sucedido.

Lo que más me dolió fue ver la decepción en sus ojos al repasar el caso y verificar que su difunto amigo, estaba involucrado desde hacía tiempo, en el negocio de la venta de armas. Y al parecer se aprovecho de su confianza para poner su firma en envíos, que nunca llegaron a sus manos.

Para después del medio día, los temas de trabajo quedaron prohibidos y nos dedicamos a consentirnos, aunque debo admitir que saque provecho de mi cumpleaños y obtuve más placer del que le di. Fue una tarde bastante movida.

Me dejó ir ya en la noche, no sin volver a poseerme una vez mas, y hacerme prometerle que le llamaría al llegar a casa. Dejé que Emma se quedara con su amiga, yo debía trabajar y concentrarme en ordenar la documentación para poder presentarla en la reunión, que se llevaría a cabo al día siguiente.

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Por un momento pensé que me sentiría bien cuando los tomarán bajo custodia. Que se apagaría el sentimiento de culpa, que el saberme usada dejaría de importar, que al ver los rostros de los chicos sentiría alivio de saberlos fuera de peligro. Pero no es así...

Lo que más me dolió, fue ver que uno de los hombres que me ayudó a formar como militar, terminó siendo igual que mi padre, pues me uso para acabar con personas que se interpusieron en su camino, sin importar si eran inocentes o no.

Duele saber que aún sigo siendo esa ficha que se usa para fines lucrativos y egoístas. Estoy del otro lado de la ley ahora, donde se supone que debía haber estado desde un principio y aún así, no soy más que una asesina, a la orden del poder. Basura, así me siento.

Y Novoa... Ella fue aún peor. Después de que le recitaran los cargos en su contra, señalando la investigación qué realice, recabando pruebas contundentes en contra de los implicados, solo pudo verme con rencor y al ver que la esposarían, empezó a luchar con todos y a gritar, cuanto me odia y que soy la culpable de haber roto a el equipo, que me arrepentiré de haber hecho esto.

Sé que es una tontería pero me siento muy mal. Se hizo justicia pero el escuadrón Alfa quedó deshecho y aún no estamos a salvo, todavía queda el juicio. No me siento triunfadora para nada en lo absoluto.

- No es tu culpa Scar - Ben me saca de mis pensamientos - ellos tomaron su decisión y aunque de Rick no me esperaba algo así, fue él quien nos traicionó, no tú - aún estámos en la sala donde se llevó a cabo la reunión.

Del otro lado de la mesa permanecen los tres Alfas, que junto a mi, salimos exonerados en este caso. Más en sus facciones no se aprecia nada bueno. "Solo miralos y dime si no soy culpable" Pienso decaída.

- Pero fui yo, quien mató a esas personas Ben -replicó, con los ojos clavados en la pantalla, aún encendida, de la sala. Los rostros de cinco objetivos, que terminaron siendo víctimas de las manipulaciones avariciosas de Rick, y perdieron la vida por mi gatillo. Es repugnante - ¿que pasará ahora? ¿Con Alex y los chicos? ¿Conmigo?