~*~*~
𝑃𝑎𝑡𝑒𝑟𝑛𝑖𝑑𝑎𝑑...
¿¡𝑄𝑢𝑖𝑒𝑛 𝑐𝑎𝑟𝑎𝑗𝑜𝑠 𝑑𝑖𝑗𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑟𝑎 𝑓𝑎𝑐𝑖𝑙.
.
.
.
.
Despertar con dos personas en la cama hubiera sido el mayor deseo o fantasía para cualquier persona, que se encontrará en esa etapa donde sus hormonas tenían una mayor influencia que su cabeza. Cómo sería el caso de un pibe que solo podía pensar en ponerla en dónde fuera y divertirse como un salvaje por una noche entera.
Pero Matías no era un adolescente, sino que un veinteañero que tenía una pareja, con el cual mantenía una relación más que "estable", bueno eso quería creer, y un hijo de cinco años, que si bien no llevaba su misma sangre, lo era ante la ley y ante todos los documentos que firmó aceptando de esa manera la paternidad del morocho.
Quién ahora se encontraba de espalda hacia él, muy cerca del cuerpo de Mauro, el cual había terminado por abrazar al más pequeño, quien parecía aferrarse como si su existencia dependiera de ello al otro. Y a pesar de no querer sentirse celoso, Spallatti empezaba a querer todos los abrazos y contactos para él solo, porque sentía que se los tenía más que merecido y que Mateo no era más que un molesto intruso en su vida y relación.
Aunque antes de seguir pensando en cosas que no serían para nada productivas o que lo ayudarán a confirmar que nada de esto había sido una mala idea, y sobre todo que tomar sus cosas e irse lo más lejos posible de Monzón no era la solución que debería de buscar para solucionar sus problemas. Ya que Mauro iba a quedar sumamente desbastado si hacia eso, y él no deseaba que el corazón del peliblanco termina hecho pedazos, y que se resintiera con los demás o con el rizado, el cual tampoco se merecía pasar por las mismas situaciones que ya había vivido antes.
Así que Spallatti prefirió salirse de la cama sin hacer mayor ruido, para después dirigirse rápidamente al baño, dónde se sacó casi todo lo que traía puesto, quedando solamente con su ropa interior. A lo que prosiguió a llenar la tina, para poder darse un pequeño baño de agua fría que pusiera en orden todas sus ideas, tal como lo había hecho con Mateo, aunque con este buscaba que se tranquilizara y dejara de gritar.
Por lo que se metió sin dudar a la bañera, disfrutando de todas las sensaciones relajantes que el agua le podía otorgaba, permaneciendo hasta cierto punto inmóvil en una misma posición por mucho tiempo, sin importar nada más que el mismo. A no ser por unos bruscos y turbios movimientos del agua, que hicieron que Spallatti volviera a la realidad en un santiamén, aunque se terminó asustando un poco, pero se relajo cuando se percató que el causante de que toda su paz se rompiera era Mauro, el cual se encontraba en las mismas condiciones que el.
—Buenos días amor. — Monzón lo saluda enérgicamente, casi cantando con su tan hermosa y melodiosa voz, que era más que perfecta para el otro.
—Hola, buenos días Mauro. — Matías responde de inmediato, concentrándose en algún punto lejano al peliblanco, quien vuelve a remover el agua para llamar su atención. —¿Sucede algo? — consulta de inmediato.
—No, solo quería darte las gracias por lo de anoche. — Monzón contesta algo vacilante.
—Oh, eso... No es nada. — Matías murmura aún sin ver a la cara al menor.
—¿Te acordás de lo que pasó anoche, verdad? — el ojiverde inquiere con cierta curiosidad, recibiendo un rápido "Si" como respuesta.
ESTÁS LEYENDO
|| Paternidad... ¿¡Quién carajos dijo que era fácil!? : Litcko ||
Fanfiction𝑃𝑎𝑡𝑒𝑟𝑛𝑖𝑑𝑎𝑑... ¿¡𝑄𝑢𝑖𝑒𝑛 𝑐𝑎𝑟𝑎𝑗𝑜𝑠 𝑑𝑖𝑗𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑟𝑎 𝑓𝑎𝑐𝑖𝑙!? ╰ ✶ Solo será por una semana o más quizás, decía... ✶ ╯ ╰ ✶ Solo se quedará con nosotros mientras las cosas en su casa mejoren o se le encuentre algún mejor luga...