|| Paternidad... ¿¡Quién carajos dijo que era fácil!? : Litcko ||

🧸 [𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝟤𝟧] 🧸

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𝑃𝑎𝑡𝑒𝑟𝑛𝑖𝑑𝑎𝑑...
¿¡𝑄𝑢𝑖𝑒𝑛 𝑐𝑎𝑟𝑎𝑗𝑜𝑠 𝑑𝑖𝑗𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑟𝑎 𝑓𝑎𝑐𝑖𝑙

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—Mateo. — Monzón pronunció el nombre del menor, quien se aferraba a sus piernas con fuerza. —¿En verdad paso eso o estás diciendo una mentira? — consulta, queriendo que el contrario confesara la verdad por su propia cuenta.

—Si, eso fue lo que pasó. — Mateo responde de inmediato, pensando que con su actitud iba a convencer a Mauro de que todo lo que decía era verdad. —Él me quiso pegar como mi papá lo hacía, así que es malo, es muy malo. — agrega, soltando un par de sollozos en el proceso, dándole un extra a su gran "actuación" para poner a Monzón de su lado.

—Pero que mierd... — Spallatti intentó decir, pero el ojiverde le impidió que completara la frase que pensaba soltar sin tapujos.

—Mateo, yo conozco muy bien a Matías, y él sería incapaz de lastimarte. — Mauro comenta, mientras llevaba al contacto hacia el sofá, para poder hablar con mucha más comodidad y de una manera más directa. —Así que es más que evidente que me estás diciendo una mentira, y mentir está mal, por lo que quiero que me digas lo que pasó ahora mismo. — pide, no sonando molesto, aunque si lo estuviera por dentro, porque no quería que su relación se fuera a la mierda por más inconvenientes que se podrían evitar hablando de manera civilizada.

—Nada, no pasó nada. — Mateo responde, mientras intenta escapar rápidamente de la escena, al ver que su plan había resultado frustrado en todo el sentido de la palabra, pero el mayor no lo dejó irse. —Mauro soltame, soltame Mauro. — le exige con molestia.

—No te voy a dejar ir hasta que me digas lo que sucedió. — Monzón le informa con firmeza, no dejándose manipular por nada de lo que le dijera el morocho, quien solo es capaz de verlo sumamente indignado ya con los ojos aguados.

—Yo empuje a Sativa del sofá y Matías se molestó por ello. — Mateo contesta por fin con la verdad, sintiéndose un poco mal por haber "lastimado" a la gata. —Y Matias se acercó hacia mí para poder tomar a Sativa, pero yo pensé que me iba a pegar y fue por eso que te grité y te mentí un poquito. — agrega, sin ver al otro a la cara.

—Muy bien, me alegra mucho que me dijeras la verdad. — Monzón le agradece por su tardía sinceridad. —Pero también me siento molesto con vos, por haberme mentido sobre Matías y por hacerle daño a Sativa, cuando ninguno de los dos hizo algo malo. — confiesa, escuchando claramente como el menor chilla asustado ante sus últimas declaraciones. —Mentir está mal Mateo, al igual que lastimar a alguien que no te ha lastimado. — dice firme. —En especial a personas o animales que no se pueden defender en nada. — argumenta. —Y está más que claro que Sativa no te va a entender el motivo por el cual la quisiste lastimar. — comenta. —Así que no quiero que vuelvas a hacer esto nunca más, porque si no me va a tocar darte un castigo por mentiroso. Y sinceramente no quiero castigarte por eso, pero no me vas a dejar otra opción si te sigues comportando igual. — afirma, pareciendo haberle dejado las cosas más que claras al menor que solo asiente en silencio. —Ahora quiero que le pidas disculpas a Matías por haber mentido sobre él y querer que se viera como el malo de la situación. — ordena, esperando pacientemente a que Mateo le dijera algo a su pareja.