Después de saludar a mi tía, a Albert, a los padres de Mad, a los padres de Justin y a los de Lexi, nos quedamos un rato en la sala sentados en el sofá charlando, pero Dylan no aparece en ningún momento y comienzo a preguntarme si está bien, y cada minuto que pasa me pongo más nerviosa.
- Dylan sigue sin bajar.- Dice mi tía cortando la conversación y mirando hacia arriba.- Hasta que no baje no cenaremos.- Se encoje de hombros y me mira a mí y yo repito su gesto sin saber qué hacer.
- La mesa está preparada para todos y si seguimos esperando se va a enfriar.- Dice Albert y justo en ese momento entra Dylan por la sala y me muerdo el labio inconscientemente al verle con traje.
- Ya estoy aquí.- Anuncia sonriente.- Ya no tenéis que esperar más, vamos a cenar que me muero.- Veo que respira rápidamente, y frunzo el ceño. ¿Dónde habrá estado para estar tan exaltado?
- ¿Dónde has estado?- Pregunta mi madre.- Tranquilo cariño, no nos importaba esperarte.- Añade sin dejarle contestar a su pregunta y se acerca a él y él le sonríe tiernamente.
- He tenido que ir a arreglar unas cosas que me pidieron que hiciese fuera de casa.- Le explica y entonces me mira por fin y veo la sorpresa en sus ojos mientras yo le sonrío.
- A cenar entonces, ¿no?- Pregunta Marck y mi tía asiente y nos dirigimos todos a la mesa.
Durante la cena hablan de diferentes cosas todos muy animados, pero yo o puedo evitar desconectar y pensar en mis cosas durante la mayor parte de tiempo. Mad, de vez en cuando, me saca de mis pensamientos y mantiene una conversación conmigo de la universidad y cosas así, pero la verdad que no hago mucho caso a nada y respondo con monosílabos o asintiendo con la cabeza.
Marck y Lexi, al parecer, están contentos con mi comportamiento, ya que me sonríen. Creo que prefieren esto a verme animada como si nada pasara. El hecho de que hable solo usando los monosílabos les va bien porque así se aseguran que no se me va a ir la lengua. Con Dylan no he vuelto a intercambiar ni una sola mirada desde que nos hemos sentado, él me esquiva y yo también, aunque por dentro me muero por tenerle a él a mi lado y no al gilipollas que dice ser mi novio.
Una vez acabamos de cenar nos dirigimos todos en los coches a un club en el cual celebraremos lo que queda de fiesta. Aquí está toda la ciudad y me encuentro a Adley, Oliver, Jordan, Daniel y Carly. Nos unimos a ellos en la fiesta y Mad y yo comenzamos a bailar con Adley y Oliver animadamente y riéndonos. En ese momento siento que soy feliz por primera vez en la semana. Me siento libre, segura y me siento tranquila sabiendo que puedo ser yo misma sin tener que fingir algo que no soy y sin miedo a que me castiguen o me hagan daño.
Cuando el club se llena con más gente Mad, Adley y Justin me llevan a un sitio apartado de todos y nos metemos en una gran habitación en la que veo a una persona sentada en un sofá.
- Bienvenida a un lugar seguro.- Anuncia Adley sonriendo y yo frunzo el ceño sin entender nada, entonces es cuando la persona que está sentada en el sofá se gira y los ojos de Dylan se centran directamente en los míos, y noto como comienzo a ponerme nerviosa.
- Nada es seguro.- Les explico negando.
- Adri, somos tus amigos, sabemos que no estás bien, solo mírate.- Me señala Mad y yo miro mi cuerpo.- Ni siquiera tienes expresión en tus ojos, y te has operado las tetas solo para complacerle.- Dice incrédula yo niego.
- Tienes que contarnos que te están haciendo.- Habla Justin y yo vuelvo a negar.
- Vosotros me queréis de verdad, ¿cierto?- Les pregunto y todos asienten, menos Dylan que sigue sentad sin decir nada, solo me mira.- Pues si es así, no me obligues a contar nada que no quiero contar.- Añado.- Estoy bien, esto que me está pasando lo he decidido yo porque he querido, porque os quiero y os necesito en mi vida y con vida.- Les explico triste, dandoles pequeños detalles para que puedan atar cabos.- Así que por favor, no me volváis sacar el tema nunca más.- Noto como comienzo a llorar y Mad me abraza.
- Está bien.- Susurra mi amiga y yo asiento mirándola.
- Deberíamos salir, van a dar las doce.- Les digo y todos asienten.- Saldré yo primero si no os importa e iré a buscar a Marck, no necesito más broncas con él esta noche.- Les explico aun llorando y poniendo los ojos en blanco con una sonrisa falsa para que no se preocupen.
Ellos vuelven a asentir y me dan un fuerte abrazo a la vez que Dylan aparta la mirada y vuelve a mirar hacia al frente. Cuando me separo, me limpio la cara con las manos y suspiro antes de salir por la puerta.
Cuando encuentro a mi madre la abrazo por detrás y ella sonríe. Estamos hablando un rato hasta que Marck se acerca a nosotras.
- ¿Dónde estabas?- Me pregunta calmado.
- Bailando con Mad y Adley, y después he ido al baño.- Le miento y él asiente y me abraza.
Mi tía se acerca a nosotros dándonos unos matasuegras, a la vez que aparecen mis amigos con Dylan, y Carol nos explica que cuando sean las doce pitemos fuerte con el matasuegras y todos asentimos a la vez que comenzamos a gritar los números de la cuenta atrás hasta llegar al cero. En ese momento el club se llena de pitidos, gritos de feliz año nuevo y aplausos. Yo me abrazo a mi madre feliz y emocionada por estar aquí con ella.
- Gracias por la vida que me has dado todos estos años.- Le susurro llorando en su oreja y ella me mira sonriente.
- Y seguiré dándote la mejor vida hasta que me muera.- Me explica y ambas lloramos mientras me vuelve a abrazar.- Por eso te suplico que dejes a ese chico Adri.- Me pide y yo niego.
- No es tan fácil mamá.- Le explico aprovechando que gracias todos los gritos y la música alta, Marck no me está escuchando.- No hay nada en el mundo que me gustaría más ahora que dejarle y estar con el hombre al que de verdad amo, pero eso os pondría en peligro a todos mamá.- Le cuento llorando y noto como ella llora conmigo.
- Tú y Dylan sois muy valientes por hacer esto hija.- Me dice mirándome a los ojos y yo asiento aún llorando.- Te amo.
- Y yo a ti.- Le sonrío.
Le doy un abrazo a todos y les deseo un feliz año nuevo, menos a Dylan, y cuando llega el turno de Marck, él me da un pico en los labios, que yo no le devuelvo, pero le sonrío. Después de este gran momento, volvemos a la pista de baile a bailar los mejores temas del año que acabamos de despedir y cuando el DJ acaba con el último tema todos salimos al jardín del club, ya que nos anuncian que va a haber una sorpresa en unos minutos. Cuando salimos Marck se acerca a mí que estoy con mi madre y con mi tía, la cual nos acaba de decir que Dylan se ha ido a dejar a Lexi y a sus padres a su casa.
- ¿Nos vamos?- Me pregunta y yo comienzo a ponerme nerviosa, porque no me quiero ir y que me vuelva a encerrar en su casa.
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Your Destiny
Teen FictionYo sabía que mudarme a los Ángeles iba a suponer un gran cambio en mi vida y que, seguramente, acabaría por pasarme factura. Lo que no sabía era que se iba a cobrar tan cara. Cuando volví a casa tras enterarme del engaño, no podía hacer nada por dej...