- Bueno Adri.- Comienza a hablar Mad.- Vamos a hablar seriamente ¿Cómo estás?- Pregunta y seguidamente le da un sorbo a su café mirándome detenidamente y seria.
- Pues voy tirando como puedo.- Le digo sincera.- No os voy a decir que estoy bien y que no me sigue doliendo porque os estaría mintiendo.- Cojo aire y miro mi taza y le doy vueltas a la cuchara.- Pero he aprendido a vivir con ello y hace que no duela tanto.- Les vuelvo a mirar y veo como Mad ha cambiado la mirada y ahora me mira triste, y yo bebo un sorbo de mi taza para quitarle importancia a lo que les acabo de decir, aunque sé que realmente la tiene.- ¿Y él cómo está?- La pregunta se me escapa sin haberla pensado bien, y suena como un suspiro.
Mad y Justin se miran tristes cuando les hago la pregunta y después me vuelven a mirar a mí, y yo espero a que me respondan antes de arrepentirme del todo por haberlo preguntado.
- Él se está volviendo loco Adri.- Habla esta vez Justin y me sorprende la respuesta. Pero quiero saber más por qué no entiendo muy bien a qué se refiere, así que simplemente le miro esperando a que siga hablando.
¿Estará tan afectado por mí como lo estoy yo por él? ¿Estará jodido con su propia mentira? ¿O solo está haciendo el papel de que está mal para que vuelva a caer en sus engaños? Aún que sinceramente no sé que ganaría, ya ha cumplido su contrato, me ha roto el corazón en mil pedazos y no sé como reconstruirlo.
- El día que te fuiste cogió un avión y se vino hasta aquí, nos pidió a todos tu dirección para hablar contigo y explicártelo todo, pero ninguno se la quisimos dar.- Escucho a Justin atentamente y estoy entre horrorizada, sorprendida, desconcertada y sobre todo, rota por dentro.- Estuvo aquí una semana entera buscándote sin descanso, pero como no te encontró decidido rendirse y volver a California.- Pongo los ojos como platos y Mad me coge de la mano para tranquilizarme.- Una vez allí nos contó su versión de lo que había pasado, en ese momento nosotros ya sabíamos todo, ya que tú nos lo habías contado y estábamos enfadados con él, pero es mi amigo y lo vi realmente hundido en sí mismo y realmente le creo.- Respiró hondo y noto como las lágrimas se acumulan en mis párpados.
- Adri, no pasó como tú crees.- Dice Mad apretándome con fuerza de las manos y noto como las lágrimas comienzan a caer sobre mis mejillas.
Mad se levanta de su asiento y se sienta a mi lado y me acaricia la espalda suavemente para que me relaje.
- Sabemos que le tienes bloqueado, y también entendemos que esto es duro Adri.- Asiento, porque esto no es duro, es MUY duro.
- Esto es durísimos chicos.- habló entre sollozos.- Imagínate que te lo hace a ti Justin.- Miro a Mad y ella baja la mirada.- O tú Justin, si te lo hiciese a ti Mad.- Él me mira y asiente.- No tengo ganas de hablar de él, y mucho menos de hablar con él.- Sollozo.- Pero en el fondo, cada día miro el móvil quinientas veces mirando su contacto y pensando en desbloquearle, porque mintiese o no, ahora mismo lo necesito, necesito saber que pasó por su jodida cabeza para hacer eso.- Mad me mira triste y Justin también.- Pero en el fondo, tengo miedo a que la verdad me haga aún más daño.- Les confieso finalmente en un susurro y me muerdo el labio mientras me quito las lágrimas que caen por mis mejillas.
- Nosotros creemos que lo tienes que escuchar.- Confiesa Justin mirándome serio y veo que Mad asiente.- es mi amigo y te prometo que nunca lo había visto tan roto con nada, ni cuando murió su madre estuvo así.- Me acaba de explicar Justin y me hundo completamente y los sollozos salen descontrolados.
Mad me abraza con fuerza y Justin se levanta y me abraza también, escucho como a Mad se le escapa un sollozo y la miro.
- Esto también es duro para nosotros Adri.- Solloza ella.- Estamos viendo cómo os hundís por una cabronada que hizo Dylan, pero que realmente no es lo que te crees.- Me mira y me limpia las lágrimas y después se seca las suyas.- Tú sabes que yo sí sé que Dylan lo hace mal soy la primera que te pide que te alejes, pero esta vez te pido que le des la oportunidad de ser escuchado igual que escuchaste a Marck.- Me pide mi amiga y asiento.
- Está bien.- Respondo en un susurro.- Pero no creo que por teléfono sea lo mejor y a demás no puedo volver a California ahora.- Explico y ellos asienten.
- Él nos ha dado esto para ti.- Mad saca una carta de su pequeño bolso y me la da y veo la letra de Dylan en el sobre "Para la persona a la que quiero de verdad" Acaricio la letra y suspiro.- Léela, creo que ahí lo explica todo.- Asiento y dejo la carta encima de la mesa.
- ¿Creéis que me quiere?- Les hago la pregunta que me lleva rondando desde el momento en que me enteré de todo lo del contrato, y esa pregunta me atormenta cada día desde que cogí el avión para venir a casa.
- Por supuesto que te quiere Adri.- Dice Justin.- Me atrevería a decir que eres la única persona a la que quiere más que a su coche.- Me sale una risita y ambos se ríen conmigo.
- Bueno, yo creo que deberías ir a vestirte y enseñarnos un poco la ciudad en la que has crecido, ¿Te parece?- Asiento en respuesta a Mad y me levanto de la mesa recogiendo nuestras tazas.
Les digo que no tardaré mucho y subo a mi habitación donde me pongo unos pantalones negros con aberturas en las rodillas, una camiseta gris con escote y me cojo una chaqueta de lana color crema por si hace frío. En los pies me pongo mis vans blancas que me deje aquí cuando me fui a California y me voy al baño a peinarme y lavarme los dientes y antes de salir me miro en el espejo para asegurarme de que voy bien.
- Ya estoy.- Anuncio desde la escalera y ellos me miran sonrientes.
- Ahora ya no pareces una zombi viviente, ya vuelves a ser mi amiga.- Se ríe Mad cogiéndome del brazo y provocando que me salga una sonrisa a la vez que pongo los ojos en blanco y Justin asiente riéndose.
- Gracias, supongo.- Respondo dirigiéndome a la entrada para coger las llaves antes de salir de casa.- ¿Qué queréis ver?- Les pregunto una vez fuera de casa.
- Pues algún sitio que sea bonito y tenga restaurantes cerca.- Dice Mad caminando cogida a mi brazo.
Yo asiento y comienzo a caminar hacia el parque del lago, que es a donde yo iba cuando estaba mal. Es un parque muy bonito con cisnes y un lago precioso. Justin va por detrás de nosotros hablando de vez en cuando con nosotras, ya que yo les voy explicando cosas sobre los sitios que vamos viendo, y parece que a ellos les gusta.
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Your Destiny
Teen FictionYo sabía que mudarme a los Ángeles iba a suponer un gran cambio en mi vida y que, seguramente, acabaría por pasarme factura. Lo que no sabía era que se iba a cobrar tan cara. Cuando volví a casa tras enterarme del engaño, no podía hacer nada por dej...