Las sombras de Marcos & Bondoni

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POV EMILIO

-¿Adónde vamos? - pregunta otra vez.

-pareces un niñito de cinco años preguntando ¿Adónde vamos? -Le digo él se sonroja y ahí esta otra vez mordiéndose su labio. Desvío mi mirada por que si sigo mirándolo no respondé por mis actos.

-Ya estamos cerca.-le digo. -Vamos a un campo de aviación.- Añado.

-¿A un campo de aviación? - Pregunta perplejo.

-Vamos a planear.- Le digo.

-¿Planear? ¿Qué es eso? - pregunta.

-Vuelo sin motor, para que me entiendas. ¿Estás preparado para esto? - Le digo.

-Si, supongo que si.- me responde nervioso.

-Ya llegamos-. le digo saliendo del auto.

Fuera está fresco pero la temperatura es agradable, y el cielo es de un azul muy bonito ... cómo los ojos miel de Joaquín ¿Qué fue ese pensamiento? Debe ser media tarde. Rodeo el auto y le abro la puerta a Joa y le tomo la mano; ya nos esperan.

-¿Luis Tomlinson? - pregunto si es el piloto con el que hablé en la mañana.

-Si, señor soy yo.- dice.

-Señor Tomlinson, le digo a modo de saludo -Señor Marcos hablamos en la mañana. Un gusto conocerlo.- me respondo.

-Este es mi novio, Joaquín Bondoni.- le presento a mi bello acompañante.

-Encantado de conocerlo -dice él,

-Igualmente- contesta él con una enorme sonrisa.

Lo miro y su expresión delata que está absolutamente desconcertado.

-Después de te lo explico- le susurro en la oreja, -, vamos. - le digo cogiéndole su mano.

Su rostro resplandece de emoción. Me encanto lo temerario y entusiasta que es. Me inclino hacia él y le doy un beso rápido él me mira desconcertado. Nos dirigimos hacia la entrada del hangar cogidos de la mano; se siente tan bien estar así con él.

-El viento es de diez nudos, y del nordeste, eso quiere decir que estarán en el aire un buen rato.- Dice el señor Tomlinson. -Siganme por favor. Tengo un Blanik L-23 preparado para volar.- Nos dice mostrando el planeador.

-Estupendo. Yo aprendí a planear con un Blanik L-13 hace dos años atrás.

-Serán enganchados a mi Piper Pawnee, lo soltare hasta los mil metros- sigue diciendo Tomlinson.

-Perfecto.- Respondo un poco impaciente.

Joaquín observa todo esta feliz y a mi me gusta mucho verlo así.

-Todavía es algo temprano para el atardecer, pero si quieren nos preparamos inmediatamente. Cuando diga, señor Marcos.

-Muy bien.- le respondo a Tomlinson, y le pregunto a Joaquín. -¿Joaquín preparado para sentir la libertad de estar mil metros en el aire?

Estoy listo.- Me dice, aunque creo que esta aterrado.

-Primero hay que ponerse los paracaídas.- Nos recuerda Tomlinson dirigiéndose donde esta Joaquín.