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Capítulo #65: "Hermanos Gemelos"

Capítulo #65: "Hermanos Gemelos"

*Punto de Vista: Victoria Valeria (Vale)*

— ¡Nos va a dejar el vuelo Valeria! — grita mi hermano desde la puerta. Por fin es nuestro cumpleaños y pasaremos esta semana en Nueva York, no sé si estoy más feliz por mi fiesta o si es por ver a Kevin. Esta vez solo vamos Emily, Charlotte, Carlos, D y yo.

Max no puede ir en este vuelo, irá para nuestro cumpleaños con los demás.

Emily está muy feliz de volver a nuestra ciudad, siempre la hace muy feliz. Carlos está aburrido y va a acostado en las piernas de su chica, mientras ambos escuchan músicas.

Charlotte esta nerviosa, viajar en avión, la pone un poco histérica, además de que hace unos días le pagaron por la venta de sus obras y hasta yo me impresioné por la cantidad de dinero que le pagaron. Fue impresionante ver su rostro de perplejidad, mientras que Dereck le sonría y le decía lo orgullosa que está de ella. Aún no ha podio hablar con D acerca de la universidad, me pidió que le guardase el secreto, por supuesto que lo haré. Soy hermana pero también soy amiga.

— Me compraste chocolate para el viaje hermanita — me pregunta D acariciando el pelo de Lote con una sonrisa malvada típica del gato de "Alicia en el país de las maravillas"

— Aquí tienes, ahórralos que no te compre más — rueda sus ojos en forma de superioridad y se queja de que debí comprar el triple, definitivamente mi hermano va a terminar diabético con esa confiada de chocolate que consume.

El viaje se me hace eterno por toda la ansiedad acumulada que posee mi cuerpo por volver a ver a Kevin. Sus labios rojizos, su cabellera rubia, toda esa tinta oscura que recorre todo su cuero y esos ojos grises magnéticos.

Las puertas del avión se abren para nosotros dejándonos bajar. La primera figura que veo es la de mi madre y mi padre alegres por vernos salir. Mamá luce igual de arreglada que siempre, con esos ojos cafés y esa manía de lucir coqueta y encantadora para todos. Mi padre acaricia el brazo de mamá en un intento de no dejarla correr hasta nosotros, el cabello rojo de papá y esos preciosos ojos verdes me obligan a permanecer atendiéndolo.

— Buenos días hijos — saluda papá alegre. Mamá no puede más y va a abrazarnos, nos une a los dos en un fuerte abrazo familiar que casi me deja sin respirar.

— Mamá me dejas sin aire — peleo por alejarme un poco.

— No seas tan desaviaría — me regaña abrazándome mas fuerte.

La mamá oso amorosa a regresado. Detrás de papá me encuentro con el hombre de mi vida. Su cabello esta más oscuro, seguramente recién lavado, completamente despeinado dándose un aire a recién levantando, sus ojos me detallan como buscándonos alguna falla y yo siento que ve hasta mi alma, el traje gris que lo caracteriza y sin su corbata haciendo resaltar la pureza de su belleza. Hace que mis piernas me tambaleen.

— Ven aquí — me llama. Y obedezco yendo a sus brazos pegándome a su pecho sin intenciones de apartarme de él nunca más.

— Te extrañé — lo observo a sus ojos grises que me hipnotizan dejándome helada.

Su olor floral se cuela en mi déjame sin neuronas y solo concentrada para asentir, ahora mismo no soy persona. Soy un ser inferior que se alimenta del brillo de esos ojos grises y de su bendito olor. La barba rosa contra mi mejilla pero no me importa, me gusta el toque de adulto que le da.

Por varios minutos no escucho a los demás, solo soy capaz de ser muy consciente de lo mucho que lo he extrañado y de lo maravilloso que es volverlo a ver.