LXXI- Inténtalo

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Dos años después Kumo ya es una niña de casi 5 años, Kaedi tiene 3 y algo, ambos son unos pequeños monstruos inquietos, juguetones, latosos, pero mejor portados, ellos y la llegada de Yuki y sus hermanos no le da un respiro al Limón, lo cual es bueno, le permite olvidar su pasado.

-Entonces... ¿es un buen plan?- dice Omu mientras le muestra los planos de la escuela que están construyendo.

- Sí Omu, ¡sí! Yo estaba pensando en enviar a Kumo al pueblo minero y Daikuro decía que lo mejor era traer un tutor, pero si aquí habrá una escuela será mejor. ¿En cuanto tiempo estará lista?-

-Cinco meses y creo es perfecto. Rei está a punto de retirarse al menos por seis meses y yo-

-Cierto, ¿cómo va su embarazo?-

-Bien, hace rato me dijo que sentía los pies hinchados y tenía nauseas-

-Oh sí, y espera los calambres, las ganas de orinar a cada segundo, el bebé moviéndose que no te deja dormir. Todo un lío- dijo sonriendo.

-Ni me lo digas, no sé que haré sin ella en la casa hogar- aseguró Omu suspirando.

-Resistir Omu, resistir-

-La otra vez le dije que pensara en la posibilidad de visitarnos de vez en cuando y me dijo que no, quiere descansar, no enojarse por las tonterías que los dejo hacer-

-Tener un bebé no es fácil, dale un respiro- dijo entre risas el Limón.

-Sí, que me queda- tras eso hubo un incómodo silencio que Yuki y sus gritos interrumpieron.

-Sugar ¿interrumpo algo?, Kumo me dijo que estabas aquí con Omu, ¿tienen ropa? y si no ¿puedo unirme?, extraño a Enoki y me escribió diciendo que regresarán hasta mañana- dijo avanzando a tientas hasta la cocina.

-Yuki, estamos conversando-

-¡Qué aburridos! ¿qué es eso?, ¡la escuela!, ¡sí!, eso me gusta... y ya te decidiste Omu, ¿quieres que te ayude con los niños ahora que Rei se irá?

-¿Te vas a comportar?-

-Obvio que sí, vamos... necesito algo de emoción. Ser señora de casa es aburrido, ¿cómo lo haces Sugar?-

-Pues tengo dos niños pequeños que nunca se cansan, su abuelo es un padrote que les cuenta historias muy raras y los deja hacer lo que quieren, ah y tampoco se...- la chica se sonroja y cubre su boca pues lleva a Kaedi en brazos.

-Vaya, qué interesante Sugar, qué interesante... y sobre tu problemita yo conozco alguien que podría ayudarte- dice Yuki sonriendo perversamente viendo a Omu.

-Yuki, mejor apresúrate y cortále el pelo- dice el Limón mientras sienta a su hijo en su sillita y revisa que este perfectamente cerrada.

-¿No te gusta como se ve?, yo creo que se ve bien solo es un poco largo, pero está bien, no es demasiado- dijo Omu.

-A mí también me gusta, pero no me gusta esto- al decirlo le recoge el cabello y ahí hay un Shikamaru pequeño de ojos grandes, azules y expresivos, piel más clara y una creciente y coletita que termina en puntas tal cual piña. Yuki y Omu están completamente sorprendidos.

-Sí bueno... también puedo raparlo- asegura Yuki sonriendo.

-No, solo córtalo un poco... no quiero que un día se levante y decida que una coleta es un buen peinado- el niño ve a su mamá mientras ella le pasa juguetes para que se entretenga, instantes después sale con Omu.

-Entonces, ¿te parece un buen plan? -

-El mejor que se te pudo ocurrir-

-Ok, ¿cenamos en mi casa?- dijo Omu

RefugiadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora