CAPITULO TREINTA Y DOS

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Yamasakura estaba sentando en los pasillos, todo el lugar estaba en silencio, Joly se había ido a ver al pequeño Yamato, el brazo de Yamasakura sangraba por las heridas que las agujas del sedante dejaban al tratar de aplicárselas.

Su mirada estaba perdida, su cabello estan revuelto, sus mejillas seguían húmedas y sus lagrimas no paraban de salir de sus ojos.

—Por que... por qué, por qué, por qué, por qué ¡POR QUEEE!

Sus manos estaban llenos de su cabello que se arrancaba por el dolor y la tristeza, Shinichiro no estaba en ese momento, se había ido, la mente de Yamasakura sabía que el ya no estaba ahí, su corazón estaba destrozado y no sabía cómo desatar su dolor.

Golpeaba su cabeza contra la pared, quería morirse, había perdido todo, su cabeza estaba adolorida por los golpes hasta que Takeomi se acercó a ella para abrazarla.

—Takeomi...—La voz de Yamasakura se iba.

—Lo se, tranquila, por favor... tranquila.

—Shini...mi Shinichiro...—Takeomi la abrazaba tratando de cubrir sus lágrimas.

El doctor salía de la sala de operación y miró su reloj, suspiró y lo apunto en un hoja para después entregárselo a la enfermera, empezó a caminar por los pasillos y vio a Yamasakura sentada como una niña pequeña que la habían regañado.

—You can dance...—Susurraba con la mirada perdida.—You can jive...

El doctor se acercó y se agachó a su altura.

—Doctora...—Yamasakura lo volteó a ver.

—Quieres saber la causa...

Yamasakura lo miro y solo asentó con la cabeza.

—Quedó en estado de coma.—Yamasakura abrió los ojos y miró al doctor.—No estoy seguro si despierte o muera en el transcurso de estos días pero te estoy diciendo por que quiero que seas fuerte y estés preparada para todo lo que venga, como médico a médico deberías saber por qué actúo así con una mente fría.

Yamasakura solo observaba a su compañero, sus ojos volvieron a cristalizarse, el doctor la vio y la abrazó fuertemente, de repente vio cómo había caído hacia atrás su cabeza, al separarse para verla vio que estaba sangrando por la parte de abajo, recordó que ella estaba embarazada, rápidamente se levantó y la cargó.

—¡DOCTORA JOLY!

(Vamos a ponerle un nombre al médico "Aslan")

Aslan corría por los pasillos, Yamasakura estaba pálida y sudaba; Joly salió rápidamente y vio que se acercaba Aslan con Yamasakura y vio que ella sangraba.

—¿Que pasó?

—No hay tiempo, hazle un chequeo.

Joly abrió la puerta para así desvestirla y poder hacerle un chequeo de su embarazo, Aslan salió a los pasillos para dejar sola a Joly, todo se había complicado para Yamasakura.

Pasaron algunas horas y Yamasakura había despertando en una camilla, la luz era fuerte y no sabía que estaba pasando, a lado de ella estaba Aslan sentado observando su hoja de sus pacientes hasta que noto la mirada de Yamasakura.

—De acuerdo...—Saco un lampara de pluma para ver sus pupilas.—Yamasakura, ¿estás bien? ¿Sientes malestar o dolor?

—Que...¿Que paso?—Se frotaba los ojos.

—Escucha Yamasakura...—Aslan suspiró y miró hacia el piso, hasta tomar valor y volver a verla.—Tuviste un aborto espontáneo, el bebé sufrió, no se desarrolló formalmente y no pudieron hacer nada para salvarlo... lo siento mucho.

—Que...—El mundo de Yamasakura se estaba destruyendo poco a poco, Shinichiro estaba grave y su próximo bebé había muerto, su corazón no podía soportar más el dolor que le han causado en las últimas horas.

Aslan miró a Yamasakura para ver qué en ese momento su mirada estaba completamente perdida, se acercó para obsérvala pero ella solo tenía la mirada perdida y aún seguía respirando.

Yamasakura había entrado en una depresión que ni siquiera quería ver a su madre, se había quedado en el hospital y aveces iba a ver que Shinichiro, lo veía ahí con los ojos cerrados, no sonreía, Yamasakura solo podía verlo de lejos ya que el estaba en observación, había pasado ya 3 días de lo sucedido pero para ella era como si hubieran pasado años.

Le habían dado de alta y ella aún permanecía en el hospital esperando que Shinichiro despertara, su madre se había quedado a cargo de Yamato pero el quería ver a su madre y a su padre.

Esa noche Yamasakura había ido al hospital pero vio que Aslan corría por los pasillos hasta entrar a la habitación de Shinichiro, Yamasakura lo siguió corriendo hasta que llegó a la habitación y vio cómo trataban de reanimar a Shinichiro.

—¡Haré compresión ahora!

El corazón de Yamasakura se había roto por completo, Shinichiro estaba entre la vida y la muerte; Aslan salió de la habitación y vio a Yamasakura, ella estaba sentada y tenía sus manos en su cabeza, Aslan se sentó a lado de ella y la miró.

—Yamasakura... tienes que despedirte de él.

Yamasakura no respondía.

—No sabemos si podrá lograrlo, así que tienes que traer a tu pequeño para que se despida.

—No...—Ella se levantó y secó sus lágrimas.—¡Shinichiro no está muerto! ¡El aún respira y está ahí conectado, nadie entiende que solo quiero estar con el, por qué todos se empeñan a que me despida cuando aún no se ha ido!

Yamasakura lloraba, sus ojos estaban hinchado, había quedado más delgada de lo normal y solo lloraba y lloraba.

—Por que...Aslan... por qué mi Shinichiro.—Yamasakura se tiro en el suelo, sus pulmones ya no aguantaban y le costaba respirar, todo se estaba destruyendo.

Aslan no sabía cómo hablar con ella, así que solo la abrazó para consolarla, Yamasakura lloraba, su llanto era lo único que se escuchaba en los pasillos.

Habían pasado ya 2 semanas, Shinichiro aún no despertaba pero había sufrido 3 infartos, tal vez la próxima no lo soportaría; Yamasakura estaba sentada a lado de su cama, los ojos de Yamasakura estaban ojerosos y rojos, había llorando demasiado y no había comido del todo bien.

—Perdóname Shinichiro... pero tengo que dejarte ir mi cielo.—las lagrimas de Yamasakura salían de nuevo.—Solo estoy haciendo quedarte para que sufras mi cielo, yo... te amo Shinichiro, pero debo dejarte ir...

Yamasakura a su frente para darle un último beso, no pudo soportarlo más y lo abrazó.

—Shinichiro... Te amo, te amo...adiós mi cielo...

En ese momento Aslan entró junto con la madre de Yamasakura, Mikey, Emma y el abuelo.

—Ya está todo listo Yamasakura...

Yamasakura se separó y cargó a su pequeño, el bebé sólo veía a su mamá llorar, Aslan se acercó a él para desenchufarlo.

—Bueno la hora de muerte 11:30 p.m de el 13 de agosto.

Yamasakura abrazó a su pequeño y salió de la habitación una vez ya desconectado, su mente estaba perdida ahora debía aceptar que el amor de su vida había muerto.

We fell in love in October  // Shinichiro Sano X OcDonde viven las historias. Descúbrelo ahora