Dangerous Addiction. «Camren»

Capitulo 14.

Capitulo 14.

Salí del salón y me dirigí a la cafetería.
Estaba asustada, mis piernas temblaban y mis manos sudaban. Hoy estaba dispuesta a terminar con Lucy, y tenía mucho miedo de que se alejara de mi.. sabía que me había dicho antes de comenzar con todo esto que si no funcionaba no había rencor, pero de igual manera, no sabía si pudo haber cambiado de opinión en estos días. Era una gran persona y no quería perderla como amiga, sería bastante triste.
Llegué a la cafetería y la busqué con la mirada, estaba sentada riendo junto a las demás.

Caminé hacia ella y me senté a su lado.
Las chicas se exaltaron al ver mi rostro lleno de moretones, pero no mencionaron nada.

Sentí escalofríos cuando Lucy me besó en la mejilla, y me di cuenta que había notado lo que sucedía.

-¿Puedo hablar contigo un momento?.

Ella sonrió y tomó mi mano, para que camináramos al jardín, el que por cierto estaba desierto.
Nos sentamos en una de las banca, ella me miraba, pero yo no era capaz de hacerlo.

Lucy: Supongo que la besaste, ¿verdad?. Porque juro que voy a golpearte si aún no lo has hecho.

-¿Qué?.

Lucy: ¡A Camila, Lauren!. -me golpeó ligeramente en el hombro.- ¿La besaste?.

-Sí..

Lucy: ¡Eso es!. -alzó los brazos.- Y ahora creo que vas a terminar conmigo..

Rió, quitándome un gran peso de encima. Por Dios, esta chica era la mejor.
Asentí con cautela, mirándola la gran sonrisa que tenía.

Lucy: Bueno, fueron unos lindos seis días. -rió y me abrazó.- Lauren, si no estás de novia con esa chica en una semana voy a golpearte.

-Gracias..

Ella se alejó y volvió a reír, levantándose y estrechándome su mano, para que entrara con ella de vuelta a la cafetería.
Los primeros ojos que vi a penas entré a la cafetería fueron los de Camila. Se veían ansiosos y felices.
Le guiñé un ojo y me senté con las chicas.

Lucy: No molesten más con lo de nuestra relación. -dijo con el ceño fruncido, fingiendo estar enojada.- Porque se acabó. -sollozó de broma, haciéndome reír.- Lauren terminó conmigo.

Dinah: Wow, pero que relación tan corta.

-Lo sé. -abracé a Lucy de costado.- Prefiero estar con ella como amigas.

Lucy: Me has herido profundamente.

La empujé un poco y volteé para mirar a Camila, quien también me miraba. Ella con discreción apuntó su celular, diciéndome que estuviera atenta a mi celular.

Ally: Ay, Lauren, no juegues.

Dijo viendo mi interacción con Camila.

-¿Qué?.

Ally: No es buena idea. -cubrió su rostro con ambas manos.- No es para nada una buena idea.

-¿Por qué?. No la..

Normani: La conocemos como no tienes idea.

-¿De qué hablan?.

Ally: Fue nuestra mejor amiga en toda la primaria, y el primer año de secundaria. Créeme que cuando te digo que la conocemos, es cierto.

-De acuerdo... ¿Y yo por qué no sabía de eso?.

Normani: No es algo que digamos siempre.

-Pero.. ¿Qué pasó?.

Ally: Veronica pasó. -suspiró.- Cuando se puso de novia con ella nos alejó, porque comenzó a importarle cuanto dinero teníamos, y como no teníamos tanto como ella.. ¡Boom!, adiós amistad.

Dinah: El dinero ya no le importa como antes. -me miró.- Le importa el cómo puede quedar frente a los demás, sobre todo frente a Veronica. Si a Veronica no le gusta, a ella tampoco.

Mi celular vibró en mi bolsillo. Un mensaje de Camila salía en la pantalla.
Las palabras de las chicas me dejaron algo aturdida y confusa.

Camila: "¿Terminaste con ella?:("

-"Sí, nunca pensé que se lo tomaría tan bien."

Camila: "Aw:( quiero besarte justo ahora."

-"¿Qué clase tienes ahora?".

Camila: "Química."

-"No entres. Quédate conmigo en la biblioteca."

No me llegó una respuesta, así que miré a Camila, la que guardó su celular rápidamente ante la mirada de Veronica. Ahí supe que ella se iba a tardar demasiado en terminar con su novia, por mucho que me lo haya prometido. Sabía que ni hoy, ni mañana iba a suceder.

Cuando tocaron la campana cogí un pequeño pastel de chocolate, ya que no había comido nada y me fui a la biblioteca, despidiéndome de las chicas.

Me senté en el pasillo de historia griega, busqué el libro que más pudiera ayudarme y me puse a hacer el ensayo de la clase de historia mientras comía mi pastel.
Unos pequeños brazos me abrazaron por detrás y comenzaron a besar mi cuello y mi mandíbula con cuidado por los moretones que habían en ese lugar.

-Viniste..

Camila se sentó a mi lado y apoyó su cabeza sobre mi hombro, comenzando a acariciar mi brazo.

Camila: No iba a perderme estos momentos contigo.

Llevó sus manos a mis mejillas y me besó delicadamente. Mi labio dolía un poco, pero no le tomé importancia.
Mordí su labio inferior para respirar un poco y volver a besarla, esta vez con mi lengua acariciando sus labios. Ella abrió su boca para que mi lengua entrara, pero no quise ir tan lejos, por lo tanto la que profundizó el beso fue ella.
Había tenido tantas ganas de besarla, y ahora que podía hacerlo no quería separarme de sus suaves labios.