Dangerous Addiction. «Camren»

Capitulo 54.

Capitulo 54.

Salí del salón cabizbaja, igual como había entrado a escuela por tener un gran moretón en mi labio y mi quijada. A pesar de todo el maquillaje que me coloqué, nada funcionó, pero para mi suerte nadie en casa me había visto.
Escuché como la gente murmuraba a medida que yo iba pasando y me parecía algo tan incómodo porque algunos decían suposiciones, pero no sabían que eran completamente ciertas. Mi padre me había golpeado.

Llegué a mi casillero y lo abrí, de allí cayendo unos cuantos libros, estos esparciéndose por el suelo.
Suspiré con tristeza, porque no era buen día, y sabía que todo se estaba viniendo en mi contra.
Me arrodillé, cogiendo mis libros uno por uno, siendo ayudada por ex novia. Y por eso me coloqué tan nerviosa que cuando recogía un libro, otro se me caía de las manos.

Lauren: Ca.. camila. -dijo al mirar mi rostro, situando su mano bajo mi barbilla con mucho cuidado para que la mirara, pero no lo hice.- ¿Qué te pasó?.

No contesté, solo cogí mis libros con rapidez, quitándole los libros a ella y guardándolos en mi casillero, queriendo escapar de ella lo más rápido posible para que no comenzara con las preguntas, pero ella sujetó mi mano, mirándome fijamente.

Lauren: Camila, contéstame. -alzó la voz.- ¡¿Quién te hizo eso!?.

-Nadie.

Lauren: Camz.. -me rogó, preocupada.- ¿Qué te pasó?.

-Nada.

Me solté de su alcance y corrí hacia el baño, escondiéndome en uno de los cubículos para poder calmarme un poco, antes de irme a la cafetería.
Todos hablaban de mí. Inventaban un montón de cosas y yo ni siquiera tenía ganas de enfrentarlos para decir que no estaban en lo correcto.

Fui a buscar una manzana y salí de la cafetería, directamente hacia el jardín para nuevamente, apartarme de todos.
Me senté en la banca y mordí mi manzana, pero la dejé caer al sentir el punzante dolor en toda mi mandíbula y labio, esto haciéndome llorar sin poder evitarlo, pero me detuve de golpe cuando se sentaron a mi lado.

Dinah: Hola.

-¿Te mandó ella?.

Pregunté secando mis lagrimas y mirando a Dinah, la que solo miraba hacia el frente, porque quizás, sentía lástima de mí. Como todos.

Dinah: No. -suspiró.- ¿Fue tu padre, verdad?.

Asentí ligeramente, sintiéndome tan avergonzada, pero ella me abrazó, quitando esa sentimiento.
Lloré sobre su hombro sin querer detenerme, porque todo estaba marchando tan mal y no sabía qué hacer.

-La necesito, Dinah.

Dinah: Tranquila.. -acarició mi espalda.- Todo estará bien, solo.. tienes que esperar, ¿si?. Podrás superarlo.

-Es que.. -sollocé, cubriendo mi rostro con ambas manos.- No quiero superarlo. La amo a ella y punto, no quiero superarlo para estar con alguien más. No quiero a nadie, la quiero solo a ella.

Dinah: Y ella te quiere a ti, Mila. Pero debes entender. Le hiciste daño.

-Yo.. lo sé. -gemí al sentir el dolor en mi labio.- Créeme que lo sé, y no tienes ni idea de cuánto me arrepiento. Te juro que si ella me da otra oportunidad yo me esforzaré al máximo. No le haré daño, Dinah. -me alejé para mirarla.- Pero necesito otra oportunidad.

Dinah: No, Camila. -suspiró y se levantó.- Ella justo ahora está muy preocupada por eso. -apuntó mi boca.- ¿Qué le digo?.

-Dile que solo.. me caí, no lo sé.

Dinah: Intentaré que me crea. -sonrió ligeramente.- ¿Por qué fue esta vez?.

-Le dije que había terminado con Veronica.

Dinah: Dile a tu madre.

-No, Dinah. -volví a sollozar.- Si le digo.. habrán problemas.. él se irá y Sofia.. no quiero que Sofia esté sin un padre.

Dinah: ¿Y si también la golpea a ella, Camila?, ¿Qué vas a hacer?.

-Si la toca la policía lo sabrá, pero no lo ha hecho.

Dinah: De acuerdo. Ya debo irme.

Sonrió y caminó de vuelta a la cafetería, pero la detuve con mi voz.

-¿Perdí a los que quería por la persona que soy?.

Dinah: Sí, Camila. Sabes como herir a las personas, y debes cambiar eso. Cuando así sea, te sorprenderás que tan bien te trata la vida con respecto a Lauren.

-Dile que la amo.

Dinah: Le diré, pero no esperes nada. -caminó, ya alejándose de mí.- Adiós.

Y me quedé observándola mientras entraba a la cafetería, yo entrando segundos después para saber si realmente le decía a Lauren que la amaba, así que me acerqué lentamente hacia el grupo, escuchando a Dinah.

Dinah: Dice que te ama.

Pero Lauren solo negó con su cabeza, comiendo lentamente su comida.
Se veía tan hermosa, a pesar de lo pálida que estaba. Siempre estaba hermosa.

Lauren: No es cierto.

-Es cierto. -me acerqué, sorprendiéndola, y logrando que mirara otra vez mi moretón.- Te amo, Lauren, y no tienes idea de cuanto.

Me volteé y caminé fuera de la cafetería.
Me había destruido que ella no creyera en que la amaba. Porque la amaba como no he amado a nadie, y esperaba que ella lo supiera a la perfección.

Lauren: Camila. -me llamó, sujetando mi mano con cuidado para voltearme hacia ella.- Si me amas.. dime lo que te pasó, ¿Qué te hicieron?.

Se veían tan asustada, y la entendía, porque si esto fuera al contrario, me preocuparía igual o más que ella, y es que me aterraba la idea de que le hicieran daño.
Bajé la cabeza, sin querer decirle, pero si decirle servía para demostrarle que la amaba, lo haría a pesar de las consecuencias.

-Me golpearon.

Lauren: ¿Quién fue?. -alzó la mano, tocando mi labio.- ¿Por qué te hicieron esto?.

-Solo dijiste que si te amaba te dijera qué me había pasado. Me golpearon. Eso es todo.

Quise irme, pero ella volvió a sujetar mi mano, entrelazando nuestros dedos, y eso me estaba confundiendo demasiado, porque mi cuerpo buscaba cada señal de una oportunidad de su parte, y a esa la tomaba como una, pero su rostro me decía lo contraria, porque aún notaba el rencor que tenía.

Lauren: ¿Quién te hizo eso, Camz?. -suspiró.- ¿Y por qué?.

-No voy a decírtelo, ¿De acuerdo?. -miré fijamente sus ojos, sintiendo como me enamoraba cada vez más.- Hice algo que.. no debí haber hecho.

Lauren: ¿Fue Alejandro?.

Bajé la mirada, con mi respiración atrapada en mi garganta.
La escuché suspirar segundos antes de que me abrazara, y cerré mis ojos para sentir como sus brazos me daban tranquilidad y emoción, provocándome ganas de llorar nuevamente, pero me resistí.
Escondí mi cabeza entre su cuello, sin importarme el dolor en mi labio y mandíbula. Nada me importaba porque ahora estaba entre sus brazos.

-¿Cómo lo supiste?.

Lauren: El golpe. Fue demasiado fuerte para dejarte así y no lo sé, supuse que había sido él. ¿Ha pasado antes?.

-Sí, unas cuantas.

Lauren: ¿Por qué no me lo dijiste?.

-¿No escuchas como la gente habla de mí?. Sienten lástima, y no quiero que tu..

Lauren: Nunca sentiré lástima por ti, Camila. Debiste decírmelo.

-Y ahora que te lo he dicho.. ¿Cambia algo?.

Me alejé de su cuerpo al no escucharla decir nada, y como supuse que pasaría.. ella no pensaba darme otra oportunidad.
Asentí y caminé lejos de ella, yendo hacia mi casillero para tratar de seguir con el día a pesar de lo que ha pasado, y es que debía acostumbrarme, porque ya nadie estaba conmigo.
Y quizás era lo mejor para mi alrededor.