Dangerous Addiction. «Camren»

Capitulo 47.

Capitulo 47.

Encendí el auto para dirigirme al hospital. Eran las 4:30, quería hablar con Lauren antes de que entrara a la sala de operaciones, para saber si estaba enojada conmigo por no seguir sus ordenes, o simplemente para darles el primer beso del día. Tenía una enormes ganas de verla.

Había hablado bastante con mi madre sobre el dinero que prácticamente le había robado, pero para mi buena suerte, ella reaccionó de muy buena manera, puesto que el dinero que teníamos eran bastante, "Está de sobra.", como dijo ella.

Llegué al estacionamiento del hospital y pasé mis manos por mi rostro, nerviosa de que ella ni siquiera quiera dirigirme la palabra, estaba asustada.
Me bajé y entré al hospital. Yendo inmediatamente a la habitación de Lauren sin siquiera avisar en el mesón que había llegado.
Cuando llegué toqué con cuidado la puerta, y entré sin esperar respuesta, porque se me hacía que no me iba a responder.

-Hola, amor.

Ella me miró, enojada, por lo que pude notar y desvió su mirada hacia el lado contrario.
Caminé hasta ella y me senté en la orilla de su cama, tomando su mano solo para acariciarla. Estaba muy suave.

-No te enojes conmigo, Lauren.

Lauren: Me estoy aprovechando de tu familia, Camila. -habló con voz ronca, aún sin mirarme.- Te dije que no lo hicieras.. diablos, no sé si odiarte o agradecerte.

Sonreí. Era tan linda cuando se enojaba. Me acerqué a ella y besé su mejilla, tratando de quitarle un poco el peso que estaba sintiendo en estos momentos.

Lauren: No hagas eso. -me miró con el ceño fruncido, pero sabía que quería sonreí.- Estoy enojada contigo, Camila.

-Hey.. vamos, Lo. -reí.- No te iba a dejar aquí por tres semanas y media. Te necesito conmigo.

Alcé mi mano y la llevé a sus labios, haciéndole una sonrisa con dos de mis dedos sobre sus comisuras.
Con eso ella logró reír un poco, para luego gemir del dolor, y por eso la idea de que se operara se situó con más fuerza en mi cabeza.

-Estarás bien.

Lauren: ¿No te irás?.

-No, estaré esperándote. Te lo prometo.

Lauren: Yo.. de acuerdo.

Suspiró y cogió mi mano, esta tirándola un poco para que me acercara a ella, recibiendo un ligero beso, el que fue interrumpido por los médicos que entraron a la habitación.

Médico: Lo siento, señorita. -dijo acercándose a Lauren, pero mirándome a mi.- Necesitamos que salga de la habitación para poder preparar a su novia para la operación.

-De acuerdo.

Le sonreí a Lauren y volví a besarla, este beso como despedida. Con eso salí de la habitación, preocupada y asustada del cómo resultara todo esto, y si llegara a salir mal.. la culpa la tendría yo.
Fui a la sala de espera, sentándome en una de las sillas y abrazando mis piernas, tratando de ser paciente, pero estaba tan asustada que preferí quedarme dormida.
Me desperté por el leve movimiento que le hacían a mi cuerpo. Vi al médico frente a mi con un pequeña sonrisa.

Médico: Señorita Cabello, su novia acaba de salir de la operación y todo salió bien. Ya la han trasladado a su habitación, por si quiere verla. Solo hay un problema, y es que ella aún está sedada, por lo cual, no despertará en un par de horas.

-No importa. -me levanté, mareándome un poco por haberlo hecho tan rápido.- Quiero verla.

El hombre asintió y me guío a la habitación de mi novia.
Esta vez me sentí aliviada y ansiosa de verla, porque el médico ya me había asegurado que ella estaba bien, así que no tenía de qué preocuparme.