Primer movimiento

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CINCUENTA Y CUATRO

El primer movimiento fue hecho.

Anteriormente, cuando la guerra comenzó, Mangel se encargó de camuflar y mantener en secreto sus vías de transporte comercial con el fin de que estas no fueran interceptadas por el enemigo. Pero, tal vez porque no fueron suficientemente bien ocultadas o porque el enemigo fue demasiado listo, los barcos fueron hundidos por un ataque militar.

Las pérdidas fueron severas. Los barcos transportaban alimentos y recursos principalmente destinados a la clase baja.

Con Vegetta encargándose de la salud del rey, todo el peso del problema recayó en Rubius.

-¿Alguien más sabe sobre esto? -preguntó un rubio con una expresión seria; nada correspondiente a su típica imagen alegre.

-Lolito se encarga de los asuntos informativos, fue él quien recibió el reporte, además de él y yo, nadie sabe -contestó el peliblanco mientras se llevaba las manos a la cabeza, como tratando de mitigar el dolor presente en esa zona. -Tiene mayor experiencia que yo lidiando con este tipo de problemas, pero también tiene mucho trabajo por hacer, no puedo estar acudiendo a él todo el tiempo por asesoría. Aunque expresó que este asunto es de suma importancia y que dejaría todo su trabajo de lado para ayudarme a lidiar con eso, no creo que sea lo adecuado.

-¿Por qué no? -Herny estaba confundido, no entendía porqué su preciado primo se complicaba las cosas al no pedir ayuda. -Si Lolito sabe lidiar con estos asuntos, entonces déjalo al mando y cambia puesto con él.

-Si hago eso, ¿no sería lo mismo que admitir que no soy suficiente?

Al escuchar a Rubius decir esas palabras Herny comprendió de inmediato cual era el verdadero problema. Rubius siempre estaba probándose a sí mismo para ser suficiente, para no ser considerado como un "joven apuesto y rico del montón". Desde su boda con Vegetta, las exigencias hacia Rubius habían aumentado, el pueblo ya no solo esperaba de él que siguiera siendo un duque ejemplar sin escándalos y emprendedor de su propia forma de generar ingresos, ahora el pueblo también dependía de él. Esperaban que Rubius les asegurara protección y una calidad de vida igual o mejor a la que se encontraban.

La clase alta no estaría perjudicada con este repentino ataque, pero la clase baja...

Si los atacantes hubieran hundido los recursos de la clase alta, sería cuestión de algunos días para que los nobles solucionaran el problema con sus miles de conexiones y sus otras fuentes de ingresos, pero la clase baja, que dependía totalmente del gobierno, sin casi ninguna otra forma de obtener dinero, comida o materias primas... Este ataque fue proporcional a que la clase baja no tuviera ni una sola comida durante tres meses.

Rubius debía solucionar el problema antes de que la clase baja comenzara a verse afectada.

-¿Te vas?

Rubius se volvió hacia un Herny sentado en las escaleras de la entrada del palacio con expresión complicada. -Voy a encargarme de este asunto, los barrios bajos no pasarán hambre ni un solo día.

Viendo la silueta alta de Rubius alejarse, Herny se sintió sumamente orgulloso de aquel hombre que antes lloraba de impotencia al no poder quejarse de las injusticias que los niños de clases sociales superiores efectuaban contra él.

-Eeeh -una voz sacó al rubio de sus pensamientos; al darse la vuelta, un empleado del palacio completamente armado con escoba y una trampilla lo miraba confundido. -El joven Jesuss dijo que vio una rata blonda en las escaleras del palacio, ¿sabe hacia donde huyó?

-...

***

La lluvia no se detuvo hasta el día siguiente. Alex pasó la noche en una de las habitaciones vacías de la casa de Maximus. También tuvo una cena bastante incomoda donde Staxx no dejaba de lanzar insinuaciones lascivas, Maximus no dejaba de gritar y Aroya hacía un montón de preguntas sin espacio para responder correctamente.

Without a Crown KARMALAND AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora