⏮ ⏯ ⏭ "AMORFODA" - MARÍA

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Caminaba alegre y sonriente por las calles del centro, respondiendo a las sonrisas de los que se cruzaban en mi camino y abriendo aún más mi sonrisa cuando me cruzaba con algún ser gruñón que me miraba con extrañeza. Estaba de un humor envidiable. Resulta que me había despertado con el espíritu y el cuerpo renovados. Me sentía feliz, esperanzada y optimista por el ciclo que comenzaría pronto para mí, y quería tallar, de alguna manera, algo que me recordara ese momento, esos 365 días que viví y que me llevaron directo a donde estaba. Entonces decidí ir a visitar a mi amigo Pablo en su estudio. Y de camino allí me iba, después de parar en una panadería en la esquina del lugar que era muy famosa y siempre estaba muy concurrida, donde me obsequié con un desayuno delicioso y cargado.

Normalmente solía hacer algo para marcar los cambios y cada paso por el que pasaba mi vida, o cuando sentía la necesidad. Cuando no era un tatuaje, era un cambio de pelo, o una nueva perforación, un cambio de look, algo para marcar en el exterior lo que estaba pasando por dentro.

Entonces, con una idea y un recuerdo en mente, me levanté esa mañana, casi tarde, me di una ducha y salí de la casa muy inspirada y movida. Tenía poco tiempo antes de que llegaran Ici y Santi y tenía que ir a recogerlos en la estación. Pensé en esperarlos para que pudiéramos ir juntos, incluso porque habíamos querido hacernos un tatuaje juntas, Ici y yo, ya hacía tiempos. Pero pensándolo mejor, este en particular, me apetecía que fuera solo mío, como un secreto al que nadie más tiene acceso. O casi nadie.

El trabajo quedó increíble. Pablo entendió exactamente lo que quería, lo dibujó y lo tatuó muy rápido, no era muy grande, en realidad. Hablamos un poco de las novedades y luego me fui a buscar a los dos. Los llevé a almorzar y después paramos en el centro comercial a comprar lo que necesitaríamos para esa noche, antes de regresar a casa para descansar un poco y empezar a prepararnos para la fiesta.

Pronto la noche cayó y también nuestro desorden por toda la casa para vestirnos y arreglarnos. Elegí un mono largo de lino y pedrería negra y tirantes que me había comprado esa misma tarde y un tacón fino pero no muy alto, no me gustaba ser siempre la más alta. Y si, sin salto ya era inevitable, con él era casi imposible. Perfeccioné mi maquillaje, y pronto Ici, que lucía un hermoso vestido negro corto y un maquillaje oscuro que realzaba aún más su belleza, y yo, nos encontramos con Santi en la sala de estar. Nos había estado esperando durante algún tiempo, molesto por la demora, mientras jugaba con su móvil. Un rato después, Alicia pasó por mi casa a recogernos, después de insistir en que fuéramos todos juntos.

Ella estaba linda y me dio un beso apasionado en cuanto abrí la puerta para recibirla, lo que me dio un poco de vergüenza frente a mi hermano quien soltó una risa burlona antes de que Ici lo abofeteara para que se detuviera. Y esto sólo lo sé porque los escuché y porque los conocía muy bien, porque les daba la espalda en ese momento.

Tenía una caja con ella, dijo que quería esperar hasta que volviéramos para dármela, pero no podía soportar la ansiedad. Así que la abrí y encontré una cadena de oro blanco con un colgante de un sol. Entonces me explicó que eso era lo que yo representaba en su vida. Y eso, a diferencia de la reacción que quería provocar en mí, creo, me molestó un poco, no sabría decir por qué. No el presente, porque era hermoso, sino la intensidad que vi en ella, y lo que eso suponía para mí, que claramente no compartía de la misma intensidad. Pero le agradecí tan afectuosamente como pude. Cuando estuvimos listos, bajamos todos, nosotras discutiendo si tomar mi auto o el suyo.

— Pero tú siempre bebes mucho, Natalia... es mejor si conduzco yo, así podemos garantizar que todos regresen sanos y sal...

— Eh, que yo no siempre me emborracho...

"¿Señorita Natalia?Disculpe..." Escuché a mi portero, un tipo muy simpático que siempre lograba saludarme con una amplia sonrisa cada vez que pasaba, sin importar la hora que fuera.

Sentiment Ètrange - Las canciones que te hacen en mi | ALBALIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora