—Así que esta es la escuela de magia japonesa, Mahoutokoro —murmuró Fleur para sí misma, observando impresionada el increíble palacio hecho de nefrita —. Es casi tan impresionante como Hogwarts y da una sensación de antigüedad sorprendente.
El inmenso edificio estaba situado en la parte más alta de Minami Iwo Jima, una isla bastante al sur de Japón. La escuela de magia japonesa Mahoutokoro acogía a gente de toda Asia, pero aun así era la que menor cantidad de alumnos recibía.
—Hmm... —Liam asintió, no obstante en realidad estaba más concentrado mirando las barreras mágicas que cubrían la escuela —. Tú ve a visitar la escuela si quieres, lo mejor sería que yo me quede aquí.
El rango de efecto de su maldición era de unos cincuenta metros, aunque si alguien lo veía sería afectado independientemente de la distancia, así que entrar en un colegio lleno de niños no era la mejor idea... aún más teniendo en cuenta que en Mahoutokoro había incluso niños de siete años.
—¿Realmente importa? Podrías explicarle al director tu relación con Dumbledore y seguramente no se preocuparía por posibles malas intenciones —sugirió ella —. Además, estoy seguro de que puedes evitar ser notado si quieres.
Liam frunció los labios y soltó un suspiro.
—Bien entonces, entraré contigo —aceptó. En realidad estaba interesado en ver cómo era una escuela mágica que no fuera Hogwarts —. Sin embargo, el director es un cultivador en el Reino de la Corroboración del Camino, no es tan fuerte como Dumbledore, pero aun así para evitar un conflicto deberíamos avisarle.
La chica le levantó el pulgar en señal de reconocimiento y Liam se colocó enfrente de la barrera. Había usado una pequeña distorsión mágica en ambos para que no fueran notados hasta ese momento, sin embargo, al abrir la barrera serían descubiertos al instante.
Levantó un dedo y lo bajó como si estuviera cortando mantequilla con un cuchillo ardiendo. Se abrió un agujero en la protección mágica, por el que Liam y Fleur procedieron a entrar. Inmediatamente, un anciano apareció enfrente suya.
—¡Alto, intrusos! —gritó en japonés. Por suerte Liam ya había estudiado la gran mayoría de idiomas del mundo en ese momento —. ¡Declarad vuestras intenciones al entrar en nuestra escuela!
Sin embargo, el director empezó a sudar al ver a Liam tan cerca. Sorprendentemente, no se acobardó y se mantuvo firme, aunque con un visible temor en el rostro.
—No se preocupe, señor director —Liam habló con respeto, no tenía ningún deseo de pelear en ese momento —. Simplemente, hemos venido a visitar este sitio por curiosidad.
El anciano no bajó la guardia ni por un segundo.
—¿Cómo puedo estar seguro de eso? —cuestionó, empezando a expulsar magia. Esto hizo que Fleur se sintiera un poco incómoda, pero estando detrás de Liam el impulso del aura disminuía —. Tú, chico, estás dejando escapar una intención de matar tal, que me hace dudar de tus palabras.
Liam se mantuvo serio y tranquilo.
—Mi nombre es Liam Doyle, soy el discípulo de Albus Dumbledore —se presentó —. Además, estoy seguro de que sabes perfectamente que si tuviera intenciones nefastas para con tu escuela, no podrías detenerme...
El anciano frunció el ceño y dejó escapar aún más su magia. Sacó una espada de su túnica y se puso en posición de pelea.
—Entonces, ¡demuéstralo! —exclamó antes de desaparecer en un arrance de velocidad que Fleur ni siquiera pudo ver.
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Pisotear los Cielos
FanfictionActualizaciones todos los sábados, en caso de haber alguna modificación puntual en el horario avisaré antes.