Fanfic de Fred Weasley.
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Jill una estudiante de Hogwarts, hija de muggles, va a iniciar sexto año y no sabe lo que le prepara el destino... sin duda ni ella se esperaba vivir tantos cambios en su vida.
Este no es un fanfic como los que han leído...
Hoy es la segunda navidad que celebran las clones, ellas ahora tienen 1 años tres meses... desde que aprendieron a caminar no hay quien las pare, además que aprendieron a salirse de la cuna y a veces amanecen en mi cama, no se como carajo le hacen para subirse a la cama pero se suben.
En la tienda siempre andan explorando, obvio siempre están bajo vigilancia ya sea mía o de mis papás, cuando estoy de encargada en la caja a veces llega Zara o Lilit con un acetato y me lo entrega, la primera que hizo eso fue Lilit no sabía lo que quería al entregarme el álbum así que como si ella fuera la adulta y yo la bebé me tomo de la mano y me llevó hasta la consola indicándome que lo pusiera, desde ese entonces las gemelas escogen la música y por lo que veo realmente les encanta hacerlo.
En este momento estoy vistiendo a las gemelas, ya que como es de costumbre cada navidad viene toda la familia a casa.
Como hace frío opte por ponerles un mameluco de osito, se ven realmente tiernas.
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Baje agarrando de las manos a mis princesas para ayudarlas a bajar las escaleras, cuando estuvimos abajo me di cuenta que ya habían llegado todos.
Solté a las clones y vi que corrieron a los regalos debajo del árbol con toda la intención de abrirlos.
– Zara, Lilit, no – hable corriendo hacia ellas, ambas voltearon a verme y se rieron para volver a retomar su camino, antes de que llegaran las cargue – Les dije que no – Zara me dedico una miradita de enojo que solo me hizo morir de ternura – No me mires así, más tarde los podrán abrir – Lilit se cruzó de brazos enojada – No me importa que se enojen, a ver con quién duermen esta noche – ambas abrieron los ojos como platos y mientras una me abrazaba, la otra me llenaba de besos la cara.
– Mami quieo – dijo Lilit
– Yo también las quiero, pero pórtense bien y vayan a jugar con sus primitos, corran – las baje y ellas corrieron a los niños que estaban en la sala jugando.
Todo hasta el momento iba bien, una prima y yo cuidábamos a los niños pequeños, los adultos estaban en el patio con la música mientras bailaban y bebían.
Tenía entendido que un par de tíos y sus familias se quedarían, cedí mi cuarto para que ahí durmieran una de las familias que se quedaran, yo dormiré en el cuarto de las gemelas.
– FELIZ NAVIDAAAAAD – entró mi mamá a la casa gritando
Se veía tan sobria como la bondad que se le veía al que no debe ser nombrado, osea nada, caminó a las clones y se hinco.
– Feliz navidad mis niñas bonitas – las abrazo, ellas solo se reía
Vi como todos se abrazaban y las parejas se demostraban su amor... y de la nada llegó la imagen de Fred y yo con las gemelas en brazos deseándonos lo mejor y diciendo cuánto nos amábamos.
Ya Fred, por favor, salte de mi cabeza...
– Mami no ioles – mi Lilit se abrazaba a mis piernas seguida por Zara
