46

3.7K 417 85
                                    

Hola mis amores bell@s!!

Perdón por tardar tanto, tuve una estúpida infección el el ojo y no podía usa el CP pero ya volví, aún no puedo estar mucho frente a la pantalla pero prometo no tardar tanto en actualizar.

También me disculpo pq no he podido responder a sus comentarios pero siempre les leo, se los jurito jajaja, le agradezco, amo leer sus teorías y de verdad que muchas cosas van a pasar ahora en esta historia.

En fin les dejo que lean. 



-No, no, claro que no señor Manoban, como siempre he pasado una linda velada en su casa, han sido muy amables en recibirme.- Jungkook hizo una reverencia ante el padre de Lisa agradeciéndole la invitación a cenar, era ya la segunda vez en las 3 semanas que el pelinegro visitaba su casa debido a que la rubia les había contado a sus padres acerca del niño Bambi del preescolar, su madre de inmediato lo había recordado y le había dicho que le invitara a cenar. 

-Claro que no muchacho, tanto mi esposa como mi hija te tienen aprecio a pesar de tantos años y la verdad es que me caes muy bien, a tu padre si que lo recuerdo mucho, hace mucho no lo veo, espero un día de estos tener la oportunidad de invitarle una copa y platicar.- Le respondió el hombre con una sonrisa. 

-Bueno la verdad es que, hace mucho que no lo veo tampoco, ya sabe, después de que mi madre murió, él se refugió en su trabajo y se la pasa viajando casi todo el tiempo.- La verdad es que el pelinegro lo extrañaba muchas veces pero no le iba pedir que dejara de hacer sus cosas sólo por que se sentía como un niño pequeño. 

-Es entendible... Yo no sé que haría sin mi mujer, no podría... Supongo que todos debemos desahogarnos de alguna forma.- Menciono el señor Manoban.

-Su-supongo...- Respondió Jungkook pensando en Jimin una vez más, no podía sacarlo de su cabeza y mucho menos de su corazón, no que en realidad quisiera hacerlo pero sí debía, Lisa se había vuelto su confidente, tenía que sacar todos sus sentimientos con alguien y ella lo había escuchado contarle toda la historia desde el principio, en ese poco tiempo habían vuelto a hacer buenos amigos y a pesar de que casi todo el tiempo Lisa le pedía salir a caminar a la montaña o hacer cosas diferentes para mantenerlo distraído, las noches de Jungkook eran de Jimin por que aparecía sin falta en sus sueños diarios, se preguntaba si seguiría con Eunwoo, que debía volver al trabajo, mil y un cosas pasaban por su mente. -Bueno yo... Debo irme, ya es tarde.- Dijo volviendo a su realidad. 

-Jungkook esperamos que vuelvas a venir a cenar antes de que nuestra Lalisa y tú regresen a Seúl.- Mencionó la señora Manoban sonriendo amablemente. 

-Será un placer.- Respondió Jungkook  y le devolvió el gesto para después mirar a Lisa la cual entendió el gesto e intercedió para cortar la platica a sus padres. 

-Oigan ya, dejen a Jungkook irse, con ustedes la platica no tiene fin.- Bromeó ella tomando del brazo al pelinegro. -Vamos te acompaño a la puerta bambi.- Le dijo usando su apodo, Jungkook sonrió negando con la cabeza. 

-Hasta pronto.- Se despidió con otra reverencia, ambos se encaminaron hacia la puerta. 

-Perdón, mis papas adoran la platica larga.- Se disculpó ella sonriendo. 

-No te preocupes, la verdad me ayudan a mantenerme pensando en otras cosas y no el mi vida patas arriba.- Confesó él. 

-Es obvio que un amor así no lo vas a olvidar, no es por echarle sal a la herida, sólo te digo la verdad... Deja de intentar olvidarlo, mejor vive tu vida lo mejor que puedas, disfrútala.- Le dijo Lisa  sinceramente. 

Siempre tú...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora