Siempre tú...

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-Wow... Es que aún no puedo creer que Minho sea... Pffffffff.- Eunwoo y Jimin estaban en una cafetería, claro que Jimin había tenido que ponerse un gorro y lentes de pasta para pasar algo inadvertido y no empezar otra tanda de chismes. Tae había convencido a Minho de ir a una tienda de videojuegos, el pequeño fue más a regañadientes pero al final había aceptado con la promesa de que saliendo de ahí iría a darle una sorpresa a Jungkook a la oficina.  

-Pues si, fue algo, bastante loco en su momento, aunque Jungkook aún no sabe cómo es que... Bueno no tiene idea de...- Jimin no sabía ni como terminar aquella frase, Eunwoo lo miró asintiendo con la cabeza. 

-Minnie... Ese día, esa noche yo quise disculparme y entiendo que no quieras verme o que no hayas querido responder mis llamadas o mis mensajes pero siento y quiero disculparme y quizá una disculpa no arregle todo el daño que cause aún sin saberlo pero aún así de verdad... Lo siento mucho.- Le dijo mirándolo a los ojos, JImin sabía que estaba siendo sincero. 

-Eun, yo... Bueno a final de cuentas tú no tienes la culpa, sí debiste decirme antes todo lo que sabías, pero ya pasó y no lo vamos a cambiar, y la verdad es que yo no te culpo de nada, al contrario, yo también te debo una disculpa por... Por lo que pasó entre nosotros, perdóname de verdad yo no quería lastimarte o usarte de ninguna manera yo...- Eunwoo posó tímidamente su mano sobre la de Jimin.

-Todos hacemos cosas que no debemos o no queremos realmente cuando estamos heridos Minnie, esta bien... Tampoco me pusiste un arma en la cabeza y yo siempre estuve consiente de lo que podía pasar así que no me victimices, tampoco ¿eh?- Bromeó el castaño haciendo sonreír al rubio y retirando su mano de encima de la suya. -Yo... He debido hacer cosas... Que no me enorgullecen mucho durante este tiempo que no nos hemos visto pero por lo menos me va a quedar en la buena conciencia el hecho de que pude cumplir mi promesa contigo.- Dijo mirando al vacío antes de continuar hablando. -¿Sabes? Además de mi familia, eres la única persona que de verdad me ha importado en la vida, el único que de verdad me ha hecho sentir algo real y antes de irme yo necesito entregarte esto.- Eunwoo metió la mano al bolsillo interno de su abrigo y saco una pluma, parecía una pluma bastante elegante, era azul oscuro con una franja dorada por el medio y la puso en la mesa frente al rubio, el cual la miró sin comprender. 

-Mmm... ¿Es un bolígrafo caro?- Lo tomó entre sus dedos  y luego miró al castaño. -¿G-gracias?- Dijo aún dibitativo, Eunwo sonrió un poco divertido. 

-Es una grabadora Minnie, la parte de arriba es el botón de play... Pero...- Siguió antes de que Jimin presionara dicho botón. -Es mejor que lo escuches a solas antes de que decidas qué hacer con la información, creo que las respuestas a todas tus preguntas están ahí.- Jimin lo miró sorprendido. -No... No voy a decirte cómo conseguí la grabación por que como te dije, no estoy orgulloso de mi pero si de lo que significa para ti poseer esto, y como no creo que vuélvanos a vernos quiero decirte que te deseo todo lo bonito que te pueda pasar Minnie, Sé que así será por que te lo mereces.- Le sonrió tiernamente, a Jimin se le llenaron los ojos de agua salada. 

-Entonces si te irás...- Dijo sin más, sabía que era lo mejor para Eunwoo pero aún así le dolía por que a pesar de todo, ese castaño de mirada tierna y noble siempre lo había tratado bien, lo había cuidado y había estado para él cuando estuvo completamente solo. 

-Iré a casa, a Jeju una temporada a estar con mis padres y mi hermana y después me iré a New York, después del caso de Nam una firma me ofreció un puesto allí y es una buena oferta, además quiero retirar a mis viejos, ellos ya no deberían trabajar a estas alturas así que...- Se encogió de hombros, Jimin le sonrió, no se equivocaba, Eunwoo era un chico demasiado bueno. 

-Tú también te mereces todas las cosas buenas que están por pasarte Eungui, y aunque no lo parezca o no lo creas... D-de verdad te quiero mucho y quiero darte las gracias por todo lo que has hecho por mí.- Jimin sintió sus mejillas humedecerse y sonrió. -Ugh, perdón, las hormonas me tienen hecho un desastre todo el tiempo.- Explicó levantando un poco las gafas para secar sus lágrimas, Eunwoo lo miró. -Oh... Yo... Voy... Estoy...- Puso sus manos sobre su barriga dándole a entender a Eunwoo lo que no había entendido según su seño fruncido, pero en cuanto cayó en cuenta sus ojos se abrieron con sorpresa y miraba de esos ojos verdes a las manos sobre su vientre.