—¿Realmente no le hablarás?
Heldet me mantiene realmente estresada. Muevo todos los papeles hacia mi escritorio, preparándolos para la noche larga que voy a tener.
—No. —respondo, simple.
—Por Dios, Bela.
Se interpone en mi camino. Resoplo frustrada-. Sé que debe de ser algo frustrante para lo que hizo en su habitación per-
—Heldet. —la corto con un tono de voy tan firme, que logro asustarla—. No tiene que ver con lo que yo haya visto, a este punto son muy pocas las cosas que me asustan viniendo de Maksim y todo este mundo.
—¿Entonces qué te impide perdonarlo?
—No quiero que mis hijos tengan que ver las cosas que su padre vio de niño y que en algún lugar de su cerebro, aún sigue creyendo que es normal. —contesto—. Cuando tengan la suficiente edad, se enterarán de quiénes son y qué hace su padre, eso nunca lo voy a impedir. Pero que esté dispuesta a serles sincera no me hace perder la cordura al imaginar lo que pasaría si llegaran a ver alguna de las escenas de ira de su padre. ¿Te imaginas que Fiodor hubiese visto aquello en nuestra habitación? Cómo le explico la razón por la que aquellos hombres estaban colgados del techo sin la cabeza, y que su padre fue quien los asesinó?
Heldet decide tomar asiento, hago lo mismo. Toma mi mano brindándome apoyo.
—Heldet, hice todo lo que estuvo en mis manos para Maksim se deshiciera de todas esas propiedades donde fueron torturadas y arrebatadas tantas vidas, posiblemente inocentes. —confieso—. Construimos esta casa para tener un hogar puro en que nuestros hijos pudieran crecer sin el remordimiento de los hechos del pasado. Pero Maksim parece hacer perdido la cordura hace una semana.
—¿Te disculpaste? —pregunta, interrumpiendo mi confesión.
—¿Uh?
—¿Por besarte a media fiesta. —explica—. ¿Lo hiciste?
Niego, sin entender.
—¿Por qué preguntas eso, Heldet? —sus manos se apoyan con fuerza sobre la mesa, y luego me observa.
—Su matrimonio es como un eclipse. Maksim es la oscuridad de la noche en el mundo, y tú eres esa fuente de luz que lo ayuda a creer que no está tan perdido. —explica—. Imagina si en lugar de un sol y la luna, solo hayan dos lunas.
—¿Qué significa eso? —cuestiono, confundida.
—No defiendo a Maksim sobre las cosas que hace, pero a este punto creo que deberías de entender que tu luz, es lo único que le recuerda a Maksim que sigue siendo un humano y que por tanto, a veces necesita actuar como tal. Bela, si te vuelves una luna igual que él no habrá nadie que pueda ayudarlo y llegará un punto en que ambos pelearán por ser la única sombra, y terminarán rompiéndose.
No digo nada, más bien analizo todo lo dicho por Heldet, y el peso que ha tenido sobre mí.
Se pone de pie, y llama mi atención.
—¿Ya te vas? —pregunto.
—Sí, esto de ser una buena amiga es realmente agotador. —finge limpiar sudor de su frente, me roba una carcajada.
—Adiós, gran amiga. —me despido para luego comenzar a ojear los documentos.
Se dirige hasta la gran puerta de cristal y antes de salir, se detiene.
—Y Bela. —dice y giro mi rostro hacia ella—. Recuerda que en este momento sus hijos, dependen de que ustedes dos no colisionen.
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Wet dreamZ [COMPLETA]
Teen FictionBela Solovieva ha vivido una vida normal para una chica de su edad, o eso era lo que todos pensaban. A los 17 años y sin ninguna experiencia en el amor, conoce a Fredek, de quien ella creía se encontraba totalmente enamorada. Todo marchaba de maravi...