Capítulo 18: celos.

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Me levante de mi asiento y fui directo con Sam. En el camino aproveche para llenar de aire mis pulmones. Estaba asustada por como iba a reaccionar. Llegue y me acerque a el lentamente. Sam estaba golpeando todo lo que estaba a su alcance. Me acerque a el y fue como comenzar la 3ra guerra mundial: muchos gritos, golpes y todo eso.

-Sam...-. Comencé a decirle mientras me acercaba poco a poco a el.

-¡¡¿Que?!!-. Me grito súper histérico.

-Oye, tranquilo-. Intente calmarlo mientras alzaba las manos.

-Sólo dime, ¡¿que quieres?!-. Siguió gritando aun mas histérico. Si, creo que el oye, tranquilo no funciono. En fin.

-Quiero saber, ¿que te pasa?-. Pregunte yo tratando de parecer calmada.

-¿Quieres saber que me pasa? ¡¿Quieres saber que me pasa?!-. Grito cada vez mas recio. Me estaba asustando.

-¡Si!-. Le respondí yo.

-De acuerdo te diré... ¡COLE ME PASA!... desde que llegamos acá lo único que hace es andar detrás de ti como perro-. Siguió gritando a lo que yo respondí sólo retrocediendo y miradas asustadas. Jamas lo había visto así.

-Hey, tranquilo, ya sabes que sólo te amo a ti Sam-. Lo intente tranquilizar de nuevo. Me acercaba poco a poco a el.

-¡El TE BESO Samantha! ¡¿Como quieres que este?!-. Si, creo que esta sordo el hombre. ¡¿Que no oyó que le dije te amo?! ¡Agh!.

-¡Por favor! ¡Yo no sentí NADA!-. Ya me estaba sacando canas verdes y le grite.

Sam sólo volteo hacia los chicos, quienes estaban admirando la escena boquiabiertos, luego dirigió su mirada hacia mi. -... ¡Agh!-. Sólo pudo gruñir y se fue sin mas.

Yo volví hacia con los demás hecha un fuego. Todo esto era culpa del inútil de Cole. ¡¿Como pudo hacer esto?!. Lo voy a asesinar, eso se los aseguro. En fin, nadie quiso seguir después de eso así que nos dispersamos por todo el hotel. Camine hacia mi habitación y alcance a escuchar una conversación muy interesante.

***************
Conversación de Gabe y Dana...

-Compa, ¿Por que siempre estas detrás de Fernanda? ¿Que te traes con ella?-. Pregunto muy calmado Gabe.

-No, nada... esta todo bien. Sólo protección-. Respondió Dana algo nervioso.

-¿Seguro? Es que no esta nada mal la chica-. Le dice Gabe mientras mira a la nada.

Dana al oír eso le da algo en estómago que hace que apriete muy fuerte los puños casi por impulso. -¿Ah si?-. Le responde entre dientes.

-Si, de hecho-. Responde Gabe ahora si mirando a Dana. Dana no responde, sólo lo mira fijamente. -¿Estas... bien, compa?-. Pregunta con un tono nervioso.

-Nunca estuve mejor-. Dice con cierto sarcasmo y se va del lugar sin mas.

******************
Fin de la conversación...

Yo corrí rápido lejos de ahí para que no pudieran verme. Entonces Gabe ama a Fernanda. Jamas me lo esperaría de el. Si que sabe esconder lo que siente. Genial, ahora hay mas pretendientes. Desde ahí, ni Gabe ni Dana se dirigían la palabra. Que duro. En fin, seguí caminando y escuche gritos. Provenían de por la piscina. Al parecer era algo sobre que... corrí hacia donde se oían los gritos... me imaginaba, era Sam gritándole a Cole y después a Fernanda. Era algo sobre que Fernanda ayudo a Cole a que me besara y, según Sam, era todo su culpa. Entre Fernanda y Cole intentaban calmarlo. Sabia que era inútil. Ahora se que cuando el se enoja no hay nada que lo pare. No se por que sentía que si seguían así podría llegar a lastimar a alguien. Así que corrí lo mas que pude para poder frenar la pelea. Fue muy tarde... Sam levanto su mano, con todo el coraje del mundo, y le propino una santa cachetada a Fernanda. La cachetada dejo marca e hizo que Fernanda cayera al suelo. Sam no hizo mas que verla tirada. Cole la ayudo a levantarse. Fernanda se fue, sin mas, a su habitación y se encerro ahí. Yo, sumamente enojada, fui con Sam. Todo mi ser quería darle un golpe igual o peor que ese... pero había algo que me detenía. En fin, opte por sólo hablar con el.

-¡¿Que te sucede?! ¡¿Acaso estas loco?! ¡¡¿Por que le pegas?!!-. Comencé a gritarle. Cole ya se había retirado así que estábamos solos.

-¡Ella ayudo a Cole con eso del beso!-. Me grito enojado.

-¡Eso no te da derecho a golpearla!-. Estaba que me salia humo por las orejas.

-¡¡No voy a permitir que nadie se interponga entre nosotros!! ¡¿Oíste?! ¡¡NADIE!!-. Me explico gritando como vieja histérica.

Yo retrocedí un poco y mire hacia abajo por unos segundos. -Estas loco...-. Murmuré mientras volvía a dirigir la mirada hacia sus ojos.

El hizo un moviento que casi parecía que quería golpearme. Pero no lo hizo. Sólo se fue de ahí. Así, sin mediar palabra. Yo me dirigí hacia la habitación de Fernanda. Toque la puerta. Después de unos segundos la puerta se abrió y entre. Me senté por un lado de Fernanda y le toque el hombro. Ella estaba sentada en su cama con la cabeza entre las rodillas. Estaba tocándose la zona lastimada.

-Fernanda, ¿estas bien?-. Dije con delicadeza mientras seguía tocando su hombro.

-Si, estoy bien... sólo que... un hombre jamas me había golpeado así-. Respondió Fernanda con la mirada perdida.

-Lo se, pero ya le daré su merecido, no te preocupes, no dejes que te afecte-. La console dándole un abrazo.

Ella asintió. -Gracias...-. Me dijo con una sonrisa débil.

-De nada-. Respondí apartandome de ella para dedicarle una sonrisa.

-Pero, ¿puedes dejarme sola por un momento? Necesito pensar-. Me pidió Fernanda, con mucha delicadeza.

-Seguro, si necesitas algo estaré ahí afuera-. Le informe mientras salia lentamente de la habitación.

-Si, gracias-. Me respondió por ultimo y volvió su cabeza entre sus rodillas.

Asentí y cerré la puerta detrás de mi. A ver, ¡¿Que les pasa a los chicos hoy?!. Están envueltos en el coraje. Sera que tiene problemas de ira. O de plano ya están celosos unos por los otros. No lo se, la verdad. Pero algo si tengo bien claro... aquí todos somos amigos, así que nadie tiene derecho a lasmitar a NADIE de nosotros. Fernanda no salio durante horas. Mas bien, no salio en todo el día. Ya es hora de dormir. Dormiremos, a ver que nos espera para mañana.

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Desde hace días se unió una nueva escritora que me esta ayudando a hacer parte de los capítulos. Es mi mejor amiga, Chely. No he tenido tiempo de presentarla así que ella es, ¡un aplauso para ella también! Bien, es todo, gracias por todas las leídas. ¡Los quiero!.

Shining In The Dark. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora