Shining In The Dark. ©

Capítulo 62: Morgan.

Samantha

Todos volteamos hacia donde proviene la voz. Ahí se encuentra el tipo con los brazos cruzados. Me doy tiempo para ver su atuendo. Lo demás no es importante, lo que me llama mas la atención es el rifle que trae colgado. Me quedo helada.

-¿Quién mierdas eres tu?-. Pregunta Dana con los brazos cruzados también.

-Mi nombre es Morgan-. Dice con una sonrisa. Pero no es una sonrisa precisamente amable. Mas bien, es una de esas que te dan pesadillas.

Morgan voltea con Ridyan y él agacha la cabeza.

-¿Y luego?-. Dice Fernanda irritada.

-Y luego que los estoy buscando a ustedes y ahora que los encontré...-. Dice en un tono frío y toma su rifle.

Ahí mi corazón se para por un segundo para volver a todo lo que da.

Maldito Morgan...

De repente siento una mano jalarme y vuelvo a la realidad. Resulta que en algún momento comenzamos a correr y Cole tomado de mi mano.

Volteo hacia atrás y veo a Morgan caminar detrás de nosotros. Caminar. Como si estuviera 100% seguro de que nos alcanzará así.

Ja, ni que fuera que...

De repente un ruido muy fuerte suena a mi izquierda. Morgan disparo.

¡Disparo!

Corrimos mas rápido pero el sigue caminando. Entonces fuimos a donde se supone esta el campamento.

Y ustedes dirán "si si, que bien, pero... ¿Dónde mierdas están los bebés?"

Pues tranquilos, amigos, los bebés están sanos y salvos con nosotros.

Aunque no tan salvos...

Pero sanos si. En fin, seguimos corriendo hasta perderlo. Tiempo después llegamos al campamento.

*~*~*~*~*~*~*~*~*

Ya estamos en el campemento. Ahora que me doy cuenta, Morgan miro mucho a los bebés. No se que planea, pero se que no es bonito.

Estoy en mi tienda con Lizzie y Cole esta... Bueno, Fernanda esta en su tienda con Manuel.

De repente alguien llega y me abraza por detrás. Yo me volteo sonriente pensando que es Cole.

Pero, oh, sorpresa...

-¡Ridyan! ¿Qué haces aquí?-. Pregunto tomando mi espacio vital.

-Nada, sólo vine a saludar... ¿Que no puedo?-. Dice levantando una ceja. Yo me tenso menos.

-Si si, perdón, sólo es que... Me asustaste, es todo-. Digo soltando aire. Tengo Lizzie entre mis brazos.

-Linda niña, es tuya-. Comenta señalando a Lizzie con la cabeza.

-Gracias y si, es mia-. Respondo sonriendo hacia ella.

-¿8 años y teniendo bebés, Samantha?-. Se burla cruelmente del hecho de ser mas pequeña que él.

Me cruzo de brazos.

-14 y contando, idiota-. Digo levantando las dos cejas. -¿Y tu cuántos tienes? ¿100?-. Comento moviendo la cabeza de una manera extraña.

Y ahí es donde se siente un golpe de orgullo. Que bien se siente, Dios.

Entonces su sonrisa triunfante desaparece.

-Como sea, yo quería invitarte a pasear por el lago-. Me dice encogiéndose de hombros.

¿Qué mierdas...?