ENCANTADOR - Jikook/Kookmin

Parte 8

Al llegar al departamento de sus padres, Jimin dejó su maleta y salió raudo en su camioneta a buscar a Jungkook. Mientras conducía lo llamó varias veces, pero no le contestó. Le dejó también algunos mensajes. Trató de comunicarse como pudo.

Jungkook tenemos que hablar. Las cosas no son como tú piensas.

Por favor llámame. Necesito explicarte.

Jungkook, lo siento tanto.

Cuando llegó a la casa de Jungkook tocó a la puerta durante algunos minutos, pero nadie abrió.

Definitivamente, no quiere saber nada de mí, pensó.

A Jimin nunca le había importado alguien tanto como le importa Jungkook. Siempre fue despreocupado con sus parejas y jamás le fue fiel a ninguna. Pero Jungkook es distinto a los demás. Él lo trata con ternura y nunca ha sido brusco con él en la intimidad. Se siente terrible por hacerlo pensar que él no es importante para él. En las conversaciones que han tenido se ha dado cuenta de que lo admira profundamente por ser una persona atenta, aplicada y enfocada en sus metas. Tan distinto a él, que a pesar de ser una persona encantadora ante los demás, se siente tan perdido.

Sin saberlo, Jungkook se está transformando en la persona más importante de su vida.

Ya de vuelta en el departamento, Jimin deja de insistir con las llamadas y mensajes hacia Jungkook. Su preciado Jungkook. Extraña sus caricias, sus besos y su sonrisa. Pensando en él, se duerme profundamente preso del cansancio del viaje. Pasada la medianoche despierta y revisa su teléfono dándose cuenta de que Jungkook no ha escuchado ni leído ninguno de los mensajes que le ha dejado. Mucho menos le ha devuelto las llamadas. Lo invade una sensación intensa de frío que hace temblar su cuerpo. También se siente enojado consigo mismo por no haber sido honesto.

Se quedó acostado un rato mirando el cielo de su habitación, preguntándose si debería insistir en buscar a Jungkook o simplemente dejar que todo decante, pero la ansiedad lo estaba matando. A ratos trataba de convencerse de que el silencio de Jungkook era producto de un simple berrinche, pero recordaba su cara en la estación de trenes y esa idea se disipaba rápidamente. Se dio cuenta de que tal vez lo había perdido para siempre. Lo había arruinado, como muchas otras veces antes, sólo que ahora le importaba.

Se levantó, se colocó los zapatos y la chaqueta y se subió a su camioneta. Nuevamente va a buscarlo. Mientras repetía en su mente:

Será la última vez que te busco Jungkook.

Llegó nuevamente a su casa y estaban todas las luces apagadas.

Debe estar durmiendo, pensó.

Titubeó antes de tocar la puerta. Luego de 3 veces entendió que nadie abriría. Miró por la ventana del frente y se dio cuenta de que las cortinas estaban abiertas.

¿Dónde estará? ¿Y con quién?

Jimin volvió al departamento. Estaba casi resignado a su destino, que más que destino era una consecuencia de una mala decisión. Lo cierto era que Jimin nunca había estado con otro chico mientras ha estado con Jungkook, pero dados sus antecedentes previos de público conocimiento, sería difícil convencerlo de lo contrario. Jimin es encantador, seductor, guapo, pero jamás ha sido fiel ni capaz de comprometerse con alguien.