ENCANTADOR - Jikook/Kookmin

Parte 47

Jimin mira con desconcierto a su padre, luego voltea la mirada hacia Jungkook esbozando una tímida sonrisa.

-¿Entonces no es menor de edad?

-No -responde su padre.

-Qué maldito hijo de puta -comenta Jimin.

Jungkook ríe. No podría estar más aliviado y feliz con la noticia.

-Muchas gracias, Sr. Park.

-Realmente no hice nada. Ahora debo irme.

-Gracias papá, nos vemos.

-Adiós.

Jungkook acompaña al padre de Jimin a la puerta y le vuelve a agradecer su tiempo.

-Jeon Jungkook, ¿dónde crees que vas? -le pregunta Jimin cuando lo ve buscando su chaqueta.

-Tengo que ir a hablar con ese...

-No, claro que no irás.

-¿Pero por qué no?

-Porque lo verás mañana de todas formas, además no lo pongas sobre aviso. Habla con tu jefe para primero lo despidan, así no tendrás problemas en el trabajo.

-Sí, esa es una buena idea.

-Ahora tú y yo tenemos que ocuparnos de algo.

-¿Ah sí? ¿De qué?

-Bueno... ahora vamos a salir a celebrar porque ya llevo demasiados días encerrado gracias a ese imbécil.

-¿Y dónde quieres ir, mi amor?

-Vamos a comer algo, yo te invito y no aceptaré un no por respuesta.

-Bueno, vamos.

Jungkook conduce hasta el restaurante favorito de su novio y mientras lo hace, un enamorado Jimin lo observa y acaricia su cabello con sus dedos.

-Lamento que hayas tenido que estar tantos días sin poder salir de la casa.

-No me importa estar encerrado, pero que sea contigo.

-Y todo por culpa de ese miserable.

-Pero no hablemos de él, aún no.

Cuando llegan al lugar, entran de la mano. Jimin es conocido por todos los que trabajan ahí y lo saludan afectuosamente porque antes siempre iba con sus padres. Los clientes que se encuentran en el restaurante se quedan observando fijamente a la pareja de novios. Ambos lucen tan relajados y felices.

-Mi amor, el restaurante está lleno, ¿habrá alguna mesa para nosotros?

-No te preocupes, si no hay ninguna mesa disponible esperaremos en la barra. Te apuesto que seremos los primeros en la lista.

-Estoy impresionado -Jungkook lo mira asombrado.

-Eso no es mérito mío, ocurre que he venido muchas veces con mis padres.

-Parece que tu padre es un hombre poderoso, en todas partes.

-Me parece que lo es, dicen que el dinero es poder.

Se acomodan en la barra y ambos piden algo para beber.

Después de un rato, un mesero se acerca a ellos y los lleva hasta su mesa.

-Nunca había estado en un lugar tan elegante -le comenta Jungkook.

-¿Te gusta el lugar?

-Sí, me gusta mucho.

-La comida te encantará, es la mejor.

Se sientan mientras el mesero deja sus copas sobre la mesa.

-¿Pedirán algo más para beber?