Capítulo 41

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Miles tenía la hermosa fantasía de empacar e irse. Cosa que no podíamos hacer. No podíamos solo escapar, aunque haya sido algo que haya querido hacer mucho. Pero no era así de simple.

"Maggie, tengo miedo de ser el que sigue". Lo dijo con tanta desesperación, tanto desamparo, tanta tristeza.

Había algo muy raro en ambas noticias. Miles insistió en que me las quedara y las leyera bien y lo hice.

Uno: ¿Por qué Drake confesaría? Si tenía tanto dinero como para pagar la fianza, más el silencio de todos. Lo hubiera hecho tranquilamente sin tener que confesar públicamente nada.

Dos: ¿Por qué le importaría tanto saber si yo tenía esta información mientras me besaba en la cama de su propio hotel? Quise creer que era lo suficientemente sensible para no tener sexo conmigo sin saber la verdad. Pero eso, no se lo cree nadie.

Tres: Evelyn Murphy. Una chica perfecta, inteligente, con una sonrisa muy encantadora, parecía una chica feliz y llena de vida. Una chica así no se acerca a veinte metros de alguien como Drake ¿Y la goma para el pelo como la explicas? Exacto, extraño.

Cuatro: Drake Marxwell no era una mala persona. Por más raro e imposible que eso suene. Al menos, hasta donde yo conozco.

Puede negármelo todo el mundo o no creerme, pero Drake se ha mostrado compasivo conmigo. Se disculpó cuando supo que me había lastimado, me hizo sentir un poco mejor sobre el tema de mis padres con pocas palabras, paró el momento en el hotel conmigo al darse cuenta que yo no quería más.

Drake solo molestaba. Se divertía cuando los demás hacían el ridículo. Se divertía con mi debilidad hacia él (como todos los chicos). Estar con muchas personas y nunca tener una relación seria no está para nada mal, pese a todo lo que la sociedad (y mi propia religión) pueda decir.

Lo que hacía Drake era un síntoma más de tenerlo todo servido y hacer todo sin esforzarse. Porque, la mayoría en es casa eran exactamente igual a él o incluso peores. Y, ninguno ha matado a nadie.

Accidente o no, Eddie si está muerto y por algo que fue idea de Drake. Si, es verdad.

Pero Evelyn... Evelyn es otra historia que no está respaldada por absolutamente nada.

Guardé las hojas debajo del colchón con la carta. Suspiré al verla ahí.

Era martes. Ese día más que nunca tenía que hablar con las chicas y decirles todo, pero creo que ya eso no es una opción. No sé porque pensamos que un grupo de cuatro extrañas con un trauma diferente cada una podría durar. Y tampoco sé porque lo creyó la persona que escribió las cartas.

Recordé que los martes a la noche pasaba otra cosa.

Meterte en un teatro con un supuesto asesino es la peor idea, Maggie ¿Qué mierda te pasa?

Otra parte de mi en serio estaba convensida de que él no era eso, de que todo era un error, de que había algo más que pasaba por alto.

Salí de mi habitación y de mi casa.

La realidad también era que, si empezaba a portarme sospechosa, él entendería que yo sabía algo y, lo más probable, es que eso sea peor.

Llegué hasta el edificio principal y me metí adentro abriendo la puerta con cuidado. No había ninguna luz y eso me estaba haciendo arrepentirme.

Llegué hasta el teatro y abrí una de las puertas. Lo ví a Drake sentado en el mismo lugar que la última vez y noté muy rápido que lo que estaba mirando era "Titanic".

Me acerqué hasta él y me senté a su lado. No se sorprendió de que estaba ahí, tampoco se volteó a verme.

-Creí que solo te gustaban películas de antes de los 80- solté.

-Y yo creí que los martes a la noche te cogías a Miles- respondió con la vista en la pantalla grande- Ambos creímos mal.

Noté que hasta que terminó la película jugó con la scrunchie en su mano.

Cuando empezaron los créditos, Drake se levantó e hizo el mismo camino que la última vez.

También lo seguí hasta la sala de proyección arriba y lo ví guardando las cosas.

Un recuerdo me invadió y empecé a sentir un terror descomunal. "Seguramente, los gemidos no se escucharían, estás cómodo, tienes tiempo de huir si alguien entra al teatro".

¿Cómo pude haber sido tan estúpida? Él literalmente me estaba describiendo el mejor lugar para matar a alguien.

¿Ahora desconfías?

-Hoy vine caminando- escuché y salí de ese trance tan espantoso.

Bajé las escaleras primero y el camino hasta afuera fue en silencio. Aún me sentía incómoda. Esto no fue buena idea.

-Lamento lo de ayer- soltó mientras caminábamos hasta nuestras casas- Espero algún día poder explicártelo. Pero, en serio, Maggie, no me obligues- su tono fue increíblemente honesto, tanto que me asustó.

-Tu tienes tus cosas... y yo las mías.

Muchas mías. Cosas que no sabe. Cosas que nadie sabe. Por suerte, no soy Drake Marxwell y no es noticia si yo cometo un crimen.

Las hermanas Omega 💌 La aventura de crecerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora