Capítulo 3

12 2 0
                                    

La hora de la asamblea general había llegado, así que, yo y Carmen nos dirigimos detrás de la universidad, hacia el patio.

Una vez allí, noté que había muchísimas sillas mirando a un escenario con un podio y micrófono.

Conocí más a Carmen en el tiempo que había que matar hasta venir. Resulta que siempre le interesó el teatro, había hablado con algunas de las chicas de la fraternidad, tenía un hermano mayor, sus padres la apoyaban en lo que hacía, soñaba con cantar y llenar teatros.

En otras palabras, una anti-Maggie. Yo no me subiría a un teatro sin vomitar, solo hablé con ella, Bryan y Shelby y ya me parece suficiente gente, y mis padres definitivamente no estaban contentos con mi carrera.

Pero de todas formas, me llevaba muy bien con ella, esperaba que fuera mi amiga en un futuro ¿Cuánto se tarda en hacer un amigo? ¿Cómo te das cuenta?

Me senté en una de las sillas que estaba por el medio junto a una chica castaña clara de ojos grisáceos que me miró con una sonrisa en forma de saludo. Le sonreí en respuesta. No era de mi casa, pero parecía amable.

Carmen se sentó de mi otro lado y pasaron unos minutos hasta que todos llegaron y se acomodaron.

Apareció una señora rubia muy bien vestida, con perfecta postura en el escenario y se acercó al micrófono.

-¡Bienvenidos, estudiantes! Soy la directora de esta institución, la directora Simmers- habló con una sonrisa- Está asamblea, primero, es para felicitarlos a todos por estar aquí. No es una escuela fácil, lo sé muy bien. Espero que hayan podido acomodarse un poco en sus respectivas casas- empezó- La otra cosa importante de la que debo hablar, algo que es muy necesario para que la institución funcione correctamente, las reglas de Marxwell.

Noté que se puso más seria tras decir aquello y también parecía que hubo más silencio que antes. Me daba escalofríos.

-Regla número 1: No se pude estar fuera de su casa después de las 8 PM. Esto nada más exceptúa los fines de semana.

>Regla número 2: No pueden estar en una habitación del sexo opuesto después de las 5 PM hasta las 9 AM del otro día.

>Regla número 3: Las fiestas están permitidas solo los fines de semana, pero sin una gota de alcohol u otra sustancia dañina. Si llego a estar, por casualidad, pasando cerca cuando la fiesta termine con una prueba de alcoholismo, no dudaré en hacérsela a cualquiera de ustedes.

>Regla número 4: Aquí tienen todo lo que necesiten. Solo podrán salir del campus, a menos, que yo lo autorice.

>Regla número 5: Si se exceptúan de cualquier clase, debe ser notificado al profesor correspondiente el porque.

>Esas son las reglas de Marxwell, rompen una y tienen una advertencia. Solo tienen cuatro, úsenlas con discreción, porque cuando lleguen a la cuarta, están fuera de aquí. Expulsados.

Eso creó un ambiente aún más tenso entre los recién llegados. Sabía que yo no haría ninguna de esas cosas siquiera.

Fiestas, alcohol, ver gente en general, estar en la habitación de un chico me sonaba lo más alejado posible. Sabía que no tenía que preocuparme, pero, de todos modos, daba miedo.

-¿Han entendido?- todos asentimos en silencio y la directora sonrió- Muy bien. Espero no tener problema con ninguno de ustedes- continúo- Les deseo mucha suerte en esta nueva etapa- parecía que con tan solo dejar de hablar de la universidad en si, le cambiaba la actitud completamente- Pueden retirarse.

Y así lo hicimos, todos nos fuimos parando para ir cada uno a su fraternidad.

-Da un poco de miedo, ¿no?- le pregunté a Carmen mientras caminábamos.

-Nah... No es para tanto- contestó con un ademán de mano restándole importancia.

-Es raro que no haya hablado de los rituales de iniciación- comenté.

-¿Qué hay con eso?

-No sé... Digo... Sabe que se hacen, me imagino- respondí- ¿Por qué no los prohibe?

-Creo que el mundo ya se resignó con eso- dijo- Es algo que no puede prohibirse, es algo que se hace y punto- agregó- Además, Maggie...- cambió el tono a uno más divertido y pícaro- ... ¿crees que alguien realmente cumple alguna de esas reglas?

💌💌💌

Ya era de noche y estaba en la cama con solo mi lámpara prendida mirando a la nada, pensando.

Tuve la charla a solas con Shelby, la cual, fue una gran perdida de tiempo. Solo me preguntó cosas demasiado estúpidas. Tuve que mentir en la mayoría.

Primero me preguntó cuál era mi serie favorita, cuando respondí "The Big Bang Theory" me gritó "¡Error! Gossip Girl". A partir de ahí, entendí que si no era una de ellas, iba a convertirme en una, así que, empecé a contestar como ella lo haría.

No fue muy difícil adivinar ciertas cosas.

Pero eso no era realmente lo que me molestaba de esa conversación. Había una regla más que tendría que recordar.

"En la casa Kappa no tenemos reglas, solo una: Tienes que hacer exactamente lo que yo te diga, sin importar que".

Las hermanas Omega 💌 La aventura de crecerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora