Capítulo 83: Moviendo las piezas del tablero...

172 17 25
                                    

André Alekeesev sabía bien donde golpear a la sagrada trinidad para causar el mayor daño posible y el cuerpo de Hui, mal herido pero vivo, había sido arrojado a los pies de Tao desde un auto en marcha cuando él llegaba a la Universidad poniendo el alerta no solo a Yoh y los guarda espaldas del considerado heredero de Baishe, sino de Haru, Satoru y Sarah.

—¡Tao cuidado! —había reaccionado Yoh al ver el vehículo en marcha arrojando algo hacía el chico, cubriéndolo con su cuerpo tan rápido como podía.

—¡Pero que mierda!

Si bien Tao mostraba una gran sorpresa ante la inesperada situación, tampoco se vio tan afectado como quizá era el deseo de Alekeesev, únicamente aprovechaba la situación para dejarse mimar un poco más por Yoh.

—¿Estás bien?

—Un poco asustado, no me esperaba eso ¿Quién es ese?

—Hui...el aspirante a líder de la mafia en Hong Kong.

—¿Es el imbécil del ataque de ayer?

Y Tao había observado con indiferencia, dando indicaciones a los guardaespaldas.

—Yoh, me siento un poco inseguro amor ¿Me acompañas hasta mi salón de clases?

Decía con una ensoñadora sonrisa y Yoh solo asentía tomando la mano que le ofrecían.

Desde luego a Feilong la situación no le causó ninguna gracia y todos comprendieron que de nuevo era implícito que lo atacaban a él por considerarlo el eslabón más débil de la sagrada trinidad. Sin dejar de darle la importancia debida a la situación Mikahil había sonreído mientras besaba la preciosa cabellera de su dragón.

—Ese imbécil no sabe lo que le espera contigo amor.

—Solo está logrando acumular puntos para que le rompa hasta el alma ¿De dónde mierda sacó que soy el más débil de los 3?

—Pero eso aunque me molesta y les molesta, nos deja una pauta para saber por dónde comienzan sus ataques—terciaba Asami.

—Ese infeliz...¡Lo quiero en mis manos ya! —Decía Feilong— y que no se le ocurra tocar a Tao o cualquiera de ellos porque si le urge conocer el infierno no tengo inconveniente en ayudarlo.

—Es una sola persona que nos debe mucho a los tres ya—soltaba seriamente Mikahil.

—Te prometo que los dos tendrán su venganza, pero seré yo quien acabe con su existencia—sentenciaba Asami.

—Iré con Tao—decía Feilong suspirando para calmarse—Mikahil ve a ver a Sarah por favor y supongo que irás con Haru.

—Iba a ver primero a Sarah, Kirishima ya salió hacía la escuela de Haru, por fortuna Satoru está en casa de Shinji aun.

—Deja que sea Mikahil quien vaya con ella, luego de lo último que le dijiste es mejor que la dejes en paz.

—¡Son mis hijos! Necesito saber si están bien, si Sarah está bien.

—Sí, un día los reclamas como tuyos, otro sueltas que no los deseabas, en un momento ellos son tu prioridad y al siguiente lo es Akihito. Asami ¿Tienes una puta idea del desgaste emocional al que sometes a Sarah? Si en este momento tus emociones son una montaña rusa, ten la consideración de no arrastrarla—decía con firmeza Mikahil—yo iré con ella solo para que esté tranquila, Anderson y Seiko no han reportado que le haya sucedido algo.

—Eres un tonto Asami, un verdadero idiota. Sarah nunca se interpuso entre tú y tus sentimientos por Akihito, no solo los comprendió te apoyó como nadie lo hubiera hecho, se mantuvo al margen respetuosamente, pero no has tenido la sensibilidad ni de apreciarlo y menos agradecerlo, ten al menos la decencia de dejarla terminar el embarazo en paz y no nos compliques la tarea de protegerla, porque con eso te guste o no estamos protegiendo a tus hijos.

Mi nuevo amanecer sin ti...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora