Capítulo 2: El inicio...

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Sarah abrazó con fuerza la almohada al escuchar que se abría la puerta, era uno de los hombres que entraba a dejarle comida, se había bañado y a falta de ropa propia, usaba una playera negra encontrada en un armario, que le quedaba enorme, ya que era de Asami, a quien no había visto en horas, lo sabía porque en la recamara en la que se encontraba encerrada, había una enorme pantalla que encendió para no aburrirse, Asami le había dicho que "quizá" la dejaría ir...solo "quizá" y por la televisión sabía la hora en la que vivía...las 5 de la tarde.

-¿Asami tardará mucho en venir?-se aventuró a preguntar-

La respuesta fue una fuerte bofetada que la hizo caer al piso, sintiendo enseguida el sabor de la sangre en sus labios y un completo aturdimiento...

-Cállate, perra-dijo levantándola de los cabellos-si no se aun porque estás aquí y no en una de las bodegas...bueno, viéndolo bien, creo saber porque estás aquí, aunque no creo que sea más allá de esta noche, puede que te espere afuera o le pida a Asami ser yo quien te mate...luego de darte la cogida de tu vida...

La arrojó con fuerza sobre la cama y se acercó peligrosamente a ella, pasando su lengua por el cuello de Sarah, que se mantenía callada, fría y con la mirada fija en la nada...

-Si eres así de frígida con el jefe, posiblemente te vayas antes del anochecer-se burló, metiendo su mano por debajo de la playera y acariciando su vientre para deslizarla entre sus piernas-te ves deliciosa...eso es para que comas, si por mi fuera, te dejaba a base de agua...

Sarah no dijo más y sollozó en silencio cuando estuvo a solas, hasta que se quedó dormida...

Kirishima entraba a la oficina de Asami con una carpeta de documentos, le sorprendió encontrarlo así, observando con una mirada que hacía mucho no le veía, la ciudad que a través de ese ventanal a prueba de balas, se extendía de forma majestuosa...Sí, la ciudad que prácticamente le pertenecía, como empresario exitoso y como líder de la mafia en Japón. Kirishima suspiró acomodándose los anteojos, volvió a ver al temible yakuza y esa mirada, seguía ahí, aun no como aquella, pero sí bastante cerca de la mirada que Asami tenía, antes de perder a Akihito...tres años ya del accidente en que el rebelde fotógrafo...carraspeó no supo bien, si para borrar el que era para él un doloroso recuerdo aun, o si era para llamar la atención de Asami, quien salió de su ensimismamiento para verlo indiferente...

-¿Qué pasa Kirishima?

-Feilong y Abatov, confirman que el embarque está ya en América, vendrán la próxima semana...

-Está bien-dijo volviéndose a la ventana de nuevo-Kirishima... ¿La viste?

-¿A la chica?

-Sí... ¿Qué piensas?

-¿De ella o de lo que le dijo?-pregunto recordando la conversación con su jefe esa mañana-

-De las 2 cosas

-Creo que no miente...pero hay que esperar el informe de Kuroda...y...

-Y

-Me recuerda a...ella es...tan...-dijo intentando encontrar las palabras adecuadas-

-Tan parecida a Akihito-dijo con nostalgia-

-Físicamente...

-No, es más que eso...Consíguele ropa, no sé cuánto se quedará ahí...

-¿Quiere que se la envíe?

-No-dijo luego de pensarlo un instante- tráela, yo mismo se la llevaré...

Mi nuevo amanecer sin ti...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora