Mi nuevo amanecer sin ti...

Capítulo 55: Recordándote parte 18.

Entre agitados sollozos Sarah corría al baño y comenzaba a vomitar, Asami intentaba ir tras ella, pero era retenido con firmeza por Feilong y era Mikahil quien se hacía cargo.

—No es el momento, Asami, te va a rechazar y se sentirá peor, además si la conoces sabes que ella en este momento solo piensa en respetar tu momento de dolor con Takaba... ¡mierda! ¡Mil veces mierda! —Decía furioso.

—Lo sé bien, pero también sé que necesito que ella entienda que una cosa no tiene que ver con la otra—decía escuchando a Mikahil hablándole para calmarla.

Conocía la historia del ruso y sabía porque lo hacía, había visto morir a su madre, implorando por una ayuda que no llegaba y que a sus 10 años, no podía dar, para cuando era atendida, ya no hubo nada que hacer y Mikahil tenía en la memoria a su madre, muerta, con casi 6 meses de embarazo, comprendía que lo único que deseaba era no solo que la historia no se repitiera, sino que además, era su manera de esta vez, poder hacer algo. Su molestia entonces no era nada más allá de sentir que Mikahil estaba haciendo lo que le correspondía hacer a él.

—Una cosa a la vez, Asami—decía Feilong, viendo como volvían Sarah y Mikahil.

—¿Necesitas ir al médico? —le preguntaba Asami con genuina preocupación, limpiando las lágrimas de ella con sus dedos, con mucha suavidad.

—No, no es para tanto...Akihito tiene aún cosas que decir, pero debo pedirles que nos detengamos por un momento, por favor. Esto es...demasiado para mí y no puedo imaginar cómo te sientes en este momento, Asami, lo siento en verdad—decía y estallaba de nuevo en llanto— ¿Por qué tanta crueldad, porque tanta saña? Akihito no se merecía eso.

—Sarah—La atraía a su pecho, colocando una mano en la cabeza y otra en la cintura de ella, que no lo rechazaba, pero tampoco correspondía al gesto, solo se recargaba de él, sollozando descontroladamente, Asami se sentía profundamente conmovido por el llanto de ella, porque sus lágrimas eran de una sincera conmoción por saber lo que le había ocurrido a Akihito—Gracias, por todo nena, sé que no he sido lo debía contigo estos días, pero quiero que sepas, estoy y estaré contigo. Ojala puedas perdonarme.

—No es el momento para hablar de eso Asami, enfoca tus cinco sentidos en esto que acabas de escuchar, porque sí no lo haces, puedes perder mucho otra vez.

—Jamás permitiría que algo te ocurriera, ni al bebé que esperas, nuestro bebé, te juro que daría la vida por protegerlos.

—No soy yo ¿no escuchaste? Es Haru...¿Cómo saber si no continua con esos planes? Por favor, yo no podría si algo le pasa, por favor—decía entre lágrimas.

—Te juro que todos van a estar bien...continuemos esto mañana, necesitas descansar.

—No, no, tenemos que terminar hoy, Asami, siento que algo no está bien, solo necesito dormir una siesta, por favor.

—Puedes recostarte en la recamara que...

—No puedo Asami, vine solo para hablarte no voy a quedarme ni siquiera a dormir una siesta.

—Vamos a nuestro departamento—decía Feilong—de paso comes algo, ir a casa de Shinji nos hará perder más de una hora que puedes usar para descansar.

Asami parecía satisfecho con eso, no se quedaba con él, pero al menos muy cerca y protegida, Sarah asentía de acuerdo.

—¿Puedo llevarme ese salmón y la charola de sushi...y los chocolates?

—Haré que te bajen todo...no, yo te llevaré todo—decía Asami y ella apretaba los labios asintiendo.

—Vamos—decía Mikahil.