XXXV | Monstruo

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Decir la verdad puede provocar una daño colateral que es difícil de remediar, eso lo entendió Victor cuando Maeve salió por esa puerta y Golden le gritaba sin parar.

—¿¡Por qué me ocultaste eso!?— pregunto Golden mirándolo— ¿¡Por qué lo hiciste!?

—No lo sabía hasta hace poco.

—¿Y pensaste que quedándote callado lo ibas a solucionar?— Victor la miro— ¿Desde cuando lo sabias?

—Hace unas semanas— contesto sin apartar la mirada— No quería causar problemas.

—¿¡No querías causar problemas y te metiste conmigo y con quien dices es mi hermana?!— le pregunto a grito Golden, tomó un vaso de cristal y lo arrojó, Victor logró esquivarlo y este se estrelló en la pared.

Si dio media vuelta y antes de ir hablo.

—Eres un monstruo Victor Ryddle y esto jamas te lo voy a perdonar— le grito Golden, luego, miró a Lily Potter— Discúlpame con tu abuela por el vaso, se lo repondre.

La castaña cerró la puerta de golpe y desapareció de los territorios de los Weasley para ir a su hogar. Victor regreso su mirada a la ventana y apretó la boca formando una línea recta al ver a Maeve abrazada de Simon Kill, el chico hizo contacto visual con Victor y le sonrio.

Ryddle dio un paso hacia atrás y le dio la espalda a la ventana.

—¿Nuestro padre sigue en junta?— pregunto el chico mirando a su melliza quien salio de su escondite.

—Eso creo, pero el nos prohibio ir a casa...

Victor pasó a su lado y tomó su bufanda verde de Slytherin.

—¿A donde vas?

El joven la miro.

—Estas a cargo de todos hasta mi regreso, voy a ocupar el lugar que me corresponde.

Victoria parpadeo entendiendo las palabras de su hermano y salio detrás de él hacia el exterior de la casa.

—¡No puedes hacer eso, tu no quieres hacerlo!

Victor no le contesto y desapareció de la casa de los Weasley, Victoria se dejó caer sobre la hierva seca que rodeaba la casa.

—¿Que pasa?— pregunto Jean Malfoy llegando a su lado.

—Tomará el lugar de nuestro padre

—Pero el no quiere hacerlo— hablo James y negó con la cabeza— ¿Por qué haría eso?

Victoria negó con la cabeza aun sentada en el piso, miro hacia Maeve y ambas intercambiaron una mirada, Ryddle apartó la mirada.

***

Las voces de los mortifagos llegó hasta el joven mientras se acercaba al comedor de la mansión.

—¿Victor?— pregunto Scabior al verlo llegar.

—¿Que haces aquí? Tu padre te prohibio...—comenzó a escribir el hombre lobo.

—No me importa— negó Victor entrando al lugar, la mirada de todos se posaron en el menor.

Su padre alzó la vista al verlo y sorprendido, hablo.

—¿Que haces aquí?

—He tomado una decisión padre...

—Creo que podemos hablarlo después, estoy ocupado...

—Es el mejor momento padre— lo interrumpio su hijo y se acercó a él, la mirada de los mortifagos se poso en el menor y se miraban unos con otros— Tu me habías dicho de la importancia de nuestra familia y nuestro liderazgo en el mundo mágico, acepto ser tu sucesor y comenzar a asistir a reuniones de mortifagos para ser...

<Para ser lo que yo no quiero y lo hago porque me siento perdido> pensó.

— Lo que tanto anhelo ser— mintió y sonrio— Porque ser tu sucesor es lo que más quiero en mi vida.

Su padre lo miro con el ceño fruncido y el joven tomó lugar en la mesa. Miró a sus hombres y luego señalo a su tio Lucius Malfoy que había sido interrumpido por su hijo, Lucius asintió con la cabeza y continuo hablando.

—...los vampiros han aceptado las alianzas...

Victor se quedo mirando la mesa de madera escuchando una platica que no le interesaba.

La gloire à mes genouxDonde viven las historias. Descúbrelo ahora