HANS
Tomo la bandeja con el postre dejándola dentro del refrigerador, mis nudillos están algo morados por lo que pasó en el cementerio, puedo decir que perdí el control mientras lo hacía, pero es que no podía detenerme, quería que el maldito reviviera para poder matarlo.
Que tan maldito enfermo tuvo que estar como para hacerle eso a sus nietas, era un pervertido y ellas solo eran unas niñas, él se aprovechó de la situación en la que estaban. Anggy paso por mucho con tan solo nueve años, ha luchado tanto ella sola como para que su propia madre la rechace y no le crea.
- Nunca me dijiste por qué no querías que contestará las llamadas de tu madre - Le dice Owen a Anggy.
Están sentados en el sofá de la sala mientras que yo estoy en la cocina viéndolos desde aquí.
- ¿Por qué nunca querías hablar con ella? - Anggy me mira por unos segundos para después volver la vista a su amigo.
- Ya sabes que no teníamos buena relación.
Algo que he descubierto es que Anggy no le ha dicho a nadie sobre lo que pasó, no es algo para cortar, pero ni siquiera a sus amigas o a Owen se los ha dicho, y estoy seguro que si no hubiera sucedido lo del tipo de quiso abusar de ella en aquel callejón, ella nunca me lo hubiera contado y tampoco habría buscado ayuda.
- Sea cuál sea el motivo, ella tuvo que avisarte cuando sucedió lo de Lucy - Sigue Owen, Anggy recuesta su cabeza en su hombro y él la rodea con su brazo - Sabes... Aún recuerdo cuando estábamos en la preparatoria y ella en la secundaria, todo el tiempo quería estar con nosotros.
Se le escapa una risa baja.
- ¿Te cuento un secreto? - Le pregunta ella.
- Dime.
- Le gustabas.
- ¡Que!
- Me lo dijo unos días antes de irme contigo a Havering - Le cuenta - Me confesó que estaba enamorada de ti desde aquella vez que golpeaste a ese chico por llamarla cabeza de zanahoria - Se ríe - Sus planes eran enamorarte cuando estuviera con nosotros en la universidad.
Owen también ríe.
- Lo recuerdo - Le dice él - Esa vez sentí que por poco me besaba.
Le gana el llanto a Anggy al hablar sobre su hermana y la lleva a su pecho mientras llora. A estado así desde hace días atrás de que volvimos de Cranham y el haber despedido a su amiga tampoco fue muy bueno para ella, afortunadamente no ha dejado de ir a las citas con el psicólogo y el terapeuta.
Me muevo con la intención de ir a su sitio cuando el llanto se vuelve pesado a tal grado de que respire con dificultad, pero mi teléfono vibra con una llamada, vuelvo a ver el sitio donde están, Owen la abraza y el nombre que se centra en la pantalla de mi teléfono me hace irme a un lugar más privado.
- Dime - Pido, llevando el móvil a la oreja.
- Lo he encontrado.
- ¿Dónde está? - Pregunto enseguida.
- En la prisión estatal de San Quentin, en California.
Me quedo sin habla cuando escucho eso, ahora entiendo todo y no puedo creer que ese maldito haya hecho una cosa así.
- Hans, ¿Sigues ahí?
- Si, aquí sigo - Respondo - ¿Por qué está en prisión?
- Se le acuso de asesinato hace 14 años - Escucho - Le dieron una condena de 30 años, y lo que he investigado me deja muy claro que hubo muchas inconsistencias en el caso, alguien lo quería lejos y esa fue la forma en la que lo consiguieron.
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Todo lo que somos [En Proceso] #2 Bilogía Todo
RomanceLibro #2 de la bilogía todo "Muchas veces las personas que nos hacen realmente feliz son las que están más rotas" Mi padre esta dañado, mi madre estuvo rota y yo fui creado por una combinación de ambos. A pesar de todo logré no ser una versión de é...