Todo lo que somos [En Proceso] #2 Bilogía Todo

Capítulo 48. Presente

N/A: Antes que nada perdón por publicar el capítulo, las personas que lo leyeron por favor vuelvan a leer este ya que lo que se publicó fue el borrador todo feo e incompleto... Fue error de dedo por andar escribiendo en la madrugada 🥴

Las lectoras que me mandaron mensaje y comentaron que no les aparecía fue por qué lo borré aunque estuvo como por 4 horas publicado jajajaja.

Pero ya, ahora sí está completo, este es el cierre del personaje de Anggy. (Volverá a narrar en un futuro en su epílogo)

Disfruten ahora sí la lectura.

✿✿✿✿

Te esperaré aún sabiendo que nunca vas a volver.

ANGGY

- ¿Qué estás haciendo durmiendo en el piso? - La voz de Owen me hace abrir los párpados viéndolo correr hacia mí.

Ayuda a levantarme, siento la cara hinchada y tengo frío.

- Estoy esperando a Hans. - Murmuró.

Se queda estático mirándome mientras me sostiene.

- Anggy...

- No lo digas. - Lo interrumpo yendo a mi habitación y se viene detrás de mí. - Él está bien, solo me hizo una broma.

Me engaño a mí misma, tal vez si lo creo se haga realidad.

- Él ya no está. - Me voltea tomando mi rostro mientras niego con la cabeza una y otra vez. - Sé que te duele, pero debes aceptarlo y seguir.

- ¡No! - Lo manoteo soltándome del agarre. - No quiero y no puedo... Solo necesito que me digas que él no murió.

Niega.

- No te voy a decir eso.

Suelto un sollozo.

- Entonces déjame en paz y vete. - Señaló la puerta.

Me voy a la cama haciéndome un ovillo en ella esperando a que se largue.

- Hoy a Esther la dan de alta en el hospital. - Lo escucho sin girarme. - Le haría bueno verte y a ti también.

No he visto a Esther, ni siquiera había preguntado por ella o por Mika, solo me he estado ahogando en mi dolor estas últimas semanas ignorando todo lo demás, y no es que ninguna no me interese, pero es que solo quiero hacer esto, tirarme en la cama y llorar.

- Acompáñame. - No me muevo. - Todos ya están allá.

Me quedo intacta, es una noticia buena el que ella esté bien, pero no puedo y no quiero salir de esta habitación.

- Ven conmigo...

- No quiero.

La nariz me pica y los ojos se me humedecen apretando la almohada con mis manos.

- Anggy tienes que salir de aquí, no puedes seguir así. - Aprieto los párpados buscando la forma de no escuchar lo que todo mundo me aconseja. - No lo conocía mucho, pero estoy seguro de que él no quisiera verte así.

No quiero escucharlo, no quiero oír lo que todo mundo me repite, solo quiero que alguien se siente a llorar conmigo y que entienda mi dolor.

- Ven, necesitas salir de aquí. - Vuelve a insistir y ya estoy cansada de esto.