Trampa Maldita (Suga - BTS)

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-¿Qué haces? - lo aleje.

-Hace mucho quiero hacer esto. - volvió a besarme - Te extraño.

-¿Qué pasa con Soo Hwan? Ella es tu novia ahora.

-Me está pasando con ella lo que tú me dijiste. Por su culpa estoy perdiendo mucho. - miró hacia la nada.

-¿Qué vas a hacer? - lo miré a los ojos.

-Hace unas horas me enteré que vamos a tener un bebé.

-¿De verdad? - una puñalada directa al corazón.

-Ella me expresó en la noche que se sentía mal, así que fuimos al hospital cuando salimos de la casa de mi madre esta mañana y ahí supe que estaba esperando un hijo.

-¡Te felicito!

-No me siento feliz por eso. - lo miré sorprendida - No puedo estar contento porque no es a ella a quien yo quiero.

-Que tarde abriste los ojos. - tomé sus manos - Ya es hora de que todo esto termine.

-No, no te vayas. - sus ojos se llenaron de lágrimas - Te amo, te amo demasiado. - acercó su rostro al mío y me dio un último beso.

-Me tengo que ir. - me di la vuelta y abandoné el lugar al subir a un taxi.

Dos meses más tarde estaba completamente sola en la empresa cuando llegó la invitación de la boda de Suga con Soo Hwan a mi oficina.

-¿Quién te dio esto? - le pregunté a mi secretaria, quién se había convertido en mi mejor amiga.

-La trajo la señora Soo Hwan.

-Era de esperarse. - lancé la invitación a la basura.

-¿No irá a la boda de su padre? - negué - Es su papá, supongo que va a querer verla ese día en primera fila.

-Hay cosas que no sabes, por eso no voy a ir. - sonreí mientras me ponía de pie - ¿El señor Park ya llegó?

-Sí, está en su oficina.

-Iré a verlo, por ahora imprime el inventario que te envié y luego archiva los recibos de compra.

Jimin había entrado a la empresa por mi petición, él sería pieza clave en mi crecimiento, ¿Quién mejor que él para acompañarme en ese gran camino?
Al principio la señora Min se negó a qué Jimin trabajara conmigo, decía que lo mejor era contratar a gente conocida, sin saber que yo conocía a Jimin mucho más que a Suga.

Varias días más tarde, comenzó mi segundo semestre en la universidad, ahora otros profesores me enseñaban, pero Jimin aún así estaba presente para ayudarme y aclarar todas mis dudas.
Este nuevo semestre era más fuerte, estudiaba más horas, pero no podía negar que me sentía bien, con mucho ánimo y ganas de ya terminar, quería estar de lleno en mi empresa, en mi trabajo, en mi mundo.

Un fin de semana antes de la boda, Yoon Gi llegó a mi nueva casa en Seúl, lo dejé pasar a mi sala y sin ofrecerle nada le pregunté el porqué estaba en mi casa.

-¿Sabes que ya me voy a casar? - asentí - ¿Vas a ir?

-No, no esperes verme allí. - bajé la cabeza.

-Sé que aún me amas y que todo esto te afecta mucho. - asentí - Pero esto fue lo que tú quisiste que sucediera. - lo miré asombrada, ¿En serio pensaba eso?

-¿Te has vuelto loco? Tú fuiste quién comenzó todo esto al acostarte con esa estúpida. - le di una bofetada - Te dije que te fueras con ella porque sabía que ibas a caer en su manos cuando ella se le antojara, no podía quedarme contigo sabiendo que eso sería así.
Además, si tantos problemas tienes con ella, ¿Por qué te quedaste con ella y le hiciste un hijo? Podías simplemente decirme que no ibas a estar con ella, pero no, te fuiste con ella y ya será la dueña y señora de tu vida. Ahora vete de mi casa y no regrese nunca más, ¡nunca!

Narra Suga

Estaba en casa viendo a la nada, mi mente estaba tan ocupada que ni siquiera podía notar que estaba mirando.
Soo Hwan llegó a la sala  y se sentó a mi lado, con los ojos rojos me miró y me dijo que tenía debíamos hablar sobre la boda, la cual sería en unos días.

-No me voy a casar. - dijo con la voz entrecortada.

-¿Por qué no?

-Sé que no me amas y que nunca seré feliz a tu lado, por eso no me casaré contigo. - las lágrimas salían de sus ojos sin control.

-Oye, te prometí casarme contigo y darte lo que necesites a ti y a nuestro hijo.

-Amas a ______. - en ese momento no supe qué decir, era cierto, la amaba, eso no era ningún secreto entre los tres.

-Sabes que sí, pero ella renunció a mí para que yo te haga feliz a ti, así que olvidemos todo esto que nos molesta y vamos a casarnos.

Narra _____

Era el día de la boda de Suga, también era mi primer viaje como empresaria a China. Antes de irme al aeropuerto, quería llevarle mi regalo a la ceremonia de bodas a Yoon Gi, no podía ser tan fría como para no dejar un regalito, ya que era parte de nuestra cultura.

Esa tarde me vestí de rojo, apagué las luces de la casa y me fui a la iglesia en dónde se llevaría a cabo la boda, allí me paré en la entrada de la iglesia y callada comencé a ver a todos dentro de la misma mientras el cura hablaba como de costumbre.
La pareja se dio el sí y luego el beso, fue en ese momento en el que se volteaban para salir de la iglesia cuando yo decidí entrar y darles mi regalo.

-Espero que les guste mi regalo de bodas. - les pase el sobre y son decir nada más caminé a la salida del lugar.

-_______, espera. - los pasos de Yoon Gi hacia mí cada vez estaban más cerca.

-Oye, vete con tu esposa. - lo empuje.

-¿Qué es esto? - se refería al sobre.

-Son las escrituras de la empresa y las cuentas de banco de la misma.

-¿Qué? ¿Que piensas hacer?

-Me voy del país por un tiempo, voy a terminar mis estudios allá y quizás hasta haga mi vida lejos de aquí.

-No puedes irte, ¿Qué pasa contigo?

-Yoon Gi... - tomé su rostro en mis manos - En la vida no tengo nada que sea mío, por eso me tengo que ir, buscaré lo que me pertenece y trataré de ser feliz. Todo lo que tenía no me pertenecía, ni la empresa, ni la casa ni tu amor, por eso te quedas aquí con todo esto. - besé sus labios con suavidad - ¡Hasta luego, Yoon Gi!

...