Trampa Maldita (Suga - BTS)

71

A media noche, Yoon Gi estaba dormido en el sofá y yo salía de la ducha. Callada me senté en el suelo y recosté mi cabeza sobre el sofá, la mano de Suga suavemente alcanzó mi cabello y comenzó a acariciarlo. 

-¿Estás despierto? 

-Sí, acabo de despertar por tus pasos. 

-Lo siento, no quería despertarte. - me levanté del suelo y me senté cerca de su cuerpo. 

-Hueles bien. - dijo Yoon Gi acercando su rostro a mi cuello - Es vainilla. 

-Sí es vainilla. - nuestros rostros se acercaron hasta que quedamos demasiado cerca y nos besamos. 

-Déjame oler mejor tu cuerpo, súbete sobre mí.

-Como digas, mi vida. 

Llegué a la fábrica muy temprano para recibir a los trabajadores en su primer día de trabajo, estaba adiestrada para poder ayudar a mis empleados, así que el día iba a ser muy largo para mis empleados, pero también para mí. En el proceso no estaba sola, un grupo de amigos que conocí en los adiestramientos me estuvo dando la mano por unas semanas, todo hasta que mis empleados y yo pudiéramos manejar solos la fábrica. 

La hora de almorzar llegó, enseguida dejé mi puesto y me fui a la oficina para descansar y de una vez revisar la correspondencia desde mi computadora. Al entrar a mi oficina, Jin estaba sentado en mi silla hablando por teléfono y con los pies sobre el escritorio. 

-Pensé que no ibas a venir a trabajar. - dije muy fuerte para que notara que yo estaba ahí. 

-Oh, lo siento, pero tengo que colgar. - colgó el teléfono y se puso de pie. 

-¿Por qué no fuiste a la fábrica? Todos están ahí recibiendo sus adiestramientos. 

-Oh, estaba aquí por si alguien llamaba para contratar tus servicios. 

-No tenías que estar aquí, desde la fábrica lo puedo ver todo. - le mostré mi tablet - Desde este momento vas a estar en la fábrica también, allí vas a llevar un conteo diario de los productos, también vas a manejar la página oficial de la empresa. 

-¿Nada más? - negué - Pero me dijiste que sería el gerente. 

-Tengo a alguien ideal para ese puesto. - era cierto, entre tantas solicitudes había una que tenía todo lo que necesitaba para ese puesto, aunque había solicitado para trabajar en producción. 

-Está bien, pero dime porque cambiaste de opinión de un día para otro. 

-Mi novio habló conmigo sobre ti, es muy pronto para que tengas ese puesto, que prácticamente te deja mi vida en tus manos. 

-Entiendo. - bajó la cabeza - Haré muy bien mi trabajo, lo prometo. 

-Eso espero. - apagué la computadora - Ahora vamos a trabajar. 

El primer día de trabajo terminó, antes de irme apagué todas las luces y me dirigí a cerrar las puertas, luego salí de la fábrica y tranquilamente me dirigí a la calle para tomar un taxi.

-¿Cómo te fue en tu primer día de trabajo?

-¡Jimin! - lo abracé - No pensé verte hoy.

-He estado ocupado, pero siempre tengo tiempo para ti.

-¡Gracias!

-Te llevaré a casa, tengo algo que hablar contigo.

-¿Sobre qué? - lo tomé de su brazo izquierdo.

-Me voy del país. - dijo viéndome a los ojos con tristeza.

-¿Por qué?

-Mi familia me acaba de regalar una empresa en el extranjero, no la puedo traer hacia acá por el momento porque es muy joven, así que debo irme y trabajar en ella hasta que Dios me permita regresar.