Trampa Maldita (Suga - BTS)

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Estaba en mi casa cuando Jimin llegó para saber qué tal había estado mi día en el restaurante, enseguida le ofrecí una cerveza y tranquilamente me senté a su lado para comenzar a contarle lo que había sucedido.
El restaurante debía manejarse por sí solo, tenía que dejar a alguien de confianza en el mientras yo me iba a levantar mi propia marca de alimentos, así que le pedí a Jimin que me ayudara a encontrar esa persona.

La conversación cambió de tono cuando le mencioné a Yoon Gi a Jimin, este se puso muy tenso y se acercó más para saber que había hablando con Suga. No fui muy específica, le conté algunas cosas, entre ellas la ayuda que Yoon Gi me iba a dar para obtener mi negocio.

-¿Qué te va a pedir a cambio por eso?

-Nada, estaría devolviendo el favor que le hice.

-_____, no seas tonta, estamos hablando que una fábrica para realizar alimentos vale muchísimo con toda la maquinaria, ni hablar también de las oficinas, las cuales son importantes. Yo tú habló con él y le dejo muy claras las cosas.

-No te preocupes, Yoon Gi no sería capaz de engañarme con algo que es mío.

-Te engaño con tu cuerpo, lo usó y luego te dejó en embarazo y sin hogar y ni hablar que negó a tu hijo, quién también era de él. ______, piensa bien las cosas antes de relacionarte con ese hombre. - Jimin tomó sus llaves y salió molesto de mi casa.

Era hora del desayuno en el restaurante, normalmente los clientes llegaban a mediodía, pero esa mañana estaba muy activa ese día.
Los clientes llegaban y dejaban sus pedidos, luego iba a sus meses y comenzaban a ver hacia la calle, eso me dio una idea para mí restaurante, la cual comenzaría ese mismo momento.

-Tengo que salir, si hay mucha gente no dudes en llamarme. - tomé mi bolso y salí del restaurante.

-¡_____! - ahí estaba Yoon Gi de nuevo, esta vez vestido casual y con sus gafas de sol.

-¿Qué haces por aquí?

-Quería llevarte a un lugar, pero veo que vas de salida.

-Bueno, iba a buscar unos peces para las mesas, pero lo puedo dejar para luego y así ir contigo.

-Bueno, vamos. - Yoon Gi tomó mi mano y me llevó con él hasta su auto.

Narrador omnisciente

Yoon Gi había estado buscando lugares ideales para que ______ pudiera abrir su propia marca de alimentos, entre tantos lugares, dio con una pequeña fábrica el la ciudad, la cual había cerrado por la misteriosa muerte de su dueño años antes.

-Quiero que veas este lugar y me digas si lo deseas para tu negocio.

-Es muy grande. - _____ lo veía con asombro.

-Es pequeña para lo que tú tienes en tu mente.

-Quizás tengas razón. - _____ entró al lugar, en su interior no había nada, así que comenzó a imaginar cómo podían ir sus cosas ahí.

-Afuera hay espacio para las oficinas, podríamos construirlas y tenerlas listas cuando la fábrica también esté lista para comenzar sus operaciones.

-Bueno, primero lo primero, ¿Que me vas a pedir a cambio por todo esto?

-Te dije que nada, te estoy devolviendo un favor.

-¿Estás seguro? - Yoon Gi asintió - Bueno, pues sí quiero este lugar.

-¡Qué bueno! - sonrió - Me voy a encargar del papeleo, nos vemos en la compra final para que firmes y este lugar quedé a tu nombre.

-¡Gracias!

_____ estaba muy feliz, sus planes a largo plazo estaban más cerca de lo que ella imaginaba, pero no se imaginaba que cumplir sus sueños le traería problemas a su vida nuevamente. 

Yoon Gi llegá a su casa y se sentó en su despacho tranquilamente para llamar al banco que tenía la fábrica en su poder, al terminar la llamada, Soo Hwan entró al despacho de Suga y molesta comenzó a reclamar por su llamada, la cual había estado escuchando desde afuera de la puerta.  

-¿Por qué vas a comprar esa fábrica? Tienes una empresa por qué quieres ese lugar vacío.

-¿Desde cuándo te he dado riendas para que te metas en mi vida? - Suga la empujo - El que me haya casado contigo no significa que te meterás en mis cosas. 

-Somos esposos, debemos tomar decisiones juntos. 

-Sí, las decisiones de Yoon Tae, nada más. 

-Soy tu esposa y la mitad de todo lo que tienes es mía. 

-Es hora de que sepas las cosas como son. - Yoon Gi sacó unos papeles de su escritorio - La empresa aún está a nombre de ______, ¿Lo sabías?

-No. - dijo Soo muy nerviosa. 

-Sí, así que no hay nada que puedas manejar. La casa es mía y el dinero de mi cuenta también, todo eso lo recibí antes de casarme contigo, no soy tan tonto como tú crees que soy, así que ya no te metas en mis planes y vete a hacer lo que debe importar, nuestro hijo. 

-Yo sé que mientes, la empresa es nuestra. 

-No, no miento. - Suga se alejó de ella. 

-¿Por qué compraste esa fábrica? 

-Es para _____, ¿Contenta? 

...