Narrador omnisciente:
-En un parque soleado, dos hermanos de 15 años estaban sentados en un banco de madera, disfrutando de sus helados. La tranquilidad del lugar parecía contrastar con la tensión que había entre ellos:
(Algo así, imaginen que son Emma y Tom).
Emma: Mmm...esto está realmente delicioso-Mencionó, saboreando su helado con una sonrisa genuina. Su rostro, normalmente preocupado, mostraba un destello de alegría.
Tom: Estoy de acuerdo, pequeña-Respondió con una sonrisa cálida-Es bueno verte sonreír de nuevo. Últimamente, has estado tan...distante-Comentó lo más disimulado posible.
Emma: ¿Eh? ¿A qué te refieres?-Preguntó, frunciendo el ceño mientras miraba a su hermano con curiosidad.
Tom: Quiero decir que has estado muy callada y pensativa. Mamá y papá te han dado tu espacio, pero están preocupados. Y Andy también lo está-Explicó con una mezcla de preocupación y ternura.
Emma: Oh, no quería preocupar a nadie. No me di cuenta de que me estaba alejando. Lo siento mucho-Dijo, bajando la vista con arrepentimiento.
Tom: No tienes que disculparte pequeña princesa-Respondió, apretando suavemente la mano de su hermana-Pero quiero saber qué es lo que te preocupa para poder ayudarte. ¿Sabes que siempre puedes contar conmigo?-Le recordó con dulzura.
Emma: Es que...esto es algo que tengo que resolver por mi cuenta. Es mi problema-Contestó, evitando el contacto visual mientras jugueteaba con el helado.
Tom: Hermanita, tú puedes decirme cualquier cosa. Siempre voy a estar aquí para ti, pase lo que pase. ¿Recuerdas lo que nos decían mamá y papá?-Dijo con cariño, inclinándose hacia ella.
Emma: ¿Qué cosa?-Preguntó, aún sin mirar a su hermano, pero con un atisbo de curiosidad en su voz.
Tom: "Está bien pedir ayuda. No siempre tienes que luchar sola. No siempre tienes que ser fuerte. A veces, hay que bajar nuestras defensas para poder sentirnos humanos"-Recitó, tratando de recordar las palabras exactas que sus padres solían decirles-Siempre estaré aquí para sostenerte-Le aseguró.
-Emma, al escuchar esas palabras que le eran familiares, comenzó a reflexionar. La mirada de duda en sus ojos hizo que Tom decidiera apelar a una de sus reglas más preciadas:
Tom: Recuerda nuestras reglas, Regla #1 de los hermanos Misaki Torres: Nos cuidamos mutuamente. Y la Regla #15: Nos contamos todo, incluso las cosas vergonzosas. Eso es lo que hacemos-Dijo, levantándose ligeramente del abrazo para mirarla a los ojos.
Emma: Tomy...lo que pasa es que...-Murmuró, con lágrimas asomando en sus ojos.
Tom: ¿Quién te ha lastimado?-Preguntó, sintiendo una oleada de preocupación mientras observaba el dolor en el rostro de su hermana.
Emma: Hace unos meses, unas chicas en mi salón empezaron a molestarme. Sé que no debería importarme lo que dicen, pero es difícil ignorarlo cuando es constante. Dicen cosas muy feas sobre mí que no son verdad y me critican. Eso me enoja y me entristece. No me dejan en paz. Y además, hay chicos que...me molestan. Insisten en salir conmigo, aunque ya les he dicho que no. Tomy, estoy agotada...-No pudo terminar debido a un nudo que se le formó en la garganta
-Tom no dudó en rodear a Emma con sus brazos, envolviéndola en un abrazo protector. Sentía una mezcla de tristeza y determinación mientras consolaba a su hermana:
Tom: Oh, pequeña pequeña princesa. No tienes que hacerles caso. Recuerda que no es tu culpa ser diferente ni ver el mundo de una manera distinta. Ellos no definen quién eres-Dijo suavemente mientras la abrazaba.
Emma: Tienes razón, Tomy. Gracias. Siempre recordaré tus palabras-Agradeció, su voz más tranquila mientras el abrazo la reconfortaba.
Tom: No hay de qué. Eres mi hermana, y siempre estaré aquí para ti. Además, eres una mini copia de mamá, y eso significa que eres especial. ¿Sabes lo que eso implica?-Cuestionó con una sonrisa amorosa.
Emma: ¿Qué implica?-Preguntó, mostrando curiosidad a pesar de su estado emocional.
Tom: Significa que también eres especial a tu manera-Respondió con una sonrisa alentadora-Ahora, ¿Esos chicos te hicieron algo más allá de palabras?-Interrogó con seriedad en su voz.
Emma: No, no ha pasado nada más grave. Pero por favor, no le digas nada a papá ni mamá, y tampoco a los chicos. No quiero que se pongan más preocupados o que ellos se interpongan-Pidió con una expresión suplicante.
Tom: Emma esto es serio. Esos ojitos no van a resolver el problema-Dijo con un tono de seriedad, pero pronto su expresión se suavizó-Está bien, pero prométeme que me contarás si algo más pasa, ¿De acuerdo? Y no te alejarás de nosotros nuevamente-Negocio con seriedad en cada una de sus palabras.
Emma: Está bien, Tomy. Te lo prometo-Contestó con sinceridad, una sonrisa genuina iluminando su rostro mientras lo abrazaba nuevamente.
Tom: Me alegra ver que vuelves a ser la hermana que conozco. No dejes que nadie apague tu sonrisa-Pidió con una sonrisa cálida.
Emma: Te lo prometo, no lo permitiré. Eres el mejor hermano que podría tener-Respondió mientras lo abrazaba con cariño.
Tom: Lo sé, pero es bueno que lo reconozcas-Dijo, guiñándole un ojo-Aunque, me alegra que me lo hayas contado. De no ser así, tendría que seguirte a todos lados y jugar al hermano mayor sobreprotector-Bromeó, aunque sabía que podría hacerlo si fuera necesario.
Emma: Jajajaja, no lo harías-Rió, divertida por la broma de su hermano.
Tom: No negaré ni afirmaré nada-Dijo con una sonrisa traviesa.
Emma: Oh, eres malo-Acusó, con un puchero en los labios.
Tom: Si soy tan malo, te dejaré aquí sola y me iré-Dijo con una expresión juguetona, levantándose rápidamente y comenzando a correr.
Emma: ¡Tom Misaki Torres, no me dejes aquí!-Exclamó entre risas mientras lo perseguía.
Tom: ¡Atrápame si puedes, pequeña!-Gritó mientras seguía corriendo, mirando hacia atrás con una sonrisa.
-Ver a su hermana reír de nuevo, después de semanas de tristeza, hizo que Tom se sintiera aliviado. Aunque disfrutaba el momento, sabía que debía estar atento a cualquier problema futuro:
Tom: ¡Te estás quedando atrás, apúrate, pequeña princesa!-Exclamó divertido.
Emma: ¡Espérame!-Respondió, acelerando el paso para alcanzarlo.
-Así fue como las reglas de los hermanos Misaki Torres ayudaron a fortalecer su vínculo, demostrando que, a pesar de las dificultades, su hermandad era fuerte y sólida.
Voten y comenten.
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One shot de Capitán Tsubasa.
Non-Fiction-Diferentes historias de los ships de Super Campeones/Capitán Tsubasa sin orden cronológico, pero algunos sí van a tener relación con mis historias "¿Lograremos que se den cuenta?" y "Eres única" y con One-shots de mí primer libro. Aclaraciones: Los...