Narra Jito:
-Siempre que terminaba mis entrenamientos de fútbol volvía a mi casa por el mismo camino. Sin embargo, a la mitad del camino me encontraba con un niño con el cabello largo y tenía un flequillo que le cubría los ojos así que nunca puedo saber de qué color son y todos los días me quedaba a jugar con él a la pelota un rato.
Me daba curiosidad y pena ya que parecía un niño no más de 12 años y siempre andaba solo, así que, luego de pensarlo un poco decidí preguntarle si tenia familia y si su respuesta era no, lo invitaría a vivir conmigo ya que mi departamento es muy grande y algo solitario.
Ya llegué a la mitad del camino y como todo los días Sano se encontraba sentado allí en unas escaleras esperándome, así que no dude en acercarme:Fin de la narración de Jito.
Narrador omnisciente:
-Una vez que Jito estuvo cerca de las escaleras no dudo en saludar a su pequeño amigo:
Jito: Hola Sano, ¿Cómo estás?-Saludó con una sonrisa.
Sano: Hola Jito, estoy bien ¿Y tú?-Respondió mientras se levantaba de donde estaba sentado.
Jito: Me alegro oír eso y yo también estoy bien, ¿Estás listo para jugar un poco?-Preguntó mostrándole el balón de fútbol.
Sano: Lo mismo digo, y sí que estoy listo. Juguemos-Contestó emocionado.
-Dicho esto, ambos amigos comenzaron a jugar entre ellos con el balón de fútbol y sin darse cuenta el tiempo pasó volando.
Cuando Jito se dio cuenta que estaba anocheciendo, se detuvo:Jito: Oye Sano, creo que se hizo muy tarde-Comentó.
Sano: Oh, tienes razón ni cuenta me había dado cuando oscureció-Sera mejor que te vayas ya a tu casa Jito-Aconsejó con tranquilidad.
Jito: Sí, pero antes quería hacerte una pregunta ¿Tú tienes familia o un lugar a donde ir?-Cuestionó, llevaba días teniendo esa duda rodando por su cabeza.
-Al oír aquella pregunta, Sano bajo un poco la cabeza y con algo de vacilación, respondió:
Sano: La verdad...es que no tengo familia ni tampoco un lugar en específico para ir-Confesó luego de unos minutos en silencio.
-Al escuchar su respuesta, Jito no pudo evitar sentirse mal por su amigo, él era un buen niño, había cosas que no sabía hacer pero era un niño muy alegre y se reprendió mentalmente por no haberle preguntado antes:
Jito: En ese caso, si quieres puedes venir a vivir conmigo en mi departamento-Ofreció con una sonrisa.
Sano: ¿¡En serio!?-Exclamó sorprendido y con una sonrisa.
Jito: Claro que es en serio, entonces que dices ¿Aceptas?-Respondió.
Sano: Claro que sí, será divertido vivir contigo-Aceptó encantado.
ESTÁS LEYENDO
One shot de Capitán Tsubasa.
Non-Fiction-Diferentes historias de los ships de Super Campeones/Capitán Tsubasa sin orden cronológico, pero algunos sí van a tener relación con mis historias "¿Lograremos que se den cuenta?" y "Eres única" y con One-shots de mí primer libro. Aclaraciones: Los...