Seungmin es un patinador artístico , famoso, majestuoso, delicado como la nieve, pero tan frío como el hielo, tan capaz de cortar con una sola palabra.
Christopher es un corredor de autos de carrera luchando por su sueño de ser el mejor. Ambos pasan...
Chris jamás me habría forzado a decirle mis sentimientos, él los entendía, este...
Este no es mi Chris...
—¿Y qué habría hecho Tú Chris?. —Se nota lo confundido que está, necesita respuestas, respuestas que solo lo lastimarán.
Él no necesita saberlo...
—Responde Seungmin.
—No. —Le doy una sonrisa forzada, la más dolorosa hasta ahora. — Debes entender que hay cosas que es preferible que no sepas, tú no me necesitas, no necesitas tener un recuerdo de mi, ahora eres una nueva persona y me estás conociendo una vez más, ¿Eso no es suficiente?.
—Pero tú...
—Es esto lo que quería evitar. —Mi corazón duele, duele tanto que debo llevar una mano a mi pecho tras eso. — No quiero que te sientas forzado a recordarme, no puedes controlarlo todo, Chris.
—Pero yo...
—Es suficiente, ¿si?, tú estas bien, yo estoy bien, eso es... eso es lo importante.
Hay un largo silencio, él asiente sin decir ni una sola palabra. Tengo las palabras atrapadas en mi garganta, anhelan salir, duelen y me lastiman, pero no necesito ser escuchado, no cuando sé que no obtendré respuesta.
Así que hago lo que habría hecho tiempo atrás, pongo una de sus manos en mi pecho, regalándole mi mejor sonrisa. Él no parece entenderlo, solo frunce el ceño ante en palpitar de mi corazón.
—Va muy rápido... —Murmura.
Se queda unos segundos así, mirando con atención su mano mientras mi corazón amenaza con salirse de mi cuerpo. Respira con dificultad y se aparta casi al instante.
Entiendo...
—Me voy. —Dice rápido, mira alrededor, como si estuviera buscando la salida más rápida. La forma más rápida de alejarse de mi.
Te lo dije...
... ibas a asustarte...
Me tragué mis palabras, hablé de otra forma pero no pudo entenderlo. No es mi Chris, no conozco a este chico y él no me conoce a mí. Una parte en mi interior duele, duele porque siento que he perdido algo demasiado valioso en mi vida.
Pero me siento bien, bien de saber que dejará de buscar respuestas, luego de esto seguramente se aleje de mi y es algo que agradecería.
Ni él merece vivir confundido y con miles de preguntas, ni yo merezco tener que estar atado a... su corazón, porque al fin y al cabo...
... Mi corazón aún está destrozado...
Y solo yo puedo juntar los pedazos rotos.
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