Capítulo 10

33 6 8
                                    

África

Me siento una pringada en este momento, ¿Cómo pudo una persona ser tan falsa conmigo? Solo con pensarlo, me entran ganas de llorar. Pero entonces recuerdo lo que me ha dicho Mateo, Akila no puede cargarse el viaje de mis sueños. Así que simplemente la ignoro—o eso intento— Y tan solo pienso en el viaje. Yo en este momento estoy siguiendo a Mateo, que se dirige en la busca de nuestro grupo. Algo que me deja pensativa fue lo que él ha dicho <Aunque no lo creas. Yo he sentido lo mismo que sientes en este momento, el sentimiento de la traición, cuando una persona muy querida te traiciona, te entiendo muy bien ¿No es eso lo que sientes? > No sé porque, pero cada vez que me acuerdo de esas palabras, me viene a la cabeza, lo que Akila me dijo. "La pelea", esas dos palabras por algún motivo me dieron por pensar que la traición que él vivió tuviera relación con la pelea que tuvo. Dejo de pensar cuando Mateo se para.

—¿Qué pasa?—Le pregunto. Él se gira;

—Allí está nuestro grupo—Dice él, señalado con un dedo hacia atrás. Yo paso por su lado y allí veo a nuestro grupo. Toda la gente que hay no la conozco por nada. Excepto Mateo, que por ahora me esta cayendo bien. Se encuentran todos, pero no sé por cuál razón, no siento lo mismo que la última vez. Quiero decir, la vez que nos unieron como grupo y nos presentamos uno a uno, pensé que este grupo iba a ser un desastre. Pero ahora siento todo lo contrario. Creo que tal vez, este grupo pueda funcionar. No ahora está claro, ya que hay varios, o mejor dicho todos los integrantes los desconozco del todos, pero viéndoles cara a cara no parecen malas personas. Y con las presentaciones de la última vez, me he hecho una idea de como son o podrían serlo.

—¿Dónde estabais, os hemos buscado por casi todo el gimnasio?—Pregunta un chico, que si mal no recuerdo su nombre era Max. Yo me quedo bloqueada, ¿Qué se supone que les iba a decir? ¿Qué he estado llorando por casi media hora porque mi supuesta mejor amiga ha sido falsa conmigo desde que teníamos 5 años, y ahora se ha juntado con mi peor enemiga? No, está claro que eso no. Voy a decir algo sin pensar, pero Mateo se me adelanta;

—Me sentía mal entre tanta multitud, me estaba estresando y por eso fui al patio a tomar un poco de aire fresco—Él lo dice de tal manera que casi parece verdad.

—Ah, era eso....¿Pero qué hacía África contigo? Además, ahora que me fijo, ¿Estás bien África? Tienes los ojos muy rojos, casi parece que has estado llorando—Respondió Max, con el ceño fruncido. Yo me pongo nerviosa, no sé como responder a eso.

—Ella me acompaño, ya que era mejor que estuviera conmigo a que nos separáramos entre tanta multitud. Y sobre los ojos rojos, la pobre casi no durmió por la noche pensando en le viajé—Yo alucino, él me esta ayudando.

—¿Y como sabes eso?—Max es muy pesado, eso esta claro.

—Porque me lo ha dicho, y ya basta de preguntas.

En este momento me doy cuenta de que él no es como dice la gente. Que tuviera una pelea y donde hubo heridos no describe para nada que él es una mala persona. Seguramente hay una historia detrás de esa pelea, yo por algún motivo quiero saber lo que pasó. También hay algo que me deja un poco intranquila y es la forma de mirar a Mateo de mis nuevos compañeros, es cierto de que Max y Ryan son los únicos que no le miran mal, pero el resto sí.

—Bueno, equipo por ahora tendremos que esperar aquí, los profesores ya nos avisaran cuando tengamos que subir al autobús—Nos informa Ryan.
—Vale, vale, pero basta de formalidad Mr. Baker—Comienza a bromear Max— I no digas "equipo", que parece que vayamos a jugar un partido futbol—Ryan pone los ojos en blanco. Y creo escuchar como esa chica Ada esconde su risa.

Todos nosotros esperamos a que venga algún profesor para avisarnos. Veo como Ada comienza a hablar con Daisy, aunque se nota mucho que ella esta nerviosa. Ryan, Max y Axel están hablando juntos. Y esa tal Jade esta con el móvil. Yo solo los observo, y todavía no puedo parar de pensar en Akila.

—Si no te encuentras bien, o quieres ir otra vez a fuera avísame y te acompaño, si no quieres decir lo que te pasa al resto del grupo—Dice Mateo que se encuentra a mi lado. Él esta siendo muy amable.

—Muchas gracias de veras. Por ahora estoy bien. Y respecto a lo del grupo, no les quiero contar, ten en cuenta que por ahora son unos desconocidos. Y no puedo confiar en ellos.

—Puede que tengas razón pero yo también soy un desconocido y aun así me lo has contado.

—Es verdad que eres un desconocido, pero el espectáculo de la traición fue delante de ti, en primera fila lo estabas viendo, y además por algún motivo me dio por contártelo, es como si fueras una persona en la cual pueda confiar.

—Me siento dios al saber que alguien quiere confiar en mí—Él lo dice sonriendo, pero se nota un poco triste, yo ignoro esa expresión y le sonrío.

Voy a preguntarle lo que me quería decir, cuando Akila nos interrumpió dos veces. Pero, detrás de su hombro, las veo. Veo a Akila junto a Nancy, se están sacando fotos, a continuación, Nancy me mira y le dice algo a Akila en la oreja mirándome, ella se gira, me mira y comienza a reír. De nuevo me sentimiento una pringada. No reconozco a Akila. Aparto mi mirada, bajo la cabeza. No puedo llorar aquí, me estoy aguantando tanto que en algún momento voy a estallar. 

Estamos SolosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora