Capítulo 14

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Estaba muy entretenida mirando algunos videos que las cncowners les dedicaban a los chicos, la verdad es que esas mujeres hacían arte con cada cosa que CNCO subía, y aunque iba a costarme un poco tomar su ritmo, tendría que lograrlo, se supone que soy tan fan como ellas.
Cuando alguien tocó mi hombro levanté la vista y los chicos ya estaban adentro.

- ¿Terminaron? - Fue lo primero que pregunté cuando los ví.

Los cuatro tenían las mejillas llenas de lipstick de todos colores, sus rostros no mostraban mas que felicidad por ello.

- Por hoy sí, creo que es todo, debo decirte que bombardearon a tu novio con preguntas acerca de quién eras tú - Mencionó Erick.
- ¿Ah sí? ¿Y qué respondió? - Inquirí.
- Que después les contaría todo lo que quisieran saber de ti y quién eres y representas en su vida - Respondió Richard.
- ¿Entonces aún no lo saben? - Le pregunté a Christopher.
- Aún no, pero pronto - Aseguró.
- Genial - Mencioné simple.

¿Qué más podía decir? Era algo que pasaría.

- Vamos arriba chicos, ___ y Christopher tienen mucho de que hablar - Comentó Clara.

(...)

Una vez que Christopher se retiró todos esos lipstick de colores en sus mejillas, ambos nos sentamos en su cama para poder hablar, estábamos completamente solos en su habitación.

- Estaremos un año juntos, se supone que ante todo el mundo llevamos ya medio año como novios, y delante de mis padres tendrás que fingir que ganarte mi corazón fue muy difícil - Comencé por decile captando su atención.
- ¿Me dirás qué es eso tan profundo sobre ti? -.

Yo asentí levemente.

- Christopher, no me andaré con rodeos, solo promete que esto no saldrá de aquí, sé que no somos amigos ni mucho menos, pero debo confiar ésto en ti porque se supone que ahora eres mi novio - Dije mirándolo fijamente a los ojos.
- Tranquila, te prometo que nada de lo que me cuentes saldrá de aquí, será algo que solo sabremos tú y yo - Me aseguró.
- De acuerdo -.

Tomé aire y lo dejé salir en un suspiro para comenzar a hablar.

- Cuando yo tenía diecisiete años conocí a un chico, Alexander, para ser precisa -.

De nuevo traía conmigo aquellos recuerdos.

- Entre nosotros surgió una amistad inigualable, puedo jurarte que creí que ese lazo de amistad jamás se rompería porque realmente nos queríamos y nos apoyabamos de una forma incondicional el uno al otro -.

Mi mirada ahora estaba perdida en la nada.

- Sin esperarlo un día me confesó que estaba enamorado de mí, la verdad es que yo nunca imaginé que eso pasaría, temía mucho perder su amistad, pero aún así decidí que no valía la pena quedarme con las ganas de intentar algo con él, al principio le dije que no seríamos algo oficialmente, solo intentaríamos tratarnos distinto, ya no solo como amigos, sino como dos personas que se gustan pero aún no están listas para ser novios, pero cuando me dí cuenta de que también me había enamorado de él, entonces aquel paso se dio entre nosotros, y en su momento yo era la persona más feliz, te juro que era la más feliz -.

Odiaba tanto remover mi pasado, se suponía que no habría próxima persona, al menos no en un buen tiempo, se suponía que podía guardar esto para mí un poco más.

- Desde ese momento hasta que cumplimos veinte años fuimos novios, y te puedo asegurar que todo el mundo se daba cuenta de que había amor, un amor real y puro que terminó de la peor forma - Mencioné sin atreverme a mirarlo a los ojos, los míos comenzaban a picarme - Por la universidad a veces vernos era lo más complicado, pero él le pidió mi mano a mis padres y luego de una semana me pidió matrimonio de la forma más bonita, mientras volabamos en globo y un montón de fuegos artificiales adornaban el cielo, él me prometió amor eterno mientras me ponía un anillo de compromiso -.

Si antes odiaba las lágrimas, ahora mucho más.

- Entre los planes decidimos que la boda se llevaría a cabo luego de cinco meses para que todo saliera perfecto, éramos jóvenes, claro que lo sabíamos, pero juro que yo sentía que había amor, yo estaba segura de que lo había - Comenté tratando de aferrarme de nuevo a esa idea - Todo iba de maravilla Christopher, el vestido, el salón, la comida, absolutamente todo, incluso habíamos visto que casa compraríamos -.

Reí sin gracia.

- Faltaba tan solo una semana para un momento que yo creí inolvidable, una semana nada más, Alexander me había dicho que debido a la universidad saldría tres días de viaje cerca de aquí, pero que nada iba a interferir con la boda y yo le creí, tontamente le creí -.

Con la yema de mis dedos retire las lágrimas, aunque salían nuevas.

- Al segundo día de haberse ido su mamá me llamó y me dijo que necesitaba vernos porque debíamos confirmar los arreglos de flores, me pidió que le comentara a Alexander, él le había dicho que estaría conmigo estos tres días que se suponía que estaría de viaje por la universidad, obviamente me preocupe demasiado y le dije lo que yo sabía, lo llamamos incontables veces pero nada, no sabíamos nada -.

Tragué saliva amargamente.

- Dimos aviso a la policía y comenzaron a buscarlo, y un día antes de la boda nos avisaron que estaba muerto - Solté sin más.
- ¿Cómo? - Preguntó sin poder creerlo, y por primera vez me atreví a mirarlo.
- La policía dijo que encontró su auto a las afueras de la ciudad, dijo que ahí estaban sus pertenencias, y cuando pedimos el cuerpo nos dijeron que solo quedaban cenizas pues el auto se había incendiado, con suerte lo habían encontrado -.

Christopher agachó la mirada.

- Un día antes de casarnos me dieron aquella noticia, un día antes de un momento que sería sumamente feliz para mí me destrozaron la vida, y lloré Christopher, lloré como nunca, no podía resignarme, no podía con la idea de que lo había perdido, en ese momento sentí que la vida se me iba con él, sentí que ya nada tenía sentido - Le conté.

|Dos extraños| Christopher Vélez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora