Capítulo 39

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Ese es el problema, que a mí también me gusta estar cerca de él.

- Ni siquiera yo sé que fue lo que pasó, quizá tenía que pasar por algo - Dije sincera.
- ¿Eso quiere decir qué no te gustaba platicar conmigo? - Inquirió.
- No, no, me encantaba hacer todo lo que hacíamos juntos, eres increíble Zab, pero ahora estás con Olga y -.
- Y tú y yo somos amigos, nos conocimos primero y el cariño que siento por ti jamás cambiará - Me interrumpió.

Claro, amigos, otro problema.

- Mi cariño hacia ti tampoco Zab, eso no lo dudes - Aseguré.
- ¿Por qué no retomamos nuestra amistad? Hay que salir, platicar, justo como antes, te extraño - Dijo.

Yo sonreí a medias, por supuesto que quiero estar con él, pero no de esta forma.

- Me parece bien, también te extraño - Acepte.
- Perfecto, entonces, ¿Mañana nos vemos en tu departamento para salir a correr juntos? - Preguntó.
- Muy bien, ahí nos vemos - Dije feliz, aunque por dentro algo no me dejaba tranquila.

(...)

Cuando los chicos terminaron era bastante tarde, así que ya era hora de irnos, por supuesto yo me iría con Chris.
Nos despedimos de todos y al final Zabdiel, Christopher y yo éramos los últimos en salir.

- ¿Estás bien? Te noto rara - Preguntó Christopher mirándome a los ojos.
- ¿Rara cómo? Estoy bien Chris - Respondí.
- No lo sé, te siento triste -.

Quizá sí lo estaba un poco, o bastante.

- No, para nada, solo que tengo un poco de sueño, ayer no dormí muy bien - Por una parte no decía mentiras del todo.
- De acuerdo, vámonos entonces para que puedas descansar -.
- Claro -.

Terminamos de recoger nuestras cosas y sin más salimos del estudio, claro, no sin antes darle una última mirada a Zabdiel.

Christopher's POV.
Algo tiene y no quiere decirme, la ví hablando con Zabdiel, no sabía si tenía que preocuparme o no, ¿Qué pudo haberle dicho que la dejó pensando?

- ¿Puedo hacerte una pregunta? - Me dijo llamando mi atención.

La miré de reojo ya que voy conduciendo.

- Claro, dime -.
- ¿Qué te hizo saber que Abigail te gusta? ¿Cómo lo aceptaste y cómo sobre llevas el hecho de que no pueden estar juntos? - Cuestionó.

Vaya, ahora sí que me hizo pensar.

- Bueno, físicamente me atrajo mucho, y cuando conocí su forma de ser me quedó claro que todo iba más allá de solo un pasatiempo, pensé mucho y llegué a la conclusión de que negarme a aceptar que me gustaba solo me hacía pensar más en ella, así que lo deje salir - Respondí honesto - Creo que si puedo sobre llevarlo es porque realmente ella no es el amor de mi vida o la mujer que en verdad quiero a mi lado, porque de lo contrario nada más me habría importado y habría luchado por ella a pesar de lo que la gente pueda decir - Admití.
- ¿Entonces solo estabas confundido? - Preguntó.
- Así es, es muy bonita físicamente, y aunque su forma de ser también me cautivo, creo que no fue suficiente para que yo pueda decirte que estoy enamorado o algo así - Confesé.
- ¿Y cómo sabes cuándo es amor de verdad? -.
- Cuando nada más te importa que hacer hasta lo imposible por estar con esa persona, por verla feliz aunque no pueda ser contigo, cuando sientes que no puedes ni siquiera respirar porque esa persona te hace falta, hasta entonces supongo que solo es una atracción lo que puedes sentir - Dije.

Ella se quedó callada mirando sus piernas.

- Bueno, ahora creo que concuerda porque puedo vivir sin Alexander - Mencionó.
- Lo quisiste en su momento, y así como surge el amor, también se termina - Aseguré.
- Solo me pregunto una cosa -.
- ¿Cuál? - Inquirí.
- ¿Cuándo y cómo podré identificar que amo a alguien? Es que, no es que tenga prisa, pero me aterra que al final mis miedos jamás me abandonen - Se sincero.
- Yo estoy seguro de que en algún punto va a llegar esa persona que te haga sentir que no hay miedo alguno que te impida ser feliz con alguien, eres muy joven aún, además de una mujer increíble y muy especial que cautiva a quien te mira, así que no te preocupes, porque cuando te enamores esta vez no va a lastimarte nada - Afirmé.

De pronto sentí que ella dejó un dulce beso en mi mejilla.

- Gracias Chris, por escucharme y por siempre tener que decirme - Dijo.
- Siempre voy a estar para ti, no lo dudes - Dije tomando su mano y dejando una caricia en ella.

Vaya que su beso me dejó impactado pero sinceramente muy feliz, sus muestras de cariño me dicen que esa tensión que alguna vez existió entre nosotros ya no está más y jamás volverá.

|Al día siguiente|

___'s POV.
Mi respiración estaba tan acelerada, las piernas ya me dolían, Zabdiel me estaba haciendo reír demasiado, y el hecho de que tenía que recuperar aire para seguir corriendo, no me ayudaba mucho.

- Mueve esas piernas princesita, tienes que alcanzarme - Dijo divertido.
- Me estoy muriendo - Mencioné con dificultad.
- Claro que no, aún resistes un poco más, anda, no te rindas, ¿Acaso no temes que sea mejor que tú? -.
- No debiste decir eso -.

De no sé que lugar saque fuerzas para poder correr al paso de Zab y adelantarlo un poco.

- Perfecto, ahora yo persigo a la bella doncella - Se quejó.

Definitivamente no me arrepiento de haber aceptado ésto de nuevo.

(...)

- Mañana no podrás moverte - Dijo riendo.
- No me lo recuerdes, mañana vendrá a comer la mamá de Chris y tengo que arreglar mi departamento - Dije.
- ¿Comerán en tu departamento? - Preguntó.
- Así es, quiero darle una buena impresión a mi suegra - Dije divertida, aunque es la verdad.
- Yenny ya te quiere, un departamento sucio quiza la asusté pero no dejará de quererte - Se burló.
- Creerá que aún no estoy lista para casarme con Chris, y me niego, ya tengo el vestido elegido -.
- Vaya, unos meses y ya se quieren casar -.
- ¿Qué te digo? El amor -.

Ambos reímos, íbamos en el elevador para llegar a mi departamento.

- No me voy a poder levantar, ahora serás tú quien me ayude a qué todo quede listo - Advertí.
- Solo porque me caes bien lo haré - Aceptó.
- Yo sé Zab - Dije con una sonrisa.

|Dos extraños| Christopher Vélez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora