Capítulo 22

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- Ay Dios mío, me voy a romper una pierna seguro - Dijo ___ saliendo de mi habitación completamente peinada y maquillada.

Llevaba puesto un vestido corto de dos piezas color negro, claro que se veía hermosa, eso jamás iba a negarlo.
En ese momento se me ocurrió una idea, así que saque mi celular y le tome algunas fotos y videos mientras nos enseñaba el vestido y sus altos zapatos de tacón, su sonrisa estaba de oreja a oreja por los halagos que le hacían los chicos, aproveche aquello y subí algunas de esas fotos y videos a mis historias en instagram con frases como 'te amo' o 'la mujer más hermosa'.

- Seguro seré la envidia en la party con semejante belleza - Aseguré tomando su mano.
- Mejor Chris, no quieres quedar como payaso por la próxima noticia, la novia de Christopher Vélez se rompió una pierna por culpa de sus tacones, necesita clases para aprender a caminar en ellos - Comentó divertida.
- Siempre podemos hacer el ridículo juntos, no te preocupes - Dije.

Ella me regaló una sonrisa y sin más nos dirigimos al elevador.
Los tacones si eran altos, pero ella era una exagerada, caminaba muy bien en ellos y la hacían lucir mucho más estilizada, definitivamente íbamos a llamar la atención.

(...)

- Ay no, ay no, me voy a morir, vamos a bailar amor mío - Gritó ___ emocionada en mi dirección.

Si bien ella no estaba muy ebria, si disfrutaba un poco más de la música y por su puesto que de bailar, y gracias al cielo recordaba que públicamente somos novios y me habla bonito.
A tu merced comenzó a sonar, volviendola completamente loca, tanto que no me pude negar y la tomé de la cintura.
___ me sorprendió tanto cuando se puso de espaldas a mí y comenzó a mover su cintura y trasero de una forma tal, que incluso llamó la atención de mis amigos y algunos otros chicos, vaya vaya, no conocía este lado de ella.
Yo solo me deje llevar por la música y lo bien que esta mujer se movía.

- Todas las miradas sobre mi hermosa novia - Le dije en el oído una vez que la canción se acabó.
- Me encanta esa canción, no me pude resistir - Mencionó con una sonrisa.
- Lo pude notar, bailas muy bien - Aseguré.
- Ya sabes a quien llamar para un concurso de baile - Dijo divertida mientras me guiñaba un ojo.
- Ya he tomado nota -.

(...)

- Me divertí demasiado chicos, gracias por la noche - Dijo ___ con una enorme sonrisa en el rostro.
- Ese era el propósito, nos alegra verte tan feliz - Comentó Zabdiel.
- Espero que sigas así de animada, las fiestas no acaban - Le hizo saber Richard.
- Ya comienza a gustarme amanecerme con ustedes - Comentó gustosa.
- Eso ___, así se habla - La apoyo Erick.

Los chicos y ella se despidieron una vez que estuvo lista con su ropa de vuelta, ya iría a dejarla a casa.

- Mañana estaremos en el estudio, vamos a grabar algunas canciones, Clara dijo que si crees que será aburrido no tienes que ir - Le dije.
- ¿Eso fue un no vayas ___? - Preguntó expectante.
- No, no, para nada - Me apresure a decir - A los chicos y a mí nos agrada tu presencia, pero no sé que te parezca la idea de escucharnos repetir algunas partes varias veces - Aclare.
- Nadie se imagina que podría escuchar antes que cualquiera incluso los errores de CNCO, me encantaría estar ahí - Aseguró.
- ¿En serio? - Pregunté con una sonrisa.
- Obvio sí, que experiencia más loca y cute - Respondió.
- Muy bien, entonces paso por ti a las diez de la mañana -.
- ¿A las diez de la mañana? - Preguntó incrédula - Christopher son las cuatro - Se quejó.
- Lo sé nena, lo sé, pero así es la vida, además, pasaremos a desayunar a algún lugar -.
- Bueno, está bien, te veo a las diez de la mañana, más vale que seas puntual porque no voy a levantarme temprano en vano sin haber dormido bien - Dijo.
- A las diez en punto señorita - Afirmé.

|Al día siguiente|

En cuanto estuve afuera de su casa le envié un mensaje a ___ para que saliera, pasaron cinco minutos cuando pude verla a través de la ventana, y realmente lo que mis ojos vieron no lo esperaba.
Estamos acostumbrados a verla con sus sudaderas o suéteres enormes que cubren la mayor parte de su cuerpo, entre ello sus glúteos, que con las ocasiones que la he visto en vestido, es grande ese trasero, sin verlo morbosamente.
Sin embargo ahora traía puesto un corto suéter rosa que dejaba ver un poco de su abdomen, un abdomen plano que no tenía idea del porque ocultaba, sus pechos tenían un tamaño perfecto a su cuerpo, ¿Por qué se escondía debajo de esas enormes prendas?
Su cabello estaba atado en un moño no muy desarreglado, la verdad la hacía ver muy bien.

- Vaya, increíble - Mencioné una vez que subió al auto.
- Así es, yo tampoco sabía que lo tenía en mi clóset - Dijo.

Ella besó mi mejilla y se colocó el cinturón de seguridad.

- ¿Y tus enormes sudaderas? - Le pregunté.
- ¿Me veo muy mal así vestida? - Inquirió.

Vaya que estaba preocupada por ello.

- Claro que no, te ves muy bien, demasiado bien diría yo - Aseguré.
- ¿Lo dices en serio? Porque si lo haces por compromiso me enojare demasiado, no voy a molestarme si me dices la verdad - Comentó.
- Es que digo la verdad, te lo digo desde la opinión de un hombre, sin envidia y con total honestidad, te ves hermosa - Me sincere.
- Te juro no estaba segura de usar ésto, pero mi mamá uso alguna especie de terapia en mí y me hizo ver que ahora debo verme bonita para mi novio, dice que no puedo seguir escondiéndome en esas enormes sudaderas - Explicó.
- Bueno, ya puedes decirle que tienes un novio aún más feliz, no solo por este cambio, sino porque incluso con esas enormes sudaderas también era feliz y te veía igual de bonita -.
- Ay, Christopher, en cuanto se acabe el contrato busca una novia de verdad, la harás muy feliz, lo digo en serio - Mencionó.

Incluso cuando creí que al menos se sonrojaría por mis palabras, ella solo lo tomó con una calma que sin duda me confunde demasiado, ___ es tan diferente.

|Dos extraños| Christopher Vélez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora